(Aleteia/InfoCatólica) La más reciente de las afrentas ocurrió apenas el pasado domingo 10 de noviembre, cuando ladrones sin identificar aún robaron el Santísimo, dos copones y la custodia en la parroquia de San Antonio de Padua (diócesis de Cruz del Eje). También, según los activistas argentinos, los ladrones rompieron la imagen del Cristo e incendiaron el confesionario.
Ese mismo domingo 10 también sufrió un asalto la primera iglesia metodista de Buenos Aires, que cuenta con una antigüedad de 170 años. En este templo metodista, los violadores de su intimidad y del credo de las personas, colocaron la cruz invertida y dañaron el histórico órgano.
«Desgraciadamente no son hechos aislados», dice Cattaneo. El 25 de septiembre alumnos del Colegio Nacional de Buenos Aires –en un hecho que fue repudiado por todo el país–pintaron y destrozaron la Iglesia de San Ignacio de Loyola, la iglesia más antigua de la capital federal. Y. un día después, el 26 de septiembre, también asaltaron la Iglesia Norte (Rosario), sede del Movimiento Ecuménico por los Derechos Humanos.
«Más aún, a finales del mes de octubre también profanaron la catedral de Mar del Plata utilizando el altar como letrina y el mantel como «elemento de aseo». Además rompieron bancos y confesionarios y robaron cálices y demás obras de valor», dice el comunicado de ArgentinosAlerta.org, en el que se insta al ministro Randazzo a detener los ataques a las iglesias.
«Por supuesto, los sacerdotes y obispos han organizado actos de desagravio. Es lo relevante. Pero somos ciudadanos argentinos y pagamos nuestros impuestos. Exigimos además que las autoridades asuman su responsabilidad, detengan a los culpables y los pongan a disposición de la Justicia», explica en su alerta la red católica argentina.
Si no hay una acción real, se podría llegar a pensar «que existe una dejación cómplice que convierte en impunes estos atentados contra la libertad religiosa». termina diciendo el comunicado cuyo objetivo final es que la gente le pregunte al ministro Randazzo, a través de la web, «qué actuaciones se están llevando a cabo para detener a los culpables, proteger los templos y evitar estos sacrilegios para que no vuelvan a ocurrir».