(ACI) La Suprema Corte de Justicia de la Nación de México (SCJN) sentenció este 21 de noviembre que las parejas homosexuales tienen «derecho» a obtener hijos recurriendo a la técnica de reproducción asistida y el alquiler de un vientre materno, también conocido como maternidad subrogada.
En una nota de prensa, la SCJN señaló que «el derecho a convertirse en padre o madre es de toda persona», por lo que «debe reconocerse el derecho a las parejas homosexuales para acceder a los adelantos de la ciencia en materia de reproducción asistida, y a convertirse en padres o madres a través de esos métodos».
Según la Suprema Corte no es necesario un «vínculo biológico» para que se reconozca la «filiación jurídica» del niño con respecto a la pareja homosexual.
La sentencia responde al caso de «un matrimonio homosexual de varones» que procreó a un niño alquilando un vientre materno, usando el esperma de uno de ellos y el óvulo de una mujer anónima, en el estado mexicano de Yucatán. Las autoridades se negaron a inscribir al menor por falta de vínculo biológico, por lo que la pareja presentó un amparo que llegó hasta la Suprema Corte.
Para Juan Dabdoub, presidente del Consejo Mexicano de la Familia (ConFamilia), se trata de «una decisión absurda», con la que la SCJN «se está excediendo en sus funciones».
«Esta gente lo que está haciendo es inventarse nuevos derechos, haciendo interpretaciones torcidas de la ley», dijo y recordó a los ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación que «no son legisladores».
Dabdoub subrayó que estas decisiones niegan al menor «el derecho humano fundamental a tener papá y mamá».
«El problema es que tenemos una Corte en la que estos ministros se han convertido en dioses, en dictadores, porque nadie los puede tocar y ellos pueden tomar decisiones de carácter absurdo», señaló.
«Este tipo de actitudes son demasiado peligrosas para la sociedad», advirtió.
El presidente de ConFamilia subrayó que «si para procrear se requieren dos personas de diferente sexo, para criar también se requiere dos personas de diferente sexo, porque hombres y mujeres somos diferentes pero además somos complementarios»
Por su parte, Marcial Padilla, director de Conciencia y Participación (ConParticipación), criticó que la SCJN «está ignorando la biología básica de la especie humana: dos hombres no pueden procrear, dos hombres no pueden llegar a generar un hijo».
Además, indicó, al referirse a la reproducción asistida, la Suprema Corte «está convirtiendo a los niños en un objeto que se adquiere sobre demanda, como si fuera un producto, y a la generación de una nueva vida humana en un capricho de quien lo desee».
«Esto contradice varios principios de la dignidad del ser humano, sobre todo en que convierte al hijo en un objeto que se adquiere y se posee. Ese es el principio de la esclavitud», aseguró.