(Agencias/InfoCatólica) «¿De eso no decimos nada?», se ha preguntado Cañizares, que ha indicado que se focaliza el debate en la corrupción económica pero no se habla tanto de la corrupción moral.
El cardenal ha realizado estas declaraciones durante la presentación ante los medios de la nueva Cátedra Tomás Moro de Estudios Sociales y Políticos de la Universidad Católica de Valencia (UCV), que pretende desde un punto de vista académico generar una corriente de opinión de valores, fundamentados en el humanismo cristiano, para hacer frente a la crisis de valores actual. Antonio
Cañizares ha recordado las palabras que, según ha dicho, le dijo el que fuera presidente de Israel Simon Peres, quien aseguró que Israel y la Iglesia tenían «una responsabilidad, decir al mundo entero que sin Dios no es posible la convivencia, la paz, porque no es posible la dignidad de la persona humana y eso es clave».
Preguntado sobre la libertad religiosa en el terreno educativo, el cardenal ha señalado que «hay una crisis de derechos humanos, que se sustituyen por un positivismo en el derecho y por una pérdida de sentido de la verdad que está en la base de todo», lo que provoca una «quiebra e incapacidad para afrontar el futuro muy grande».
A su juicio, existe una crisis de democracia, economía, política, procedente de «esa crisis del hombre, crisis antropológica» y ha concluido lanzando una pregunta: «¿Por qué cayó el régimen soviético? Porque se asentó en la mentira. En estos momentos esta sociedad está asentándose en la mentira y es necesario superar esa sociedad asentada sobre la mentira para que se asiente sobre la verdad del hombre».
Mayor Oreja
Por su parte, Jaime Mayor Oreja, ex-ministro de Interios y ex-diputado del parlamento europeo, ha querido destacar que la iniciativa no tiene sesgo político, aunque «pretendemos crear una corriente de opinión asentada en los valores cristianos» desde la máxima de Satno Tomás Moro de que «el hombre no se puede separar de Dios, ni la política de la moral». El exministro ha asegurado que «la crisis está en la persona y por eso es una crisis total y es una corrupción, no económica sino moral» y ha agregado: «Fundamentalmente estamos viendo cómo está afectando, cómo está golpeando, y además los que formamos parte de un partido vemos con tristeza todo lo que está sucediendo, pero el diagnóstico es el mismo: que la corrupción moral está en la persona y en estos momentos está golpeando la credibilidad de las instituciones».
«Simplificando mucho, la izquierda se ha hecho populista y la derecha se ha hecho relativista. En líneas generales esa es la definición de lo que está sucediendo. Evidentemente hay muchas personas fantásticas del PP y hay una base social fantástica que no se merecen esta descripción, pero el fenómeno general es ése»