(HO) En sólo 48 horas las empresas, avisadas por los mensajes de decenas de miles de ciudadanos, dejaron de anunciarse y fueron fieles a sus clientes y a los valores que dicen compartir. Ninguno de ellos se publicitó en la gala estelar del buque insignia de la telebasura veraniega de Telecinco, tal como les han pedido más de 50.000 personas por correo electrónico o llamando directamente.
Algunas de esas empresas han emitido comunicados repudiando ese tipo de programas. Otras, como han reconocido a distintos medios de comunicación, han optado, por miedo, por retirarse silenciosamente. Las presiones a las que están sometidas son muy fuertes, más que nunca.
Según HazteOír, el oscuro entramado de la telebasura comienza a resquebrajarse. Los anunciantes, agrupados en la AEA (Asociación Española de Anunciantes) deben asumir la responsabilidad sobre los contenidos de los programas donde se publicitan. Responsabilidad con la sociedad y con sus clientes, que se la reclaman.
Desde HO se pide a los televidentes que reclamen directamente a Telecinco que también sea sensible a un gran sector de la sociedad, que no quiere programas que convierten la humillación y el desprecio a la mujer en negocio y espectáculo. Una sociedad a la que no le sirve la excusa de mirar para otro lado, o "cambiar de canal" como si por no verlo desapareciese la humillación a la mujer.
El movimiento cívico presidido por Ignacio Arsuaga anima a solicitar a Telecinco que retire definitivamente «Campamento de Verano» y deje de jugar con la dignidad de las personas.