(EFE/InfoCatólica) Los activistas también indicaron que las instituciones del estado han cometido «continuas negligencias» en su tarea de proteger a los coptos (cristianos egipcios), hacer frente a los ataques y perseguir a los responsables de esos actos.
Recordaron que hombres armados asesinaron a balazos el pasado 6 de julio al sacerdote cristiano copto Mina Abud Sharuin en la localidad de El Arish, capital del Norte del Sinaí, en el noreste del país. Según los grupos de derechos humanos, el copto Magdi Lamai, que había sido secuestrado en la zona, también murió, después de que su familia no pudiera pagar su rescate, mientras que otro egipcio de ese mismo credo, Mina Shuqi, fue liberado tras el pago solicitado.
Además, un alto número de cristianos del norte del Sinaí se ha visto obligado a desplazarse debido a las constantes amenazas, al tiempo que las iglesias han permanecido en gran parte cerradas por el temor a ataques, apuntaron las organizaciones no gubernamentales.
En la provincia de Minia, en el sur, los grupos denunciaron los choques que estallaron el pasado 3 de agosto entre cristianos de la localidad de Beni Ahmed y seguidores de Mursi de las aldeas vecinas. Ante esta situación, las ONG egipcias pidieron que la Fiscalía investigue ese tipo de sucesos y proteja a los posibles testigos, así como que se tomen las medidas necesarias para garantizar la seguridad de los cristianos y sus propiedades.