Entrevista al Card. Della Poltrona sobre el nombramiento de obispos
(ECOS de la CAVERNA) En una entrevista concedida en exclusiva a ECOS de la CAVERNA, el famoso Cardenal Piero Grassone Della Poltrona explica el proceso informal de preparación de los nuevos obispos en la Iglesia Católica. La entrevista ha sido traducida del italiano por nuestro traductor, G. Úguel Transleitor.
- Gracias por esta entrevista, Eminencia.
Es un placer, hijo. Para eso estamos.
- En la Curia todo el mundo dice que, extraoficialmente, Su Eminencia es todopoderoso a la hora de decidir quién va a ser obispo y también que se encarga de explicarles a los nombrados cuál debe ser su labor episcopal.
Bueno, bueno. Yo no diría tanto, povero me! Algo de influencia sí que tengo, claro, pero nada más. Y es verdad que acostumbro a impartir un breve retiro espiritual a los nuevos obispos, para ayudarles a entender cuál es su misión.
- ¿Qué les dice a los obispos recién nombrados?
Empiezo siempre mis retiros explicándoles que lo más importante es seguir el ejemplo de Cristo.
- Un enfoque tradicional…
Eso es, eso es. Tradicional y a la vez, moderno. ¿Cuál es ejemplo de Cristo? Lo podemos ver en la parábola de la tempestad calmada. ¿Qué es lo que hace Cristo? ¡No hacer olas! ¡Eso es lo importante! Un obispo no debe hacer olas ni dar nunca problemas a la Iglesia.
- ¿…?
No soy más que un pobre cardenal, pero, cada vez que me consultan en la Congregación sobre un candidato a obispo, ese es el consejo que doy: ¿Hace olas? Si las hace, mejor no nombrarlo. En cambio, si no da problemas, si pasa inadvertido y no causa dolores de cabeza, será un excelente obispo. Gracias a Dios, suelen hacerme caso.
- Ya… ¿Y el resto del retiro es igualmente bíblico?
Claro que sí. Suelo continuar con la doctrina de San Pablo sobre los obispos.
- Otro clásico.
Dice el Apóstol que debemos ser buenos administradores…
- …de los misterios de Dios.
Bueno, administradores al fin y al cabo. Y yo se lo repito muchas veces a los nuevos obispos: lo fundamental de un obispo es la administración. Nuestra misión no es rezar (para eso están los monjes), ni ayudar a la gente (ya tenemos las ONG), ni saber mucho de la fe (no somos teólogos). Lo específico del obispo es la administración. Si un obispo administra bien su diócesis, no se queda sin dinero y todos los papeles están en orden, llegará lejos.
- ¿Cómo de lejos?
Quizá incluso a ser cardenal. No se puede llegar mucho más lejos que eso en esta vida [risas].
- ¿Algún consejo “bíblico” más para los nuevos obispos?
Si para algo me sirve la experiencia de tantos años es para dar consejos. Il Cardinale consigliere, me llaman. El tercer gran principio que intento transmitir es otra frase de Jesús: dar al César lo que es del César y a Dios lo que es de Dios.
- Muy espiritual.
Y muy práctico, porque es una regla que no falla nunca para distribuir el tiempo de un obispo: la mitad más o menos para las cosas de Dios (como decir Misa, ocuparse de la organización de la diócesis, etc.) y la otra mitad, para las cosas del César.
- No sé si nuestro Señor realmente quería decir… ¿A qué se refiere con “las cosas del César"?
A la política, por supuesto. Todo buen obispo tiene que saber de política. Dopotutto, una gran parte de su tarea es llevarse bien con los gobernantes y otros políticos, hacerles favores y conseguir favores a cambio. Hoy por ti, mañana por mí, que es otro pensamiento muy bíblico. Y lo cierto es que no es fácil. Por ejemplo, escribir una carta pastoral sobre las elecciones que no moleste a absolutamente ningún político requiere un gran esfuerzo.
- Confieso que yo sería incapaz de escribirla [risas]. En ese retiro que imparte, ¿también utiliza conceptos tomados de la Teología?
Certissimo! Mi último gran consejo lo tomo de Santo Tomás, que, como ya sabe, decía que hay que buscar el término medio entre la virtud y el vicio. Yo desconfío de los obispos demasiado virtuosos, con mucha fe o muy místicos. Esos siempre dan problemas. Lo mejor: el bienaventurado término medio. La aurea mediocritas, como decía un padre de la Iglesia.
- Ya veo. Una última pregunta: ¿tienen éxito sus consejos? ¿Le hacen caso los obispos?
Creo que los resultados están a la vista. Puedo decir con orgullo que tengo muchos discípulos, a los que yo llamo, con cariño, mis vescovi poltronelli. Son el presente, y el futuro, de la Iglesia.
- Muchas gracias, Eminencia.
No hay de qué, hijo, no hay de qué.
47 comentarios
La respuesta del Cardenal fue muy típica de él y, si me permite la redundancia, magistral: "Ma perché? No merece la pena. Si ya no lo reza nadie".
Y, como siempre, el Cardenal tiene toda la razón "suficiente": el principio de "mediocridad" es el arjé actual de casi todo. Perdonen la digresión filosófica.
Eso sí: Card. Della Poltrona conoce como un GPS y G. Úgelmaps la realidad completa de nuestra Iglesia.
