(Agencias) El Ministerio del Interior ha señalado que esta operación, que ha tenido lugar en la madrugada del miércoles, ha servido para desarticular a un «entramado reclutador plenamente operativo y permanente en Ceuta» que centraba su actividad en el reclutamiento de personas cada vez más jóvenes.
Su actividad se centraba en candidatos cada vez más jóvenes, incluso niños, en perfecta armonía con las directrices del Daesh que establecen que, ante la necesidad urgente de nuevos adeptos a la causa terrorista, el reclutamiento infantil es la línea estratégica principal por tratarse de personalidades especialmente permeables y fácilmente convertibles en elementos terroristas convencidos.
Los integrantes de la célula se organizaban de forma estable sobre la base de una adecuada distribución de tareas y adoptaban de forma mecánica sofisticadas medidas de seguridad, tanto físicas como virtuales en el contexto del uso de Internet, redes sociales y blogs terroristas privados.
Además, habían elaborado una estrategia de reestructuración y reasignación de funciones en el caso de que alguno de ellos fuera detectado o detenido, con el objetivo claro de mantener en el tiempo el entramado de captación y reclutamiento terrorista.
Esta operación supone la neutralización de una amenaza concreta tanto para la seguridad nacional como para la del resto de los países europeos, ya que la célula desarticulada este miércoles presentaba entre sus principales objetivos la exportación e implantación en Europa de su modelo de captación y reclutamiento de nuevos colaboradores a favor de la organización terrorista EI.
La operación, que continúa abierta, se ha desarrollado bajo la supervisión del Juzgado Central de Instrucción número 5 de la Audiencia Nacional y la coordinación de la Fiscalía de la propia Audiencia.
Desde 2015, año en el que el Ministerio del Interior elevó a 4 el Nivel de Alerta Antiterrorista(NAA-4) las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad han detenido a un total de 161 yihadistas.