(La Voz de Galicia) A las tres de la madrugada de ayer, tras diez horas de trabajo, los 14 voluntarios de la Asociación Faro de Monte Alto acabaron de hacer la alfombra floral que cada año, desde el 2002, confeccionan en honor de la virgen del Rosario, patrona de la ciudad, cuya festividad se celebraba este fin de semana. Entre los voluntarios había personas de más de 70 años y mujeres con bebés.
Dos horas después, a las cinco de la mañana, los servicios de limpieza del Ayuntamiento entraban en la plaza de Santo Domingo, donde estaba, vallado, el trabajo, apartaban las vallas y se ponían a limpiar.
En poco más de un hora, y tras una actuación a fondo, con recogida de pétalos y baldeado con agua, no quedaba en el lugar ni rastro de la alfombra floral.
Indignación y tristeza entre los vecinos
La retirada de las flores por parte del Ayuntamiento se transmitió rápidamente entre los vecinos. Al presidente de la Faro de Monte Alto, Antonio Gómez Bello, se le saltaban las lágrimas por la mañana frente a un lugar en el que se congregaron un buen número de vecinos igualmente indignados. «Se me cayó el alma a los pies, no tengo palabras para definir a los sinvergüenzas que hicieron esto. No saben el daño moral que ha hecho, todo el material, además, estaba sin pagar. Ahora este es el sitio más limpio de la Ciudad Vieja. ¿A quién le molesta la alfombra floral? Esto es una venganza pobre, una bajeza, A Coruña tiene que despertar», decía ayer Gómez Bello anunciando también que su intención es presentar una demanda por lo sucedido.
«No creo que romper la cohesión de los barrios sea la labor de una Administración, la diversidad del barrio es obvia y evidente, y hay que respetarla. Esto no es justificable», decía ayer, también contrariado, el presidente de la asociación de vecinos, Pedro Roque.
Por la tarde tanto el gobierno local como la empresa que presta el servicio de limpieza viaria, Cespa, indicaron que se trataba de un error cometido por esta última y presentaron sus excusas, pero para entonces el malestar ya se había extendido entre unos fieles que iban a pasar el día de la patrona sin su alfombra floral. A Gómez Bello no le valen las explicaciones dadas después: «Son unos mentirosos, no se puede ser tan falso», dice.
Críticas de la oposición
Las reacciones de los partidos políticos de la oposición tampoco se hicieron esperar: «Desde la normalidad de la convivencia en una ciudad como la nuestra no se puede permitir que se avasalle desde el poder a la gente que no es de tu cuerda», decía el portavoz del PSOE, José Manuel García.
Más contundente se mostraba en sus redes José Nogueira, socialista e histórico concejal durante sucesivos mandatos hasta el 2015, que calificó al gobierno local de la Marea de «aprendices de franquistas».
La candidata del PP, Beatriz Mato, también abordó ayer el asunto: «El gobierno al que tanto le cuesta limpiar las fachadas se vuelve diligente el día del Rosario. ¿Otro error? ¿También echarán la culpa a un funcionario?», dice la candidata popular que lamenta el trato dado a las tradiciones locales.
Explicación oficial
Hasta las tres y media de la tarde, con las críticas por lo ocurrido corriendo por la ciudad, el gobierno local no ofreció su versión de lo ocurrido. La «retirada anticipada da alfombra floral» se debió «exclusivamente a unha interpretación errónea da solicitude remitida pola asociación Faro de Monte Alto o pasado 11 de setembro». Se pedía la limpieza de los restos «na madrugada do día 6 a partir das cinco da mañá, coma en anos anteriores». Pero se procedió a eliminar todo el tapiz por un «erro de interpretación exento de toda intencionalidade».
En el escrito de la asociación se solicitaba expresamente la retirada de «las cajas y restos de la alfombra». El Ayuntamiento añade que sufraga las actividades de la asociación -que todavía no cobró-, lo que demostraría «o nulo interese» de obstaculizar. La edil María García pretende reunirse hoy con Faro de Monte Alto para aclarar lo ocurrido y pedir disculpas por el «lamentable incidente».
Por su parte, la empresa que presta el servicio de limpieza, Cespa, indicó que se trató de un «malentendido» a la hora de ejecutar las instrucciones de limpieza y que no recibieron instrucciones desde María Pita para retirar la alfombra. Se ponen, dice, a disposición de Faro de Monte Alto para subsanar lo ocurrido.