Catequesis en la audiencia del miércoles

Papa Francisco: «Hay un miedo a equivocarse y fracasar que impide confiar en la gracia» para el matrimonio

En su nueva catequesis dedicada al matrimonio, el papa Francisco exhortó esta mañana durante la audiencia general, a ver la unión sagrada entre el hombre y la mujer como un don, una alegría y una fiesta. A su vez, el Santo Padre sostuvo que hoy «no es fácil hablar del matrimonio como una fiesta que se renueva en el tiempo con las diferentes estaciones de toda la vida de los cónyuges».

(Aica) Es un hecho, dijo, que las personas que están casadas son cada vez menos, que aumenta el número de separaciones, mientras que disminuye el número de niños y explicó la dificultad que tienen los esposos «para mantenerse juntos - tanto como pareja y como familia». 

El Papa se refirió a las bodas de Caná, en las que «¡Jesús no sólo participó en ese matrimonio, sino que “salvó la fiesta” con el milagro del vino!». De esta manera, el Papa remarcó que Jesús hizo su primer milagro en la celebración de un matrimonio. «Fue un gesto de gran simpatía por la familia que nace, solicitado por la premura maternal de María». 

Al enumerar las dificultades que enfrenta el matrimonio en nuestros días el Papa constató que «junto a otras causas, hay un miedo a equivocarse y fracasar que impide confiar en la gracia que Cristo ha prometido a la unión conyugal». 

Matrimonio, fuente de paz y de bien

«El matrimonio consagrado por Dios protege esa unión entre el hombre y la mujer que el mismo Dios ha bendecido desde la creación del mundo, y que es fuente de paz y de bien para las personas y para la sociedad», afirmó. 

«Los esposos que se casan en el Señor se transforman así en un signo eficaz del amor de Dios en el mundo -aseguró-. El mejor modo de mostrar al mundo de hoy la belleza y la bondad del matrimonio es el testimonio de vida de los mismos esposos y de la familia». 

El Papa invocó la intercesión de la Virgen María por los esposos, especialmente por los que pasan por dificultades, para que vivan su matrimonio como un signo eficaz del amor de Dios. 

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13 comentarios

Roberto
El matrimonio tal como lo entiende la Iglesia es muy muy exigente, para un tipo de gente muy especial, que está muy equilibrada, ha hecho un camino de fe sólido y !cuidado! ha encontrado la persona para poder llevar adelante tal empresa.

No voy a comentar los requisitos y exigencias en el campo moral, la apertura a la vida, fidelidad, métodos de regularización de la natalidad, educación de hijos, complementariedad en la pareja, recursos para superar problemas y crisis, combinar trabajo y economía (si lo hay)......y más cosas.

Y entonces viene el problema: siendo realistas, ¿cuánta gente está (o estamos) preparada para asumir todo esto? Porque la cuestión no es si te quieres casar (que ya es harto difícil encontrar pareja) sino si vales para asumir tantas exigencias.
Y luego está la cuestión pastoral: la Iglesia sabe que la mayoría de los candidatos no dan la talla, pero hacer una "criba" de personal o procesos más largos de formación supone que se van a casar canónicamente una minoría y eso tampoco convence, entonces ¿que? pues "mirar para otro lado" y seguir afirmando grandes principios y verdades que pocos asumen y viven.
Así veo la situación actual. Me gustaría que me dierais vuestro opinión sobre esto que expreso.
30/04/15 10:25 AM
Lector
Roberto:
El matrimonio tal como lo entiende la Iglesia es muy muy exigente.


Hombre, no. Es tal y como lo entiende Dios: para siempre y abierto a la vida. Y Dios no pide imposibles.

En todo caso, quien no vive la fe no debería casarse por la Iglesia. Y quien vive la fe tiene gracia para llevar un matrimonio cristiano como los de siempre.
30/04/15 12:26 PM
Alvaro
Es necesario ver las dos caras de la moneda:

- Una, la que dice el Papa: "hay un miedo a equivocarse y fracasar".
- La otra, su contraparte: "hay una cruel intolerancia hacia quien se equivoca y fracasa".

Imaginemos un matrimonio en el que los cónyuges sean no sólo imperfectos (cosa inevitable) sino también algo progres (cosa habitual).

En tal matrimonio es fácil que los cónyuges tengan miedo a fracasar porque saben que el otro no es capaz de aceptar un fracaso. No habrá un intento de arreglar las cosas, de reencaminar lo que se había torcido. No habrá un empeño en sacar al otro del agujero. Nada de eso.

Lo que habrá será un victimismo en el que uno cargue con la culpa de las infelicidades del otro. Se esperará un "divorcio-express" porque "el amor se ha apagado" y "tengo que rehacer mi vida en otra parte". Incluso podrá haber ciertas formas de violencia como las denuncias falsas o la manipulación de los hijos para ponerlos en contra del otro (el "síndrome de alienación parental"). Y, cómo no, linchamiento social.

