(El País/InfoCatólica) «La educación enfrenta algunos problemas muy serios, entre otros: la deserción en la enseñanza media, sobre todo en los adolescentes que viven bajo la línea de pobreza, y el ausentismo docente. La ley que rige el sistema educativo parece no haber contribuido a su buen gobierno», aseguran.
Según los obispos, continúa desconociéndose la libertad de enseñanza. «Se imponen programas únicos y se discrimina el uso de recursos públicos, sin dar plena libertad de opción a los padres más pobres», acotan.
Para los obispos, constituye un «grave riesgo» considerar que el sistema educativo es el principal educador y relegar así a la familia a un papel secundario. En ese sentido, opinan que para resolver la situación de «emergencia educativa» se requiere «un amplio consenso» de toda la sociedad.
«Las experiencias educativas positivas en ambientes carenciados nos muestran que, cuando el chico es puesto en el centro de la atención, se pueden dar pasos efectivos para beneficio de los más necesitados. La Iglesia ofrece su experiencia en este campo», señalan.
Baja natalidad y aborto
Por otra parte, la Conferencia Episcopal manifestó su preocupación por la baja natalidad que conduce a «una sociedad sin niños» y criticó la despenalización del aborto.
«Una sociedad que no protege la vida de los más indefensos, es una sociedad que pierde el sentido de la vida, se envejece, se entristece, se suicida. Tenemos una muy baja natalidad. Creemos que la aprobación de la ley del aborto ha sido un paso en falso de nuestra sociedad», aseguran.
Alegría por poder votar
Además los obispos expresaron su «alegría» por la campaña electoral. «Nos gusta votar, porque sentimos fuertemente en este tiempo nuestra condición de ciudadanos, responsables de nuestro país, de su presente y de su futuro», indican los obispos en la declaratoria sobre el año electoral.
Agregan su preocupación por la «ruptura del tejido social, que se hace notoria con la existencia de los numerosos asentamientos y en la marginación cultural».
Crisis de la institución familiar
Sobre la familia, advierten que se vio afectada por una «filosofía individualista y hedonista», cuyas consecuencias son el alto número de divorcios y la formación creciente de «parejas de hecho». Sostienen que se delimitó el valor del contrato matrimonial al convertirlo «en un simple acuerdo entre privados» que pretende hacer equivalente la unión homosexual y el «matrimonio natural».