(Agencias/InfoCatólica) El sacerdote estaba tumbado en la cama, atado de manos, con huellas de tortura y los ojos cubiertos con cinta adhesiva. La Policía fue avisada por los vecinos, que escucharon ruidos extraños, y observaron a dos desconocidos saliendo del lugar.
Al parecer, el sacerdote comprobó al llegar a su domicilio que la puerta de acceso a la casa parroquial se encontraba abierta y las luces encendidas. Las autoridades procedieron con el levantamiento del cuerpo.
Asimismo, la Policía Municipal de La Paz, inició las investigaciones correspondiente para conocer la causa de los hechos y dar con el responsable.
En la zona donde fue asesinado el padre Luis López Villa operan diversos cárteles del narco, celulas de los grupos criminales de la Familia Michoacana, El cártel del Estado, La Empresa, Guerreros Unidos, La Nueva Empresa, Los Zetas y Caballeros Templarios.
En los últimos cuatro años, y sin contar este último asesinato, se han denunciado 520 extorsiones a sacerdotes, 17 asesinados, 25 atentados contra seminaristas, laicos y presbíteros, dos desaparecidos y dos secuestrados.
Por su parte, el cardenal Norberto Rivera ha lamentado enTwitter el asesinato y ha pedido a Dios que dé fortaleza a su familia.
Ruego a Dios por Mons. Héctor Luis Morales y la Diócesis de Nezahualcóyotl por la muerte trágica del Pbro. Luis López. Descanse en paz.
— Norberto Rivera (@arzobisprimado) 6 de julio de 2017
Pido a Dios dé fortaleza y consuelo a la familia López Villa por el triste fallecimiento de su hijo el Pbro. Luis López Villa.
— Norberto Rivera (@arzobisprimado) 6 de julio de 2017