(ACI) La legisladora dijo que “no me siento con autoridad de condenar a una madre por decidir si tiene un niño en su vientre durante nueve meses y tener a su bebé sólo unas cuantas horas en sus brazos“. La decisión de los senadores se tomó en medio de las protestas de los activistas pro-vida dentro y fuera del Parlamento.
Ellos se encontraban allí en representación de los 5 millones de colombianos de distintas confesiones que firmaron para apoyar el proyecto que buscaba modificar el artículo 11 de la Constitución para defender la vida desde la concepción hasta la muerte natural.
Al respecto, el presidente del Partido Conservador, José Darío Salazar, señaló que pese a la decisión del Senado seguirá trabajando para defender la vida y buscarán promover un referéndum para que sea el pueblo colombiano el que decida.
A su turno el Procurador General de la Nación, Alejandro Ordónez, dijo que la decisión de los senadores ha sido un “golpe duro“ y advirtió que “si no se respeta la vida humana por nacer qué vamos a esperar de todas las personas en una sociedad que cada vez más se empeña en su actitud individualista y hedonista“. “Lo más grave que le puede acontecer a un ordenamiento jurídico es que se le confiera derecho a la muerte con el pretexto de proteger la vida“, manifestó.
En 2006 la Corte Constitucional de Colombia despenalizó el aborto en los casos de violación, riesgo de muerte para la madre y malformación congénita del bebé. La reforma que ha sido rechazada ahora habría abolido estas excepciones blindando la vida humana en todas sus etapas
La Iglesia seguirá defendiendo la vida
Al conocer la decisión de los senadores de rechazar la reforma constitucional, el Secretario General de la Conferencia Episcopal de Colombia (CEC), Mons. Juan Vicente Córdoba, señaló que la postura de la Iglesia es “proseguir en la lucha por el respeto a toda vida humana, desde la fecundación hasta la muerte natural“.
“El aborto constituye una grave ofensa al Creador y un atentado contra el más fundamental de los derechos humanos“, agregó. El prelado lamentó con esta decisión “es evidente que la voluntad popular no se vio reflejada en el resultado del debate“. Finalmente exhortó a “no desfallecer en esta lucha. Hoy más que nunca, debemos reafirmar nuestro compromiso con la defensa de la vida y de la auténtica dignidad de la mujer colombiana“.