(Xin Lu/Bitter Binter) El 21 de mayo, los Dos Concilios Cristianos Chinos de la provincia oriental de Shandong emitieron un documento donde obligan al clero cristiano en la jurisdicción a incluir la ideología socialista en el contenido de sus sermones. El documento, titulado Plan de implementación para llevar a cabo actividades de los cuatro requisitos en los sitios religiosos a lo largo de la provincia, obliga al clero a guiar a los creyentes para que fortalezcan su postura ideológica al integrar los valores socialistas fundamentales en actividades colectivas religiosas y en su vida diaria para infundirlos, finalmente, en la mente de las personas religiosas.
Como parte del plan de implementación, las iglesias fueron forzadas a colgar carteles propagandísticos preparados por el Gobierno con versículos de la Biblia que ilustran los doce principios de los valores socialistas fundamentales: prosperidad, democracia, civilidad, armonía, libertad, igualdad, justicia, gobierno de la ley, patriotismo, dedicación, integridad y amistad.
Este caso en Shandong no es un incidente aislado en el que las autoridades chinas asocian las creencias cristianas con la ideología socialista. A fines del año pasado, circuló en Internet la noticia acerca de La interpretación teológica de los valores socialistas fundamentales, una publicación de Wang Heping, de la Oficina de Teología de la Arquidiócesis Católica de Pekín. El autor supuestamente intenta encontrar los vínculos entre los principios del socialismo chino y la doctrina católica, interpretando los valores socialistas fundamentales basándose en la perspectiva de la fe católica. Ante esto, algunos cristianos comentaron que la elevación de los valores socialistas fundamentales al nivel de la teología equivale a considerar al Partido Comunista como Dios.El 17 de abril, los departamentos gubernamentales de la ciudad de Xinxiang en la provincia central de Henán convocaron a una reunión para los pastores de las iglesias que se encuentran en el área a los que se les exigió que entremezclaran, en diversos grados, la ideología del Partido y la cultura tradicional china en el contenido de los sermones.
Uno de los pastores dijo a Bitter Winter que esta acción forma parte de la política para sinificar el cristianismo y que el objetivo del Gobierno consiste en hacer creer a los fieles que no existe ninguna contradicción entre la cultura tradicional china y la Biblia, y que las dos coexisten en armonía. Dio un ejemplo de una cita de Confucio (551-479 a. C.), el filósofo y maestro chino más influyente: No hagas a otros lo que no quieras que te hagan a ti que se parece a Lucas 6,31.
Tal y como lo informó Bitter Winter, las autoridades en el condado de Luoning en Henán ordenaron a una iglesia protestante aprobada por el Gobierno que quitara de los Diez Mandamientos «No tendrás otros dioses fuera de Mí», y que dejara únicamente nueve.
El Partido Comunista Chino (PCCh) está siguiendo el camino de la Alemania nazi que dio su versión de la versión dejudaizada del Nuevo Testamento y, un año después, produjo un nuevo catecismo que contenía doce Mandamientos revisados, en lugar de diez, incluyendo Respetarás a tu Führer y maestro.
En el mes de marzo, la provincia surcentral de Hunán emitió una Descripción del plan de trabajo de cinco años de Hunán para promover la sinificación del cristianismo. El documento exige que se excave profundamente el contenido de la Biblia compatible con los valores socialistas fundamentales y se unan fuerzas para recopilar materiales de lectura fáciles de entender para entregárselo a los miembros del clero y creyentes laicos de iglesias de nivel comunitario, promoverlos ampliamente dentro del cristianismo y ampliar su influencia.
La sinificación del cristianismo ha generado muchos sermones ridículos. Lin Chaoqun, un pastor de una iglesia de las Tres Autonomías en la provincia suroriental de Fujian, interpretó la historia bíblica donde Jesús alimenta a cinco mil hombres con cinco hogazas de pan y dos peces. Posteriormente, sus discípulos toman doce canastas con pedazos de comida que sobraron, como un código de conducta para cuidar el medio ambiente. En aquel momento, el clima era cálido, explicó el pastor. Si no hubieran recogido los fragmentos de comida, el calor del sol habría provocado que la comida se echara a perder, contaminando, así, el entorno. El pastor Lin usó la historia para explicar la palabra civilidad en los valores socialistas fundamentales.
Quitar las cruces e izar las banderas nacionales son las prácticas que se ven de manera superficial. En contraste, incorporar los valores socialistas fundamentales en la Biblia es la trampa más insidiosa que fácilmente perturba el corazón de los creyentes. Es una distorsión de la fe cristiana. Es la obra del diablo, dijo un predicador de las Tres Autonomías. La situación está empeorando cada vez más; el Gobierno está aumentando la presión poco a poco. Al final, quieren eliminar por completo las creencias religiosas.
El PCCh también está acelerando el denominado entrenamiento rojo del clero. El 18 de marzo, el Comité de Asuntos Étnicos y Religiosos de la ciudad de Wuhan en la provincia central de Hubei comenzó un entrenamiento de adoctrinamiento de duración de una semana para 44 miembros del clero de iglesias que pertenecen a la Asociación Patriótica Católica China. Los cursos incluyeron temas como El espíritu del decimonoveno Congreso Nacional, El pensamiento de Xi Jinping acerca del socialismo con características chinas para una nueva era, Valores socialistas fundamentales, El I Ching y la filosofía, y temas parecidos.