Porque aquí no se permite no triunfar.

Han corrompido tanto a la sociedad actual que el matrimonio se ha convertido en una "espada de Damocles" cuyo hilo puede romperse en cuanto la vida cotidiana se aparte del prototipo de guión holliwoodiense de comedia rosa.

Y ya se sabe: hace falta una virtud en grado heroico para confiar en la Gracia cuando se tiene una pistola, real o metafórica, en la nuca.

Un saludo.
30/04/15 12:59 PM
Lector
Alvaro:
hay una cruel intolerancia hacia quien se equivoca y fracasa


¿Son crueles e intolerantes las palabras de Cristo diciendo que quien se divorcia y se vuelve a casar es un adúltero?
30/04/15 1:10 PM
Alvaro
Lector:

Creo que ha entendido vd justo lo contrario de lo que decía. Me refiero a que "hay [en la corrompida sociedad actual] una cruel intolerancia [nada cristiana] hacia quien se equivoca y fracasa".

Porque la mayoría de matrimonios "tibios" que se celebran actualmente sólo se comprometen a ser fieles "en la salud, en la riqueza y en lo bueno, hasta que la muerte, o la enfermedad, o la pobreza, o lo malo los separe".

Son los aquejados de progresía quienes son intolerantes hacia sus cónyuges, a quienes culpan de no ser perfectos, y quienes prefieren tirarlo todo por la borda (o vengarse por la supuesta afrenta) en cuanto "les fallan".

Por eso hay tantos que temen equivocarse o fracasar: sus cónyuges no se lo perdonarían. Es la dictadura de los "triunfadores", de los niñatos que no han aprendido a tolerar la frustración. Cásate con uno y verás.

¿Intolerantes las palabras de Cristo? Pues según se mire.

No son intolerantes en el sentido peyorativo (progre) del término, en tanto son palabras justas que describen la realidad de la institución del matrimonio, acorde con la naturaleza humana. Son palabras duras, pero no crueles, porque la Verdad duele, pero nos hace bien.

Pero sí son "intolerantes" en el buen sentido del término, porque dejan claro que no toleran lo intolerable, lo cual es por cierto cosa muy justa, sana y deseable. Digamos que se ve a la legua que Cristo no era progre, que no padecía esa patología.

Un saludo.
30/04/15 3:20 PM
Juan Andrés
Más que "el miedo a fracasar" lo relevante son las "otras causas" que el Papa no detalla. Deben ser muy minoritarios los casos de personas que no se casen por "miedo" al fracaso. No lo hacen por el exacerbado individualismo o egoísmo reinante y las ganas totales de no comprometerse. Es consecuencia de la ausencia de valores de todo tipo, no sólo cristianos.
1/05/15 12:48 AM
Jose roberto jaimez
ALVARO, por tus comentarios veo que tu eres divorciado y vuelto a casar, o as vivido de cerca el divorcio de algún familiar o amigo cercano y lector o es soltero o encontro una gran pareja que lo a sabido sobrellevar, de ser así debe darle gracias a DIOS, porque actualmente pocos tienen la dicha de ser felices en su matrimonio.
Yo soy divorciado y vuelto a casar, por lo mismo puedo decir que se siente fracasar, cuando te casas crees que es para toda la vida; pero cuando te das cuenta que tu matrimonio se derrumba por el suelo hecho pedazos, cuando vez el dolor de tus hijos y te preguntan porque sus padres ya no están juntos, cuando ves que es mas pecado vivir juntos que separados, por lo mismo tomamos la decisión de la separación. Actualmente los adúlteros somos demasiado criticados y atacados por una gran mayoría de católicos, yo les pregunto lo que JESÚS pregunto: ¿ustedes están libres de pecado? yo llevo 29 años de vuelto a casar he procreado 4 hijos y tengo 4 nietos para mi es imposible separarme.
los que estamos en la misma situación estamos conscientes de que vivimos en pecado mortal, por lo mismo tratamos de no cometer mas pecados, por lo cual nos acercamos a DIOS para pedirle fuerzas para lograrlo.
Es triste ver que el que mata a un ser humano, y el que roba se pueden confesar y comulgar (me consta)y que se este preparando a varios sacerdotes para que confiesen a las mujeres que abortan para que ya no sufran (esto lo vi en un canal católico de televisión aquí en Mé
1/05/15 1:19 AM
Carmen de Chile
El matrimonio es creado por Dios, instituido como Sacramento por Cristo y es vivificado por el Espíritu Santo. ¡La Santísima Trinidad está en el matrimonio!

Esta es la verdad, pero otra la realidad, en la mayoría de los matrimonios de este tiempo... y es simple de entender, ¿por qué "otra la realidad"? Porque no hay Verdad, sin ella hay tiniebla y oscuridad.

