(EP/Diario de Navarra/InfoCatólica) El arzobispo de Pamplona ha recordado las palabras del Papa Juan Pablo II en su visita en 1982 a Javier: "Cristo necesita a los jóvenes y os llama, para ayudar a millones de hermanos vuestros a ser plenamente hombres y a salvarse". Mons. Francisco Pérez ha manifestado que "ser cristiano es tomar cada día la decisión de seguir a Jesús con radicalidad y firmeza" y que, puesto que "Jesús anunció a sus discípulos que vendrían lluvias, vendavales, tribulaciones", el cristiano "tiene que ser sabio y edificar sobre roca para que la casa no se tambalee”
Después de un viernes desapacible, en la que los peregrinos riberos tuvieron que caminar con frío, lluvia y barro, ayer se vivió "el día perfecto" para marchar a Javier. Alrededor de 4.000 personas llevaron a cabo los 55 km. desde Pamplona con sol y temperaturas máximas de 13 grados. Se sumaron a los 1. 500 peregrinos de la Ribera y a cientos más que peregrinaron desde Tierra Estella, la Zona Media y la Montaña, muchos de ellos caminando desde el jueves. En cuanto a la asistencia al Castillo de Javier en esta primera jornada, la Policía Foral contabilizó el sábado 1.200 coches particulares, 8 autobuses y en torno a 5.500 personas.
La Iglesia y las personas que necesitan a Dios
El arzobispo de Pamplona y obispo de Tudela, Francisco Pérez, ha afirmado que ante la crisis la Iglesia "quiere estar ahí, quizás no para solucionar todos los problemas, pero sí para comprender, acompañar y solidarizarnos con los que lo pasan mal".
"Hay a nuestro alrededor muchas personas que tienen graves dificultades económicas y serios problemas de supervivencia. Y que más de uno se plantea severas dudas sobre la existencia de Dios, sobre su Providencia, sobre el sentido del cristianismo, pero ahí quiere estar la Iglesia", ha destacado Francisco Pérez, durante su homilía con motivo de la misa de la primera Javierada de 2011.
El arzobispo de Pamplona ha incidido en que "ser cristiano es tomar cada día la decisión de seguir a Jesús con radicalidad y firmeza" y ha recordado que "Jesús anunció a sus discípulos que vendrían lluvias, vendavales, tribulaciones", pero que "el discípulo tiene que ser sabio y edificar sobre roca para que la casa no se tambalee".
"No hablamos de política ni de economía, pero somos conscientes de que estos tiempos no son favorables", ha reconocido monseñor Pérez, quien ha insistido en que la Iglesia quiere, ante estos tiempos de crisis, "ser sembradores de paz y de alegría" y "el hombro donde pueda apoyarse todo el que sienta que se le doblan las rodillas de la fe". "La labor de la Iglesia en Cáritas es un ejemplo de la cercanía de una madre con los que más sufren", ha sentenciado.
Palabras a los jóvenes
El arzobispo de Pamplona ha puesto de relieve que "con frecuencia" le preguntan si "el cristianismo no está superado y si se puede aún hoy razonablemente ser creyente", a lo que ha contestado que, como dijo el Papa Juan Pablo II en su visita en 1982 a Javier, "Cristo necesita a los jóvenes y os llama, para ayudar a millones de hermanos vuestros a ser plenamente hombres y a salvarse".
"Vivid con esos nobles ideales en vuestra alma y no cedáis a la tentación de ideologías de hedonismo, de odio y de violencia que degradan al hombre", ha señalado el arzobispo de Pamplona, quien ha destacado que el "modo de honrar" al "gran Juan Pablo II" es "escuchar y poner en práctica su invitación, especialmente cuando estamos a pocas fechas de verle declarado beato en mayo".
Al inicio de la eucaristía, que ha comenzado a las 10 horas en la explanada del Castillo de Javier, se ha dado lectura a un mensaje enviado por Benedicto XVI, en el que el Papa saludaba "cordialmente a los participantes en las Javieradas 2011" y les anima a "dejarse conducir por la luz de la fe, para que, unidos a Cristo, estén siempre dispuestos a caminar con él construyendo el reino de Dios".
La peregrinación hasta Javier, desde todos los puntos de Navarra y muchos otros de España
La normalidad fue la tónica general de la caminata de ayer, según destacaron tanto fuentes del arzobispado como del Gobierno foral. "Es una gozada ver a los peregrinos con este sol", destacaba a mediodía el sacerdote José Mª Aícua Marín, delegado diocesano de Misiones y Javieradas. "Está habiendo una buena afluencia de caminantes", agregó satisfecho.
El P. José Luis Cincunegui SJ, rector del Santuario de Javier, afirmó por su parte que "los de la Javierada y la Novena de la Gracia son días grandes para Javier". "Esperamos superar las cifras del año pasado. Vienen unas 9.000 personas en la primera, unas 21.000 en la segunda, y otras 10.000 personas entre semana", expuso. Según el Gobierno, alrededor de 5.500 personas se habrían dado cita ayer en Javier, donde Policía Foral contabilizó 1.200 vehículos y 8 autobuses.
Se practicaron algo más de 1.000 atenciones sanitarias, bastantes menos que las 1.800 del año anterior. Cruz Roja efectuó un total de 1.063 entre viernes y sábado (hasta las 20.00 horas) en más de 25 puestos fijos y móviles, la mayoría por lavado de pies, masajes y ampollas. La DYA, por su lado, 120 durante el sábado en sus campamentos sanitarios de Monte Peña y Sangüesa. Los equipos sanitarios que han formado parte del dispositivo organizado para la primera de las Javieradas de este año sólo han tenido que trasladar a cuatro caminantes a centros de salud entre el viernes y el sábado. Por rutas de peregrinación, en el tramo de Pamplona a Javier los voluntarios han atendido a 381 caminantes; en el tramo de la Ribera navarra, 411 personas han recibido algún tipo de asistencia y en la Zona Media se ha proporcionado atención a 194 peregrinos.