(Actuall) Así lo ha dicho Teresa Agulló, una anciana que se ha convertido en la representante de aquellos ciudadanos de Callosa que quieren que la cruz, símbolo de su fe, y no de otras cosas, regrese a su sitio.
«La iniciativa fue una idea que surgió entre todos. Hasta nosotros estamos extrañados de que se nos ocurriera esta idea. Y jamás hubiéramos pensado que tendría tanta repercusión», ha afirmado Teresa.
«El párroco no dio permiso para poder proyectar la luz sobre el muro de la iglesia. No pensamos que una cruz de luz, que es algo intangible, fuera a molestar tanto. Además no tiene ninguna inscripción», ha explicado.
«La pusimos hasta terminar la Cuaresma y hasta la el Domingo de Resurrección. Luego dejaremos de ponerla. Pero el próximo año la volveremos a poner. Ya queda como un recuerdo porque no la tenemos palpable. Aunque esperamos que la Justicia la devuelva a sitio», ha explicado con gran entereza y con cierta tristeza. «El día que quitaron la cruz nos fuimos a dormir a las 7 de la mañana, llorando, después de sufrir viendo cómo aserraban la cruz con un radial. Y el vídeo que sacaron de ellos celebrando mientras la gente lloraba… Una pena», confiesa Teresa. Por el vídeo se refiere a imágenes en las que se ve celebrando y aplaudiendo a algunas personas por la retirada de la cruz.
Por ahora, en un claro intento de intimidación, el alcalde está imponiendo una multa diaria a Teresa de 100 euros por una infracción leve. Según el ayuntamiento se está incumpliendo el artículo 110 de la ordenanza municipal. Hasta el día de hoy ya ha recibido 12 multas. «Nuestra idea es recurrir las sanciones», ha afirmado con tranquilidad Teresa.
«Mientras tanto el alcalde me envía gente para ver si me convencen. Pero no lo conseguirá. Y además hay mucha gente que nos apoya», ha confesado.
Teresa, que es la presidenta de la comunidad de su edificio, ha criticado que «el ayuntamiento ha encendido unos focos [para que neutralizar la proyección de la vecina], que están en el edificio en el que vivo y están instalados para las fiestas de San Roque, y no se sancionan a sí mismos. Pero además no tienen el permiso de la comunidad, así que vamos a demandarles para que no puedan seguir encendiéndolos», ha manifestado.