(Agencias/InfoCatólica) El obispo auxiliar de Valladolid y Secretario de la Conferencia Episcopal, Mons. Luis Argüello, ha explicado, otra vez, el significado de la postura de la Iglesia respecto a la exhumación de los restos de Franco del Valle de los Caídos. El prelado ha recordado la otra ocasión en la que la Iglesia ha tenido que revisar sus palabras por acciones del Gobierno. Se refiere el portavoz de la Conferencia Episcopal a las palabras de la vicepresidenta del Gobierno, Carmen Calvo, tras su encuentro con el secretario de Estado de El Vaticano, Pietro Parolin.
Ayer varios medios de comunicación publicaron una carta filtrada por la Vicepresidente del Gobierno diciendo, con distintas variantes, que el Vaticano apoyaba la exhumación del Jefe del Estado. El diario El Pais, en su frenesí llegó a convertir al prior de la comunidad en abad, y por si no fuese suficiente atribuía al Secretario de Estado Vaticano la intención de que iba «a forzar» al superior de la comunidad benedictina.
Previamente el propio gobierno reconocía que precisa de autorización previa de los benedictinos o del Supremo para exhumar a Franco.
No hay ningún cambio
Comentando el caso, Argüello se ha remitido a los acuerdos Iglesia-Estado para terminar de responder a la cuestión. Lo que ha solicitado en virtud de esos tratados es que, pase lo que pase, se respeten los templos y lugares sagrados. Cuando la Iglesia dice que no se opone a la exhumación del cadáver, el obispo auxiliar recuerda las palabras del cardenal arzobispo de Madrid, Carlos Osoro, y el prior benedictino del Valle.
«Ambos dicen que, si el acuerdo entre el Gobierno y la familia se produce, o si no hay acuerdo, las autoridades judiciales dirimirán cuál será la decisión final, a la que la Iglesia no se opone». Y advierte de la posible confusión que podría surgir, para explicar que «es distinto decir: 'la Iglesia no se opone', a decir 'La Iglesia apoya la exhumación'».
El error de Carmen Calvo con la postura vaticana sobre Franco
En octubre vicepresidente Calvo regresó de un encuentro con el Secretario de Estado vaticano, Pietro Parolin, con un supuesto mensaje. La política socialista afirmaba que El Vaticano estaba a favor de la exhumación de Franco si así lo decían los jueces y que La Almudena no podía ser lugar para el descanso de sus restos.
El estado papal reaccióno con un inusual comunicado confirmando la primera parte de las palabras de Calvo, pero desmintiendo la segunda: «El cardenal Pietro Parolin no se opone a la exhumación de Francisco Franco, si así lo han decidido las autoridades competentes, pero en ningún momento se pronunció sobre el lugar de la inhumación».