Busquemos la Verdad y andaremos en la Luz que "ilumina a los que viven en tinieblas y sombras de muerte, y guía nuestros pasos por el camino de la paz."
1/05/15 2:20 AM
Charo
Yo creo que la gente no se casa porque no es religiosa, la mayoría no creen en el Dios católico, y no tiene objeto un matrimonio que además de ser difícil de llevar no les reporta ninguna ventaja material. El problema es la falta de fé, simplemente. Con fé podemos con todo.
1/05/15 11:37 AM
Alvaro
(SIGUE)

Pero entiendo que se siente vd obligado para con sus nuevos hijos y nietos. En tal situación, tiene dos opciones:

1.- Solicitar la nulidad de su primer matrimonio, con la que podría celebrar matrimonio con su actual pareja. Aclaro que la nulidad NO es un divorcio.
2.- Pasando a cohabitar con su pareja como hermanos y no como unos esposos que no son, convirtiendo su vida adúltera en casta.

Para terminar, se diría que su última frase, que sale cortada, viene a quejarse por una supuesta exclusión, aludiendo a que ladrones y asesinos pueden confesar y comulgar, cuando supuestamente vd no puede. Si tal era lo que vd decía, se equivoca de medio a medio.

Para que una confesión sea válida (y pueda comulgar) debe haber entre otras cosas propósito de enmienda. El que mata o roba (o vive en adulterio) con intención de reincidir, aunque confiese no habrá obtenido el perdón de sus pecados, y no tendrá acceso lícito a la comunión.

Su problema parece ser que su confesión no tiene ese propósito (ya que tras ella pretende vd volver a su casa a proseguir con su adulterio), y es esa falta de propósito lo que invalida todo. ¿Me equivoco?

Así pues, si tanto le duele su situación, y si es cierto que "son conscientes de que viven en pecado mortal" y que "tratan de no cometer mas pecados", entonces quiéranlo de verdad: cuando estén seguros, acudan a un cura (o directamente a su obispo) y expongan su situación seriamente y en esos términos.

Un saludo.
5/05/15 12:20 PM
Alvaro
Jose roberto jaimez:

Desde luego, no sé de dónde saca vd que soy "divorciado y vuelto a casar" o que he "vivido de cerca el divorcio de algún familiar o amigo cercano". No ha dado vd ni una.

En cualquier caso, si un día no hubiera otra que separarme de mi esposa, pasaría a ser "casado separado" y no "divorciado" (cosa imposible), y menos aún "vuelto a casar" (sin lo anterior, menos posible aún).

Por su parte, vd mismo se declara "divorciado y vuelto a casar". No aclara si el matrimonio del que dice haberse divorciado era civil o religioso, pero si es lo segundo entonces se trata, hablando claro, de "separado y actualmente en adulterio".

Así las cosas, vd acude a las palabras de Cristo y nos pregunta si estamos libres de pecado. Evidentemente, NO. Nadie lo está. Pero tranquilícese, que tampoco le queremos lapidar. En cambio, como aludidos, tenemos derecho a devolverle a vd otras palabras de Cristo en exactamente el mismo relato que vd cita, donde una enseñanza capital está en el "Vete, Y NO PEQUES MÁS".

¿Tiene vd intención de "no pecar más"? Se diría que no, ya que vd mismo dice que "para mi es imposible separarme".

¿Imposible? ¿Lo fue con su verdadero matrimonio, en el que había hijos, probablemente menores de edad, que preguntaban "por qué sus padres ya no están juntos"? Si entonces no lo fue, ¿por qué ahora sí, si sus nuevos hijos son tan mayores de edad que, aparentemente, ya le han dado nietos?

(SIGUE)
5/05/15 12:20 PM
Alvaro
Bueno, veo que han salido los comentarios desordenados, pero se entiende que el primero es el que termina con el "(SIGUE)", y el segundo el que comienza con él.

Un saludo.
5/05/15 12:36 PM
Ingrid
Como si muchos de los que se confiesan no regresan y pecan apenas salen de la Iglesia, saben a la gente soberbia que piensa que todos son pecadores y ellos no, les cuento que juzgar al prójimo no es bien visto por Dios, muchos se confiesan tres veces al día, ya es casi un deporte, sólo para estar libre de pecado un ratito y luego lo vuelven ha hacer y pecan de nuevo, eso se llama hipocresía y jugar con el sistema, pero Dios lo sabe todo, y por eso yo no juzgo sólo observo pero si se que el único que tiene el poder de saber las razones que cada uno tenga es Dios y por eso Dios perdona y ama a todos sus hijos y sabe lo de cada quien y es comprensivo y amoroso las personas necesitan tener más empatía con su prójimo y misericordia, la dureza inflexible para juzgar no viene de un ser tan puro y grande como nuestro señor, el es el todo y la fuerza del amor que mueve al mundo, nos ama por que,somos sus hijos su creación
.
13/06/15 7:18 AM

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