(Actuall/InfoCatólica) El vídeo, de algo más de dos minutos, es un trabajo que el estudiante del Institut Josep Maria Llompart hizo para una asignatura de arte. El contenido del vídeo, cuyo autor se declara homosexual, está plagado de obscenidades de la peor catadura y de ataques directos a Cristo, la Virgen, la Iglesia e insultos al obispo.
Lo peor no es sólo el contenido del supuesto trabajo si no que fuera calificado con nota de sobresaliente por la profesora, aceptando como arte lo que, en realidad, es un agresión contra las creencias y sentimientos de los católicos. Y también que el Instituto respaldara a la profesora y al alumno asegurando que el trabajo era «simplemente impecable».
Lo denunció un sacerdote profesor de religión
El P. Antoni Pons, sacerdote y profesor de religión del Instituto, fue el encargado de dar la voz de alarma ante el contenido repugnante del vídeo, así como por el hecho de que la profesora de arte, en vez de reprochar semejante sarta de obscenidades, decidiera darle una calificacióin excelente.
El vídeo fue publicado en Youtube pero ha sido retirado ante la polémica. El centro ha confirmado que el joven estudia Bachillerato Artístico.
El IPF denuncia
El Instituto de Política Familiar de Baleares (IPFB) va a denunciar los hechos ante la Oficina de Derechos del Menor (ODDM) del Govern de Baleares, y ha instado a la Consejeria de Educación a abrir expediente disciplinario a la profesora y el centro por permitir el vídeo y calificarlo con un sobresaliente.
El Instituto de Política Familiar ha recordado que el artículo 525 del código penal establece que incurrirán en la pena de multa de ocho a doce meses los que, «para ofender los sentimientos de los miembros de una confesión religiosa, hagan públicamente, de palabra, por escrito o mediante cualquier tipo de documento, escarnio de sus dogmas, creencias, ritos o ceremonias, o vejen, también públicamente, a quienes los profesan o practican».
«Es totalmente inaceptable que desde un centro educativo se permitan estas actitudes de intolerancia e insulto y menosprecio, y no se enseñe y eduque en la tolerancia y respeto», añade el Instituto de Política Familiar.
