(EP) Aunque se desconoce el contenido exacto de la pelea entre el adolescente y los rebeldes islamistas, se sabe que dijo: «Incluso aunque el profeta Mahoma volviera a la vida, yo no lo haría», ha detallado el SOHR en un comunicado.
Horas después de llevárselo, los rebeldes islamistas volvieron con el adolescente y, hablando en árabe clásico, sin acento sirio, subrayaron que la apostasía y la blasfemia son vicios terribles por lo que, advirtieron, todo el que incurra en ellos sufrirá el mismo destino.
Después de este discurso, los rebeldes islamistas dispararon dos veces con un rifle automático al adolescente, una en el cuello y otra en la cabeza, que estaba cubierta con una camiseta. El resto del cuerpo presentaba signos de tortura.
Los rebeldes islamistas ejecutaron al joven delante de una gran multitud, en la que se encontraban sus padres. Después, huyeron en un coche en dirección desconocida.
«El SOHR exige que los asesinos de este niño sean llevados ante la justicia», ha dicho, subrayando que «aunque la Corte de la 'Sharia' de Aleppo tiene una sede en este barrio, no hizo nada para evitar la ejecución».