(Efe) A través de su abogado, Mons. Finn se declaró no culpable y negó cualquier responsabilidad, pese a que la acusación argumenta que tenía elementos suficientes para pensar que los niños fotografiados por Ratigan estaban siendo víctimas de abusos.
La diócesis de Kansas City, dirigida por Finn y que cuenta con 134.000 miembros, también ha sido imputada por encubrir supuestamente las actividades de Ratigan, que enfrenta cargos por posesión de pornografía infantil.
Mons. Finn es el cargo más alto de la Iglesia Católica en ser imputado por un caso de pederastia en la historia del país, de acuerdo con la prensa estadounidense.