(Luis F. Pérez/InfoCatólica) «La vida no es objeto de plebiscito siquiera», señaló el obispo, aunque dijo que de activarse ese mecanismo tomará una posición que puede ser recomendar no firmarlo.
El prelado explicó que «la excomunión automática», pena canónica que lleva aparejada la imposibilidad de recibir ningún sacramento –no solo el de la Eucaristía– hasta que sea levantada por la autoridad eclesial compentente, «es para quien colabora en la ejecución de un aborto de manera directa, y directa es que se haga ese acto en concreto», lo cual no es el caso de los senadores que han apoyado la despenalización del aborto.
Sin embargo, tal y como explicó Mons. Bodeant, si un político católico vota a favor de ese tipo de leyes, se aparta él mismo de la comunión de la Iglesia y no puede acercarse a comulgar.
En total fueron 17 los senadores que votaron a favor de la despenalización del aborto, aprobada por el Congreso el pasado 25 de septiembre, si se da muerte al niño durante las doce primeras semanas del embarazo.