(Catholic Herald/InfoCatólica) John Keenan, obispo de la diócesis católica de Paisley en Escocia, ha descrito una moción ante el Parlamento escocés celebrando la Consagración de Escocia a Nuestra Señora como «excepcionalmente significativa».
La moción, presentada el 31 de agosto, pide al Parlamento escocés que reconozca la consagración y el hecho de que los obispos «desempeñarán su papel en la construcción de una verdadera civilización del amor y se esforzarán por crear un lugar donde se valore a todos».
A este respecto Monseñor Keenan afirmó: «Creo que esto es excepcionalmente significativo ... siento que esto es enormemente significativo y providencial».
En su totalidad, la moción del Parlamento escocés decía:
«Que el Parlamento reconozca que los obispos católicos de Escocia consagrarán a la nación al Corazón Inmaculado de María el 3 de septiembre de 2017; comprenden que los obispos orarán por Escocia en el Santuario Mariano de la Gruta de Carfin, cerca de Motherwell, pidiendo que Escocia se energice con un renovado deseo de buscar la verdad y entienda que al mismo tiempo orarán por todos los parlamentarios y el gobierno, para que ellos cumplan con su deber en la construcción de una verdadera civilización del amor y se esfuercen por crear un lugar donde todas las personas sean valoradas, un lugar donde los pobres, solitarios y marginados no sean olvidados y un lugar donde la gente pueda practicar su fe».
Preparados espiritualmente para la consagración
Previamente Monseñor Keenan había exhortado a realizar una preparación espiritual de 40 días, para vivir el acontecimiento histórico que ocurrirá el día de mañana en la consagración de Escocia al Inmaculado Corazón de María.
«La consagración depende de una ferviente preparación nacional», había indicado el obispo, al presentar un programa en el que se proponen las intenciones de oración para cada día, se recomienda la confesión, obras de caridad o se insta a algún pequeño sacrificio.