(LaNación/InfoCatólica) El mensaje, dirigido a la comunidad escolar, fue también recibido por el ministro de Educación de la Nación, Alberto Sileoni; el secretario de Culto, Guillermo Oliveri, y el jefe de gobierno porteño, Mauricio Macri, en el primer encuentro que tuvo con Bergoglio tras el enfrentamiento suscitado por el matrimonio gay.
El cardenal profundizó sus críticas a Macri, al advertir sobre la fragilidad de la lucha contra la droga. "¿Preparamos a los chicos para recibir la semilla de la esperanza o les damos tres o cuatro cosas que terminan fracasando en la esquina con el que viene a venderles merca?", dijo el cardenal, al señalar que "esto sucede en esta ciudad y no sólo en los barrios periféricos, sino en el centro de la ciudad".
Ya en la homilía del último Jueves Santo, Bergoglio había advertido que el pueblo está cansado de las agresiones, los enfrentamientos y la crispación. Ahora llamó a revertir la pobreza y los sueldos mal pagos a los docentes, que llevan a muchos a señalar que "la educación es la parienta pobre de nuestra estructura social". Exhortó a los dirigentes a "dar testimonio y trabajar en lo que hemos recibido para hacer crecer la patria y proyectarla hacia el futuro", para evitar que "nuestra vida termine en un rincón de la existencia llorando la milonga de nuestro fracaso".
Y, en referencia a los desencuentros y disputas que se perciben en el mundo político y social, dijo que es necesario que hoy "el Señor haga lo mismo que hizo esa tarde con ese conventillo que se había armado en la casa de los discípulos, con esas internas mezquinas de miedo y desorientación".
Finalizada la homilía, Macri, Oliveri, el ministro de Educación porteño, Esteban Bullrich, el legislador Aníbal Ibarra y líderes de distintas religiones participaron de un homenaje al Bicentenario. Frente al cuestionamiento que hizo Bergoglio, al advertir que no se trabaja para el futuro y para la esperanza, el secretario de Culto dijo que "en el país hay esperanza, horizonte y mucha garra por delante".
Macri, por su parte, fue aplaudido por los estudiantes cuando puso al futbolista Martín Palermo como ejemplo de "constancia, disciplina y trabajo en equipo".