(Avan/InfoCatólica) Además de la Medalla de oro, el Colegio Madre Petra entregará varias Medallas de Plata, una de ellas a la alcaldesa de Torrent, Mª José Catalá, que ha sido nombrada madrina de honor de la cofradía de la Majarí Calí. Las distinciones “pretenden reconocer la labor y el apoyo que distintas personalidades han dado al Colegio de niños gitanos, coincidiendo con el 40 aniversario de la llegada de su directora a la localidad para atender al pueblo gitano y fundar el centro”, dijo la “madre Gertrudis”.
Se trata de la primera vez que el Colegio concede la Medalla de Oro a una personalidad y, el arzobispo la recibirá de manos de un niño del centro que, por primera vez también en la historia de la institución, entrará en el Seminario, según indicó también la religiosa a la agencia Avan. El niño es un alumno de abuelo gitano, de abuela colombiana y cuyos padres son igualmente colombianos, añadió.
Romería
Tras la celebración de la eucaristía, se desarrollará una romería con la nueva imagen de la Majarí Calí que ha sido elaborada para que presida su ermita. Durante el trayecto, así como en la misa, participará la Asociación de la Cultura Andaluza de Torrent, que ofrecerá cantos y bailes típicos.
Una vez finalice el recorrido, la imagen de la Virgen, que es una réplica de la “Majarí Calí” original, de 1,30 metros de alto, que se venera dentro del Colegio, será depositada en su nueva capilla que, realizada con ladrillos ‘caravista’ y cañizos, se alza en el jardín del colegio.
La madre Gertrudis Rol y el Colegio de niños gitanos
La construcción de la capilla ha sido promovida por la religiosa Gertrudis Rol “para fomentar su devoción”, según la propia religiosa. La capilla, de apenas tres metros de alto, tiene una de sus cuatro paredes totalmente acristalada “para que pueda verse y venerarse desde el exterior la imagen, que ha sido instalada sobre un carro de madera”.
La religiosa fue recibida hace 40 años en Torrent “a pedradas por un grupo de gitanos cuando intentaba enseñarles a sumar con una pequeña pizarra bajo un árbol”. Hoy, más de tres mil niños y niñas gitanas han pasado por las aulas del colegio “Madre Petra” que fundó en aquel lugar “la madre Gertrudis” y en cuya construcción colaboró con un donativo personal el papa Juan Pablo II.