Los ateos se manifestarán el próximo viernes por el barrio madrileño de Lavapiés

Yo entiendo que alguien no crea en Dios. Pero lo que me resulta del todo incomprensible es la beligerancia de algunos ateos contra Cristo y su Iglesia. Algo en su conciencia les debe estar diciendo que no lo hacen bien y de ahí su activismo frente a la religión.

Se ha de reconocer que hay muchos ateos que son atendidos por Cáritas, por el Economato, reciben ayuda importantes por parte de la Santa Iglesia Católica, incluso les ayudan a encontrar trabajo digno y duradero. Cosa así no suele hacer la sociedad, sino la Iglesia Santa de Dios.

En esto, se puede decir, que son los ateos que pueden disfrutar de los privilegios de la Iglesia Católica. Cuando los ateos son socorridos por la Iglesia católica, no les pide nada en cambio a los que no quieren creer, la Iglesia no imponen nadá, pero los ateos, imponen, exigen.

La naturaleza de la Iglesia viene de Cristo, es hacer bien a toda clase de personas, y no mira la condición de esta.

Todo el bien que hace la Iglesia, es imposible que lo haga sociedades ateas.

Se equivocan de medio a medio al considerar los ateos que tenemos un Estado Católico.

Porque haya catolicos en el Estado, eso no quiere decir que el Estado sea católico. También hay judios e islamistas en el Estado y por eso el Estado ni es judío ni es islamista.

No quieren darse cuenta de que este es un Estado plural: hay diversas religiones, diversos partidos políticos, diversos sindicatos, ect.

Ahora bien si lo que quieren decir es que el Estado no permita que haya católicos en España o que los católicos no puedan expresarse en los medios públicos,
entonces es evidente que lo que persiguen es un totalitarismo y discriminan a los ciudadanos por motivo de religión.

Según la Constitución no se puede discriminar a nadie por motivos religiosos: por tanto toda religión, también la catolica tiene derecho a los espacios públicos, a las ayudas y la protección que el Estado presta a otros grupos sociales y ha proclamar sus propias ideas.

¿Porqué los ateos pueden proclamar su ateísmo, los gays su gaysmo, los sindicatos su sindicalismo, los partidos sus ideas y sus programas, y los católicos no podemos proclamar nuestras ideas evangélicas?

Dicen los ateos y gays que nuestras ideas les ofenden.
A mí también me ofenden las ideas de los ateos y los gays y tengo que aguantarme precisamente porque no estamos en un Estado Católico ni tampoco Ateo y Gay, sino en en Estado plural.

Jose Carlos, no sé dónde ves la beligerancia. El de ayer fue un acto pacífico para manifestar la opinión contraria a un asunto puramente económico: la disparidad de criterio del gobierno al recortar drásticamente servicios básicos mientras mantienen subvenciones significativas a la Iglesia Católica.

Con todo el cariño y respeto a la innegable labor de Cáritas tengo que decir, sin miedo a parecer desagradecido, que a día de hoy preferiría mantener mi trabajo que depender de la ayuda.

Estoy de acuerdo con el comentario de Jose Luis: es innegable que la Iglesia hace el bien, pero no tenemos el monopolio de las buenas acciones, y no podemos obviar las ayudas que recibimos del Estado; en momentos en los que otros sufren recortes, sería cristiano y de justicia que nosotros reclamásemos un trato similar. Lo contrario no hace sino alimentar los argumentos de nuestros detractores.