(Gaudium Press/InfoCatólica) La Cámara de Diputados de Chile rechazó por falta de votos suficientes el proyecto de legalización parcial del aborto, un revés inesperado para la propuesta que significa una victoria para la Iglesia y los ciudadanos comprometidos en la protección del derecho a la vida. Chile continúa siendo un ejemplo tanto en la protección de la vida naciente como en la salud materna, con una de las mejores estadísticas de mortalidad materna de la región.
La vida humana desde la concepción sigue estando protegida en la legislación chilena
Los Obispos habían realizado una declaración con motivo de la discusión de la propuesta en la que reafirmaron su posición en una batalla que muchos consideraban perdida: «Con más fuerza que nunca, promovemos el valor de la vida», fue el título del documento.
«No consideramos que este proyecto de legislación constituya una respuesta humanizadora y civilizadora frente al drama mayor que viven las mujeres en las situaciones límite que las causales refieren», advirtieron los prelados. «En vez de desplegar los mayores esfuerzos por ambas vidas humanas igualmente dignas -la de la madre y la del hijo que espera-, ahora en Chile habrá niños y niñas considerados “descartables”».
«Con dolor constatamos la evidente contradicción con una ética fundada en el ser humano en cuanto imagen y semejanza de Dios, en el valor irrenunciable a la vida y en la dignidad de toda persona desde su misma concepción. Por esto, nos duele más aún las argumentaciones y la votación en favor de estas iniciativas de parlamentarios que se declaran cristianos», indicaron los Obispos. «Con transparencia hemos ofrecido nuestra mirada en todas las instancias pertinentes, a través de personas e instituciones que seguirán trabajando en favor de la vida. Ante cada drama humano, los católicos continuaremos proclamando el amor infinito de Dios, que en la resurrección de su Hijo Jesucristo nos brinda la fuente de nuestra promoción de toda vida humana y de su dignidad».
Si bien el documento del Comité Permanente de la Conferencia Episcopal de Chile tiene un tono de reacción ante la que parecía una inminente derrota (los promotores gubernamentales del proyecto consideraban el paso por la Cámara de Diputados como «de trámite»), los hechos comprobaron que nada estaba aún escrito. El proyecto de legalización pasará a una Comisión Mixta en la cual los analistas reconocen un cierto grado de incertidumbre por la cercanía de las campañas de reelección de los senadores. «Los milagros pasan, se cayó la aplanadora y el aborto se va a Mixta», expresó la parlamentaria María José Hoffmann. «Ganamos una batalla pero no hay que bajar los brazos, vamos a defender la vida».