(Agencias/Zenit) «Lo que quiero decir es que no lo sé», reconoció el Papa a los medios internacionales, que iban en el avión en el que viajó desde Cuba a Estados Unidos, donde cumplirá la segunda parte de su décimo viaje internacional.
«No sé si estaban o no estaban», declaró después de recordar que saludó a mucha gente durante sus actos públicos en Cuba y de aludir a que si hubo en ellos algún disidente no lo supo realmente pues «ninguno se identificó».
Preguntado sobre si estaría dispuesto a reunirse con disidentes cubanos, el Papa contestó: «a mí me gusta encontrarme con toda la gente, considero que primero toda persona es hijo de Dios y tiene derecho» a ello.
Con Castro
A la pregunta sobre si Fidel Castro le había manifestado algún arrepentimiento por el modo en que ha gobernado la Isla, el Papa ha afirmado que «el arrepentimiento es algo muy íntimo, de conciencia».
Asimismo, ha explicado que la conversación con el tirano comunista «fue un encuentro informal, espontáneo. Hablamos solo sobre el colegio de los jesuitas y sobre cómo lo ponían a trabajar. Después hablamos mucho sobre la encíclica Laduato si’. Él está muy interesado por el tema de la ecología y está preocupado por el medio ambiente».