(HO/InfoCatólica) Gregg Cunningham, abogado, comenzó su conferencia subrayando el hecho científico de que con tan sólo un minuto de vida, el ADN del embrión contiene tres billones de pares de datos genéticos, algo que los abortistas tratan de ocultar, junto con el maravilloso y rápido desarrollo embrionario y, sobre todo, la cruda realidad del aborto.
La organización provida de Gregg utiliza principalmente las imágenes porque «nuestra cultura es principalmente visual», explica Gregg. Fundamentalmente, organizan exposiciones gráficas sobre el aborto en las universidades. Las imágenes de la realidad del aborto conmocionan y no dejan indiferente a nadie. Los abortistas tratan por todos los medios de ocultarlas pese a que, incoherentemente, están defendiendo que el aborto es bueno.
Genocidio
Cunningham asegura que «el aborto es un genocidio». El genocidio puede ser físico, si los bebés no superan los estándares de calidad; genocidio intelectual, como el que sufren los niños con síndrome Down; genocidio por razón de sexo, como los millones de abortos que sufren principalmente las niñas en el mundo; etcétera.
La organización de Cunningham lleva 23 años organizando campañas provida en los Estados Unidos y recientemente también en otros países como Canadá, México, Reino Unido, Bélgica, Países Bajos, Rumanía, República Checa, Finlandia, España, Rusia y Polonia. En Polonia la mentalidad provida aumentó abrumadoramente después de las campañas. Gregg lo explica porque contaron, sobre todo, con el respaldo de los obispos polacos. Las imágenes fueron expuestas incluso en los laterales de las iglesias. Gregg señala la gran importancia de la implicación de la Iglesia en las campañas provida.