Posible solución: Hacer primar la fantasía. Imaginar un escenario tan loco y delirante en el que los mandamientos de Dios son cumplidos sin cuestionamiento alguno, donde ningún miembro de la Iglesia osaría modificar una enseñanza de Jesucristo, bajo el pretexto de haber quedado desactualizada. En una palabra: un escenario en que sea imposible reconocer ningún aspecto que tenga similitud con la realidad. Donde se pueda afirmar que: "cualquier semejanza con la realidad es pura coincidencia".
Espero haber aportado un granito de arena para la mejora de ECOS de la CAVERNA.
Me recuerda al beato Peperino cuando, en su lecho de partida (jugaba al pocker acostado), nos recomendaba proféticamente la lecutra de su libro:
"Cúrame con tu verso". Todo un pueta, el ordinario (Mendieta dixit).
Al final de cuentas, tenía razón mi vecino "el Jilguero" (apodado así por sus dotes en la comisaría...): "Cada día está más dificil llegar a cardenal" Volar, vuela cualquiera; ¿cantar? hasta Shakira... Pero permanencer haciendo equilibrio en la rama sin que te bajen de un gomerazo ¡Eso no es kasper para cualquier cabello!
Salutis a tuttis.
Quien sabe....
(A lo mejor me he pasado un poco.... obispos defendiendo una huelga de proabortistas.... eso ya es demasiado.... Creo que me he pasado bastante en mis elucubraciones. Tendré que arrepentirme de ser tan mal pensado).
Ahora el G9 (que no es un grupo de oración) parece que quiere darle atribuciones doctrinales a las conferencias episcopales locales. Si hacen eso la propuesta del Cardenal no servirá ya que habrá enormes olas.
Había aproximadamente 120 CE de rito latino. Europa, América, Asia, Oceanía, África Conferencia Interritual de la India, Conferencias Episcopales Internacionales, Sínodos patriarcales, Sínodos archiepiscopales mayores. Concilios de Iglesias Orientales, Asambleas de Ordinarios Orientales.
Se imaginan lo que puede ocurrir si cada una posee autoridad doctrinal, debería primero liberarse las costumbres de vestido, calzado, símbolos episcopales, el báculo nativo, libre elección del color del solideo, tatuajes diversos.
Su imaginación es como botella magnum de champán agitada y destapada y aun como géiser feraz de Islandia.
¿Qué Cardenal podría autonombrarse Portavoz de Nuestra Señora sin ser inmediatamente llamado al orden y quizás cesado ? Su felino y montaraz carácter ante profanaciones de capillas ¿Le librarían de una severa corrección aunque tuviera cuatro licenciaturas expedidas por Danone?
Seamos serios .
Son las sorpresas del Espíritu. O del espíritu. O de los anglosajones spirits, vaya usted a saber.
Aprovechen la oportunidad.
Si son bobos qué más da lo que hagan. No se arrepentirán.
Saludos cordiales.
Saludos cordiales.
En fin, que hoy día y después de mi dilatada experiencia de cohabitación animal, no sabría qué hacer con una mujer, no se a qué hora hay que echarle de comer ni qué pH debe tener el agua ni qué temperatura ambiente. Y luego está eso del dolor cefálico permanente...;: ¡un lío!
Vamos que me quedo con mi cabra; escribiré a Maradiaga para que me subvencione el pienso.
Y eso me recuerda una anécdota real como la vida misma. Tenía yo una maceta en el alfeizar de la ventana de mi aula de Primaria que una mañana de primavera se mostró llena de puntitos rojos, y exclamé:
-¡Cuántos capullos!
Al poco recibí la visita de unos padres bastante enojados porque su hijo les había dicho que yo decía palabrotas y menospreciaba a los niños. Deshice el entuerto gracia al DRAE y a la maceta que seguía llena de los susodichos.
Que digo yo...¿cómo sabía él que llegaría a santo?
Y me alegro de que después del impacto, el rododendro siguiese intacto, incluso conservando los capullos.
En cuanto al método de Della Poltrona tiene sus peligros, porque el Episcopado es cosa brava y mandar a crucificarse a uno que a lo mejor sólo piensa en no hacer olas es hacerle un muy flaco favor.
Saludos cordiales.
"Todo el mundo está en la estufa,
Triste, amargao y sin garufa,
neurasténico y cortao...
Se acabaron los robustos,
si hasta yo, que daba gusto,
¡cuatro kilos he bajao!
Hoy no hay guita ni de asalto
y el puchero está tan alto
que hay que usar el trampolín.
Si habrá crisis, bronca y hambre,
que el que compra diez de fiambre
hoy se morfa hasta el piolín. "
Saludos cordiales.
"Cuando rajés los tamangos
Buscando este mango
Que te haga morfar"
Saludos cordiales.
Qué buenos son, nuestros carceleros,
qué buenos son,
que nos llevan a la modernización.
(Para musiquearlo por los señores. D. Tannhäuser y D. Néstor y cantado por Doña Palas. Si a vuecencias les parece).
Saludos cordiales.
Dª Palas: No sea modesta, seguro que tiene Voacé una angelical voz canora o en su defecto, una adorable voz de mando legionaria, el sexo débil ha hecho gimnasia, ya se sabe, (sobre todo desde ayer). Por lo menos si no un aria de Donizetti, podrá cantar "el novio de la muerte" o el Himno Nacional.
Y es que, como dijo aquel, la realidad supera a la ficción.
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