(Agencia Fides/InfoCatólica) Los obispos de Camerún han planteado una acción legal para comenzar una investigación sobre la muerte de Su Exc. Mons. Jean-Marie Benoît Bala, obispo de Bafia, cuyo cuerpo sin vida fue encontrado en el río Sanaga, el 2 de junio.
Los obispos aclararon de inmediato que Mons. Bala había sido víctima de homicidio, negando cualquier hipótesis de suicidio. «Mons. Bala ha sido brutalmente asesinado» denunciaba un comunicado de la Conferencia Episcopal. Pero el 4 de julio, el Procurador General emitió un comunicado en el cual afirmaba que «la causa de la muerte más probable del obispo había sido por ahogamiento».
Su Exc. Mons Samuel Kleda, Arzobispo de Doula y Presidente de la Conferencia Episcopal del Camerún, ha reiterado que los obispos «no están satisfechos» con las investigaciones llevadas a cabo hasta ahora sobre la muerte de Mons. Bala. Por ello, ha dicho Mons. Kleda, la Conferencia Episcopal ha presentado una denuncia por asesinato, presentándose como parte civil, «de manera que se establezca la verdad». Mons. Kleda ha añadido que va a presentar una denuncia contra ciertos agentes de policía por el mal manejo del caso.
«Si Mons. Bala se hubiese ahogado, habrían tenido agua en su cuerpo, pero no se ha encontrado. En lugar de ellos presenta varios signos claros de violencia», ha dicho el arzobispo.
El cuerpo de Mons. Bala fue devuelto por las autoridades el 17 de julio. Su funeral se llevará a cabo el 2 de agosto en Bafia.