(Zenit) Las ONG definían como “discriminatorias e ilegales“ las opiniones negativas sobre la homosexualidad expresadas en los libros de texto en cuestión. Kontra e Iskorak pidieron al Gobierno de Zagreb que los prohibiese.
En el mensaje, firmado por los coordinadores de las dos ONG, Sanja Juras y Edo Bulic, se calificaba como “escandalosa“ la respuesta del Ministerio de Ciencia, Educación y Deporte al defensor cívico, que había interpelado a las autoridades competentes con respecto a los libros de texto considerados homofóbicos, entre ellos Con Cristo por la calle.
Para Kontra e Iskorak, la enseñanza de la Iglesia, que considera que “los actos de homosexualidad son intrínsecamente desordenados“ porque “cierran el acto sexual al don de la vida“ (CCC, n° 2357), sugiere que la homosexualidad es una anomalía o incluso una enfermedad, lo que es contrario a toda una serie de normativas nacionales e internacionales contra la discriminación.
Según la declaración del Asociación para la Libertad Religiosa (ARF, por su acrónimo en inglés), firmada por once representantes de varias confesiones y religiones, Kontra e Iskorak pretenden, con sus acciones legales e iniciativas contra escuelas y maestros que usan los libros de texto, la abolición de la libertad de expresión en Croacia, no sólo para los creyentes y las comunidades religiosas sino para todos los ciudadanos.
“La libertad de palabra incluye la libre expresión de opiniones y de posiciones, sean estas exactas o no“, se lee en la declaración. “Discriminación significa negar ciertos derechos a una persona o grupo de personas sin motivaciones apropiadas“, continua el texto.
Como recuerdan los firmantes, los libros de texto para la educación religiosa -no sólo los de la Iglesia católica, sino también de otras denominaciones y comunidades religiosas- no sólo rechazan los comportamientos homosexuales. Se declaran como inaceptables también “muchos otros tipos de comportamientos, como el divorcio, la promiscuidad, la anticoncepción (…), la infidelidad conyugal, la mentira, la falta de asistencia a los ancianos y a los enfermos“.
En su llamamiento, la ARF pide a las asociaciones pro derechos de los homosexuales, a las personas homosexuales, a los grupos pro derechos humanos, al Estado, a los organismo gubernamentales y a todos los ciudadanos de Croacia “se distancien“ de la iniciativa de Kontra e Iskorak y que “protejan el derecho a la libertad de palabra de todos los creyentes, comunidades religiosas y los demás ciudadanos croatas“. A las dos ONG, los firmantes les piden que “revisen sus posiciones“.