(CNA/InfoCatólica) Después de que los obispos católicos de Escocia subrayaran que el derecho a la vida es fundamental, la Conferencia Episcopal ha publicado una carta en la que se exponen las enseñanzas de la Iglesia sobre el aborto y el suicidio asistido antes de las elecciones generales del Reino Unido, que se celebrarán esta semana.
«Todos tenemos el deber de defender el derecho humano más básico y fundamental: el derecho a la vida», afirma la carta de la Conferencia Episcopal de Escocia, publicada el jueves antes de la votación del 12 de diciembre. «Debemos instar a los candidatos a que reconozcan la vida humana desde el momento de la concepción hasta la muerte natural y a que la protejan legalmente en todas sus etapas, incluida la protección del feto, velando por que tanto la madre como el niño sean aceptados y amados».
Los obispos no respaldaron a ningún partido político o candidato, pero dijeron que el aborto, el suicidio asistido y la eutanasia eran «siempre inaceptables desde el punto de vista moral» y que debía instarse a todos los políticos a que combatieran la despenalización del aborto, que llevaba al aborto libre por cualquier motivo.
La Conferencia Episcopal de Escocia también informa en su sitio web sobre los votos de los políticos en varios proyectos de ley, organizados por circunscripciones parlamentarias. Se trata de su historial de votos con respecto a la despenalización del aborto, que según la Conferencia despejaría el camino para el «aborto libre, por cualquier razón, hasta el nacimiento». También se registran los votos de los parlamentarios sobre un proyecto de ley para legalizar el suicidio asistido, así como su voto sobre la imposición de la legalización del aborto y el «matrimonio» entre personas del mismo sexo en Irlanda del Norte. El sitio web también proporciona enlaces a los manifiestos de los partidos principales y ofrece información sobre el censo de votantes y los métodos de votación.
Los obispos de Escocia subrayaron la necesidad de votar de una manera que manifestase la fe católica. «Estas elecciones generales nos presentan la oportunidad de elegir representantes que reflejen lo más fielmente posible nuestras creencias», dijeron en su carta. «Son una ocasión para recordar la doctrina social católica y vincular nuestro voto a nuestra fe católica. Pueden ser una oportunidad para proclamar la dignidad y el valor inherentes de todos los seres humanos, creados a imagen y semejanza de Dios, y para promover el bien común«.
Los obispos dijeron también que en política se había formado una atmósfera divisiva, principalmente como resultado del referéndum sobre el »Brexit« de la Unión Europea, y lamentaron que el debate vigoroso se hubiera convertido a veces en ataques personales y actos de violencia, »que nunca son aceptables«.
Anthony Horan, director de la Oficina Parlamentaria Católica para Escocia de la Conferencia Episcopal, envió otra carta a los sacerdotes, según informa el Scottish Catholic Observer. «Si bien tendemos a ver la política a través de un prisma partidista, estas elecciones generales nos presentan la oportunidad de elegir representantes que reflejen lo más fielmente posible nuestras creencias, incluida la dignidad y el valor inherentes de cada ser humano y la promoción del bien común», afirmó. Horan instó a los sacerdotes y a sus feligreses a «ponerse en contacto con todos los candidatos de su circunscripción y hacer que se pronuncien sobre los temas planteados en la carta pastoral de la Conferencia Episcopal de Escocia sobre las elecciones generales de 2019».
Las circunscripciones escocesas abarcan 59 de los 650 escaños de la Cámara de los Comunes. Si bien los candidatos pueden presentarse como independientes, la gran mayoría de los candidatos elegidos son miembros de uno de los principales partidos políticos.
La carta de los obispos de Escocia criticó la defensa del derecho al aborto realizada por el Gobierno del Reino Unido y el Parlamento escocés. «Nuestros gobiernos también deberían promover una cultura de vida en el extranjero, cambiando la práctica actual del Gobierno del Reino Unido de apoyar iniciativas contra la vida, que podría describirse como una colonización ideológica», dijeron los obispos.
Los obispos también destacaron la creciente escasez de la vivienda y la dependencia de los bancos de alimentos. Señalaron que el límite de dos hijos establecido por el Gobierno para las bonificaciones fiscales afectaba desproporcionadamente a las familias religiosas. «La sociedad depende de la familia para existir», explicaron. «El amor del hombre y la mujer en el matrimonio y su apertura a una nueva vida es la célula básica y fundamental sobre la que se construye la sociedad».
También se centraron en la tolerancia y la libertad religiosa. Los obispos pidieron una legislación que acogiera a las personas de «todas las religiones y sin religión», con respeto a los derechos de la conciencia y luchando contra la persecución religiosa y la intolerancia en todo el mundo, incluida la persecución anticristiana. «Creemos que una intolerancia progresiva hacia las creencias religiosas, incluido, aunque no únicamente, el cristianismo, se ha convertido en parte de la vida en la Gran Bretaña moderna», afirmaron los obispos. «Ciertos políticos y ciudadanos encuentran cada vez más difícil ser fieles a su fe en un entorno que intenta restringir la religión a la esfera privada».