(Efe/InfoCatólica) Según han informado a Efe fuentes de la Policía, la unidad adscrita a la Junta, que refuerza las tareas de vigilancia durante el estado de alarma, ha avisado de la entrada de personas al templo y ha movilizado a los agentes hasta la Catedral de Granada.
En el interior del tempo, el arzobispo, Mons. Francisco Javier Martínez, estaba presidiendo la Celebración de la Pasión del Señor, liturgia del Viernes Santo, que ha sido interrumpida para comunicar a la veintena de personas que asistía que no podían permanecer allí.
«La Policía dice que tenemos que desalojar la iglesia, que si no sancionarán a las personas presentes uno por uno», ha comunicado el arzobispo antes de pedir a los congregados que se acercaran a comulgar y salieran del templo.
Esa veintena de personas han recibido la comunión de manos de Monseñor Martínez y han abandonado la catedral, tras lo cual el arzobispo ha continuado celebrando los oficios que se estaban transmitiendo por televisión.
Fuentes del Arzobispado han explicado a Efe que, hasta la llegada de los agentes, y atendiendo al artículo 11 del Real Decreto que ordenó el establecimiento del estado de alarma, estaban celebrando con fieles desde el convencimiento de que es una práctica permitida.
Han recordado que se establecía que se podría acudir a lugares de culto siempre que se mantuvieran las distancias recomendadas por las autoridades sanitarias, que en este caso se cumplían, y con una limitación de aforo, con una veintena de personas en un espacio con capacidad para unas 900.
De hecho, en cualquier supermercado que permanece abierto en estos días, se encuentran al mismo tiempo muchas más personas de las que estaban hoy en la catedral granadina. Las 20 personas podían guardar perfectamente la distancia requerida por las normas vigentes durante la actual pandemia en España.
La Policía desaloja la catedral de #Granada. Había una veintena de fieles en misa de #ViernesSanto pic.twitter.com/wBod4qrrLz
— Fernando H. Valls (@FernandoHValls) April 10, 2020