El cardenal Marx dice estar sorprendido por la carta de Mons. Ladaria sobre la intercomunión

Cardenal Marx, dicho con los debidos respetos, porque creo que como laico y parte importante de la Iglesia como todos los laicos, " me sorprende que Ud. se sorprenda ".

Es el Santo Padre el que da su aprobación o manifiesta su apoyo a lo que Mons. Ladaria manifiesta, reseña y que para evitar repeticiones se recoge en el artículo.

Cardenal Marx, porque tiene que encontrarse una solución concordante que sea la que Ud. persigue, y el Santo Padre no tiene que manifestarle previamente a Ud. sus acuerdos o decisiones ya que es el sucesor de Pedro.

No vea en mis palabras, aún con la posibilidad de que no se lea mi comentario ( se que leen esta Web), alegría ante la decisión que le produce sorpresa, ya que veo en la misma acorde a la doctrina y de respeto al Cuerpo y la Sangre de Cristo en la Forma Consagrada, y nadie puede recibirla sino esta en Gracia de Dios. Otra cosa es que no se publique este mi comentario. Y estoy en Gracia de Dios, por lo que también particípó de las gracias del Espíritu al igual que un sacerdote.

Cardenal Marx: Tengo la sospecha que usted es de los que no admiten un NO por respuesta. Pero tiene que entender que no siempre podemos conseguir lo que pretendemos. A veces se gana, otras se pierde. Así es la vida.

Me adelanto a que al Cardenal Ladaria le van a hacer alguna movida a futuro por osar oponerse a Marx

Pues ya toca que también sean los herejes quienes se sorprendan, y no solamente los los ortodoxos...

Primo la enseñanza y estabilidad de la Iglesia, por sobre intereses particulares.
Pese hallarse en cierne un cisma, prevaleció la cordura en la jerarquia

Pues en esto el cardenal Marx tiene razón: en Roma le dijeron una cosa (buscar un resultado unánime) y pocas semanas después le llega una carta diciendo que el documento no está "maduro" (??)

Este es como los nacionalistas catalanes. Solo oye lo que quiere oir, solo ve lo que quiere ver, y llama "diálogo" a que le den la razón.

Parece que el Cardenal Ladaria S.J. es un poco antiguo - como los jesuítas de antes- y no le va lo de las grabadoras ni lo de las obispas ni lo del infierno ni lo de las comuniones " si, no " y lo de que el diablo es un modo de hablar.
No parece probable que lo echen muy pronto. Lo acaba de nombrar el Papa Francisco S.J.
Un cariñoso recuerdo a San Lutero, Cardenal Marx.

Cualquiera que no ve la Tradicion del Señor en los Apóstoles, llegan a sorprenderse por la verdad, no la llegan a comprender y la Verdad es rechazada por los modernistas. Uno no puede hacer inventivas contra la Palabra de Dios y engañarse: "esto es novedad del Espíritu Santo", nada de eso.

Cuantas veces se ha pedido que el Cardenal Marx y satélites, deberían, para el bien de la Iglesia, dimitir de sus funciones y alejarse en otros derroteros y andurriales.

Si conociese el Catecismo de la Iglesia Católica, si conociese cómo hablan los Padres de la Eucaristía... no se hubiera sorrprendido. Y se hubiera sorprendido de aquella petición de unanimidad en una cuestión sobre la que no hacía falta ningún debate más, porque la Iglesia tiene en ello un consenso unánime desde el principio.

No me extraña en absoluto que esté sorprendido. En cierto modo yo también, pues a veces me vino la tentación de pensar que se saldría con la suya como en otras ocasiones y a tenor del nuevo paradigma que quienes sean quieren que reine

Esta gente infiltrada en la Iglesia no comprende que el Papa es infalible, y que no puede cambiar el Magisterio milenario de la Iglesia.

Una cosa es una ambiguedad en un documento meramente pastoral, ó un guiño cómplice en la forma de una frase con doble sentido, con todo el escándalo que ésto pueda ocasionar, y otra muy distinta afirmar como Magisterio algo en contra de la Doctrina, los Dogmas y el Magisterio.

La infalibilidad es un Dogma, y ni siquiera un Papa decidido a hacer daño a la Iglesia ó a cambiarla de una forma revolucionaria, puede cambiar el Magisterio ya establecido.

"Pedro, a mí no me sorprende que "me sorprende que Ud. se sorprenda"."

Hay que recordar que para la moral católica, el pecador grave que comete un acto moral grave "intrinsece malum per se semper et pro semper", está privado de la comunión, la absolución y la extremaunción, más la participación en ciertos sacramentos y celebraciones y el acceso a cargos y oficios eclesiásticos, incluso (esto es vital) si su acto objetivo (fornicar) está eximido o atenuado en la culpa, imputabilidad y responsabilidad. Aún eximido en culpa subjetiva, la moral católica exige que se cesen los actos objetivos (fornicar), entre otros elementos.

Pero la moral luterana carece de la doctrina de los actos morales graves "intrinsece malum". Cualquier pecador tiene actos que son un " bonum imperfectum et incompletum", que se une al "Sola fide", estar salvado por el solo hecho de creer en Jesús.

Así, una unión homosexual tiene absolutamente todos los actos buenos de una unión heterosexual, excepto que son dos cónyuges del mismo sexo. El peso de lo bueno compensa el peso de lo malo, luego el acto es bueno aunque imperfecto. Y si cree en Jesús, ¿qué más se puede pedir?

