(Agencias) De los cuatro magistrados presentes en el debate de la Primera Sala (un quinto se ausentó), solamente el ponente votó a favor del proyecto. Los otros tres lo rechazaron, sin discutir el fondo, por la «improcedencia del mismo», al considerar que el amparo no es la vía para garantizar los derechos sexuales y reproductivos de las mujeres cuando se les niega el aborto. Uno de ellos elaborará un nuevo proyecto que podrá ser debatido en los próximos meses.
Si la propuesta hubiera sido aprobada, el aborto habría sido despenalizado en todo el país, con independencia de la regulación sobre aborto que hay en diferentes estados.
La ministra Piña Hernández, señaló, en contra de la despenalización federal obligatoria, que las normas federales no discriminan ni estigmatizan a las mujeres y que incluso hay causales que permiten a las mexicanas abortar cuando el embarazo es consecuencia de una violación, por «imprudencia de la madre», y cuando «está en peligro la vida de la madre».
Por otro lado, el ministro Gutiérrez Ortiz Mena dijo que la modificación debía aprobarse, pero no compartió el proyecto en sus términos pues su argumentación estaba basada en la idea de que las normas son «estigmatizantes», lo que veta cualquier «discusión democrática, porque sería una causa grave de discriminación».