(Efe) La norma, que entrará en vigor en 60 días, «refuerza» más de 25 leyes aprobadas en el Legislativo y «cumple con una promesa del presidente, Donald Trump, de promover y proteger los derechos a la libertad religiosa y de conciencia», plasmada en una orden ejecutiva que firmó en mayo de 2017, detalló el HHS.
El Departamento de Salud «protege» así a proveedores e individuos de «proveer, participar o pagar» servicios como los abortos –autorizados en todo el país–, las esterilizaciones o suicidios asistidos, que son legales en algunos estados.
«Esta norma garantiza que entidades y profesionales de la salud no sean acosados fuera del campo de la atención médica porque se niegan a participar en acciones que violan su conciencia, incluido terminar con vidas humanas», dijo en un comunicado el director de la Oficina de Derechos Civiles del HHS, Roger Severino.