(Efe) Así lo ha informado en un comunicado la Provincia Agustiniana Matritense, de la que depende el colegio, que ha añadido que «se está procediendo a investigar internamente el alcance de los hechos con el objeto de establecer las medidas oportunas con la mayor transparencia».
La Provincia Agustiniana Matritense ha hecho público este comunicado después de que ambos directivos fueran detenidos por la Policía, acusados de conocer que un profesor abusaba de alumnas y no haberlo denunciado, tras lo que ambos fueron puestos en libertad con la obligación de comparecer ante el juez cuando les requiera.
También han destacado que el centro educativo pone a disposición de padres y alumnos un gabinete de asesoramiento psicológico para quién eventualmente quiera solicitarlo. «Desde la consternación que nos producen los supuestos hechos, reiteramos nuestra disposición a colaborar con la justicia y nuestro apoyo incondicional a los alumnos y sus familias», señalan en el comunicado.
La orden ha explicado que las clases en el Valdeluz se están impartiendo este viernes «con total normalidad».
La institución religiosa hace hincapié en que «los supuestos hechos (investigados) son contrarios al ideario y a los principios, valores y conductas que sustenta esta institución, tales como el desarrollo integral de la persona, la búsqueda de la verdad, la autonomía personal y el respeto a la dignidad humana».
«En la medida de las posibilidades que nos permita la investigación pendiente, daremos las explicaciones según la información recabada, en consonancia con nuestro compromiso con los padres y alumnos, para la búsqueda de la verdad y de las responsabilidades exigibles», concluye.
Ingresa en prisión el profesor acusado
Precisamente hoy el titular del Juzgado de Instrucción número 13 de Madrid ha ordenado el ingreso en prisión provisional con cargos para el profesor arrestado el pasado martes.
También este viernes, la consejera madrileña de Educación, Lucía Figar, había exigido al centro concertado Valdeluz que apartara «inmediatamente» de sus cargos al director y al jefe de Estudios, que «pudieron tener conocimiento de los abusos sin actuar» con prontitud.