(FarodeVigo/EP/InfoCatólica) Gracias a la ley que sacó ayer adelante el PP en el Parlamento gallego, el gobierno de Alberto Núñez Feijóo creará una “red de apoyo a la mujer embarazada”, financiada con fondos públicos y gestionada por la asociación Red Madre. La iniciativa legislativa popular defiende el derecho a la vida desde el mismo momento de la concepción y promueve la implantación de medidas de carácter social, jurídico, sanitario y asistencial que faciliten y garanticen el derecho de la gestante a culminar el embarazo.
La tensión se mostró desde el comienzo del debate, pues en la tribuna de invitados se encontraban un grupo de pro-abortistas y otro de Red Madre, y en los escaños, las diputadas del PSOE vestían camisetas moradas con el lema “Vivir es decidir”, que algunos de sus compañeros –Abel Losada, Francisco Cerviño, José Manuel Lage y Modesto Pose– situaron también delante de sus respectivos escaños.
PP frente a PSOE y BNG
La intervención de la diputada popular Paula Prado, que acusó a socialistas y nacionalistas de no respetar la decisión de las mujeres que, en vez de abortar, prefieren seguir adelante con su embarazo, produjo la indignación en las bancadas de la oposición, con aplausos de los diputados del PP y abucheos y gritos por parte del PSOE y BNG. Ana Pontón (BNG) pidió la retirada de las palabras del diario de sesiones y las parlamentarias socialistas se sumaron a las quejas, por entender que se les estaba acusando de cometer un delito, el de obligar a abortar.
La presidenta del Parlamento, Pilar Rojo reclamó respeto con los oradores y calificó las protestas de la oposición, como “inauditas e impresentables”, rechazando la petición del diputado del PSOE Modesto Pose para replicar a las palabras de Paula Prado. “Obligar a abortar es un delito”, le recriminada Ana Pontón. “¿Cómo se atreve a decir que no respetamos a las mujeres? ¿Es que el PP quiere forzarlas a tener hijos?”, terciaba la socialista Silvia Fraga. En ese momento irrumpieron en el debate las mujeres que seguían el pleno desde la tribuna de invitados, lo que motivó que Pilar Rojo las expulsara del palco, por no estar permitido hablar desde allí.
La ley se aprobó con los únicos votos favorables del PP, por entender que se trata de una iniciativa de “sentido común”, sin carga ideológica, que debe entenderse como un pilar más del “Estado social”, y para el futuro de Galicia. “¿Podemos permanecer indiferentes antes su grave problema demográfico?”, se preguntaba Paula Prado, ignorando las risas de las oposición.
Para PSOE y BNG, la ley es “rancia”, cargada de moralidad improcedente, un retroceso de décadas y una agresión para los derechos de las mujeres que bajo una “apariencia inofensiva” esconde una fórmula para financiar y dar cobertura a una “red antiabortista privada afín al PP” y para boicotear la aplicación de la Ley del Aborto aprobada en el Congreso. El grupo de feministas pro-abortistas abandonó el hemiciclo gritando “¡Somos personas, no incubadoras!”.
Red Madre: “Hoy es un gran día”.
Al término del debate y tras la aprobación del texto, la portavoz de Red Madre, Coloma Viúdez, manifestó su satisfacción por la aprobación del texto y felicitó a las mujeres gallegas porque, desde hoy, “tendrán la posibilidad de elegir”. “Hoy es un gran día”, aseguró. Del mismo modo, rechazó las críticas de la oposición, por las que dijo sentirse “muy dolida”. “Me duele, sobre todo, la disociación de lo que plantean aquí y de lo que se opina en la calle, les sorprendería saber cuántos de sus partidos han firmado la ILP”, señaló Viúdez.