(Agencias/InfoCatólica) La niña, confirmó el Ministerio de Salud, nació solamente con cerebelo y falleció pese a que fue colocada en incubadora y a que recibió el tratamiento que normalmente se le da a todos los bebés prematuros. Después de la cirugía, Beatriz fue enviada a cuidados intensivos, donde se encontraba aún en horas de la noche.
Beatriz presentó contracciones desde la noche del domingo, explicó la ministra María Isabel Rodríguez. Por la mañana de este lunes se le hicieron evaluaciones y se determinó que «había que intervenirla lo más pronto posible puesto que por las contracciones podía sufrir rompimiento del útero». La ministra añadió que se había planeado practicar la cesárea a Beatriz cuando comenzara la semana 27 de gestación de su hija, es decir, este martes.
Desde mediados de marzo los médicos determinaron que el feto padecía anencefalia, es decir, que no se le habían formado de manera completa ni el cráneo ni el cerebro. «El diagnóstico que se había hecho del feto se confirmó», señaló Rodríguez, en alusión a que el bebé no tenía gran probabilidad de sobrevivir mucho tiempo.
«Con todos los cuidados que recibió –explicó–, si el niño hubiera venido bien, estaría vivo», agregó la funcionaria.
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