(ACI/InfoCatólica) Para Marcos Polo es significativo que «los grupos feministas radicales y pro aborto ya comenzaron a protestar públicamente en clara aceptación de su derrota».
Asimismo, indica que esto «constituye también un mensaje claro de rechazo a la política externa de la Administración Obama, el gobierno más abortista de la historia de EEUU, pues ni toda su diplomacia ni los millones con que financia a ONU le alcanzaron para lograr sus propósitos en este evento».
Polo explica que en los últimos seis meses el Fondo de Población de la ONU, los gobiernos de Noruega, Islandia, los autodenominados «Católicos pro-elección» y la Internacional Planned Parenthood Federation «habían trabajado febrilmente para aprovechar la Cumbre Rio +20» y hacer creer que el aborto debe ser parte de una política de desarrollo sustentable.
En ese sentido, el rechazo al aborto en Río+20 es para varios expertos un indicativo de que «hoy mucho más países están alertas de este engaño. La decisión de retirar toda mención de ‘derechos reproductivos’ y ‘servicios de salud reproductiva’ se debe a que hubo más países que denunciaron que estos conceptos incluyen el aborto».
Sin embargo, Polo llama a estar atentos porque el lobby abortista realiza un trabajo a largo plazo, pues desde que «debutó internacionalmente en las Conferencias de El Cairo (1994) y Beijing (1995), no hay evento ONU sobre asuntos sociales (…), donde este lobby liderado por IPPF no trate de incluir alguna mención a estos supuestos ‘derechos’ que favorecen el aborto legal».
Según informóa el director del PRI para América Latina, los países que intervinieron para quitar los conceptos favorables al aborto del documento final de Rio+20 fueron el Vaticano, Rusia, Honduras, República Dominicana, Nicaragua, Chile, Siria, Egipto, Malta, Polonia y Costa Rica.
En cambio, los países que estuvieron a favor de incluirlos, junto a EEUU, fueron Bolivia, Perú, Uruguay, México, Noruega, Australia, Nueva Zelanda, Canadá, Suiza e Islandia.