Un genocida comete actos malos, pero puede tener, en otras esferas de su vida, otros actos buenos: ama su familia, hace actos de caridad. Pagará con la cárcel, pero estará salvo: cree en Jesús, el conjunto de actos buenos pesa más que el acto malo.

¡Surprise! Pero, a ver ¿esto es la Iglesia Católica, entonces? ¡Haber avisado antes, hombre! ¡Así no se puede!.

Saludos cordiales.

el Papa ha hablado.

No sorprende que a un día obscuro o a una noche siga un día más claro. Porque Dios no abandona a la Iglesia, y hasta de las piedras puede hacer hijos de Abraham. No es nuestro natural temor o nuestro natural pesimismo el patrón de medida de la realidad sobrenatural de la Iglesia. Los tiempos que vivimos están siempre bajo la atenta mirada de Dios, y para defendernos contra el ataque violentísimo de que es objeto la Iglesia, nos ha enviado a Su Madre a finde que abrevie los tiempos del anticristo, es decir, del demonio y le pise la cabeza. Por esto no debe sorprender que las fuerzas enemigas reciben de vez en cuando un cañonazo: es obra de María, que como Madre les advierte que recapaciten, que vuelvan atrás y se conviertan. Ella hace con sus hijos lo que nosotros no podemos hacer. No sorprende, porque la Virgen a traído su Aurora, Señora Vestida de Sol, que irradia la Luz de Gloria de Cristo sobre laIglesia, la humanidad y el cosmos todo a fin de que despertemos al nuevo Día, como nos dice Jesús en San Nicolás: “Ha llegado el día. ¿Y, no lo ven? A llegado la Misericordia ¿Y no la aceptan?” Dejemos el sueño, nos pide María; que nos pongamos de pié, que trabajemos en su Causa, insiste. Porque ha llegado la hora de arrebatar el mundo al diablo que lo usurpó allá en los tiempos del Paraíso. El mundo nos pertenece como don que Dios puso bajo el señorío del hombre, Cristo asumió por la Cruz el Señorío que Adán perdió por el pecado. Desde la victoria de Cristo, nuestro deber es exte

Los que estamos sorprendidos somos muchísimos católicos por sus declaraciones, saltándose todos los preceptos del Catecismo, la Tradición, y hasta el mismo Cristo. Conviértase!!', o si no, deje la Iglesia Católica.

Pues qué bien, una "sorpresa del Espíritu", ¿no?

Gaudate et exultate, Reinhard Cardenal Marx.

Completo. . Desde la victoria de Cristo, nuestro deber es extenderla a toda la Creación, y transfigurar el mundo del pecado en el mundo “de la libertad de la gloria de los hijos de Dios” (Rom. 8).

¡¡Precioso "hornero (Argentina)"!!!
Dios te guarde.

Menos mal que lo sorprendieron, cómo debe haber sido la situación de tensión que obligara al Palacio del Santo Oficio a poner un muro, las presiones deben haber sido tremendas.
El juego de la Autoridad Doctrinal a las Conferencias Episcopales (tema del G9) es tan peligroso que pone en riesgo la universalidad eclesial.
Tres vallados: la inmadurez (no atribuible a un documento sino a personas), la imposibilidad de otorgar facultades locales cuando son universales y el Canon 844 CIC.
La pregunta es qué sucederá cuando se le pase la sorpresa ?

Hay gente, como el obispo Matx, que se empeña en no querer ver. ¿Tiene ojos espirituales atrofiados? ¿Se le ha olvidado cómo se lee? Sea lo que sea, es imperativo que oremos con fe y CARIDAD para que los ciegos vean, los sordos escuchen, los complicados se vuelvan sencillos de corazón, los reacios sean obedientes y mansos y los herejes se aparten de sus errores. Pero pidamos con esperanza y CARIDAD, que a final de cuentas es el alma de muchos hermanos y hermanas, y el alma de muchos sacerdotes obispos las que se perderían. Ayunemos por este y los demás obispos para que su impedimento de ver la verdad y seguir con obediencia sucumba

¿Perplejo?. Monseñor debe saber que desde el Concilio Vaticano II somos los católicos los que nos hemos quedado perplejos todos estos años, contemplando la desacralización progresiva de la vidacivil y de la Iglesia. Ya era hora de que les tocase a los enemigos de Cristo y de la religión católica el turno de quedarse perplejos. Desgraciadamente, mucho me temo que la perplejidad no tardará en volver al campo en donde se ha establecido desde que los enemigos de Cristo tomaron el poder en la Iglesia.

¿¿SORPRENDIDO EMINENCIA??, A Nos, dilecto Hermano en Cristo, nos llama enormemente la atención, que Tú te sientas sorprendido ante el manifiesto que te ha llegado a Ti, y a tus hermanos en el Episcopado de Alemania desde Roma. ¿¿QUE ESPERABAIS??.
Recuerda Eminencia que, Nuestro Señor Jesucristo cuando fundó SU IGLESIA, bien y divinamente sentenció que: "las puertas del infierno nunca prevalecerán sobre Ella". Tendrás presente que algunos luteranos se manifestaron a favor de la intercomunión, ya que, según ellos, "comerían una galleta".
ROMA HA HABLADO, y Nos oraremos por Ti.

El Card. Marx es o se hace, es serio o esta jugando, es católico o luterano. ¿Donde estudio? La Eucaristía es lo mas sagrado que tenemos los católicos, por que esta Cristo vivo.