Brasil habla de una «gigantesca movilización nacional» contra el mosquito, pero no es sino un sueño irrealizable ya que el Gobierno ha fallado repetidamente en sus actuaciones.
El virus Zyka es el último horror en herir a la humanidad, pero es una situación de sobra conocida tristemente, por la que ya hemos pasado, por haber ocurrido antes muchas veces.
Sin querer minimizar la importancia de la amenaza del Zyka, recordamos que la malaria continua matando a miles de personas, en especial niños, en ciertos países, principalmente subsaharianos. Y otras enfermedades, con origen en mosquitos, no son extrañas y parece que continúan aumentando.
Por ejemplo, las Indias Occidentales han visto la propagación de «chikungunya», otra repulsiva enfermedad propagada por mosquitos y que aún no tiene vacuna.
Dado que la vacuna contra la malaria sigue esperando, y lo mismo ocurre con la del Zyka y la de «chikungunya», la única estrategia a seguir en este momento, para nosotros, es la prevención.
La tragedia es que la prevención, mientras tiene gran éxito en ciertas partes del mundo, todavía no funciona en otros.
Un doctor brasileño, indicaba en «The Guardian», lo que es necesario hacer:
«El tema fundamental ahora es luchar contra los mosquitos.
Esto se está haciendo con una gigantesca movilización a nivel nacional, incluyendo las compañías estatales, los ministerios gubernamentales, las alcaldías y el ejército. Básicamente, el riesgo está en cualquier cosa que almacene agua estancada al aire libre y, también, el agua de lluvia, el agua potable o cualquier otra que esté al aire libre. Estos receptáculos necesitan renovarse y cubrirse.
Los depósitos de agua necesitan ser protegidos con tapas o redes, de manera que los mosquitos no puedan depositar sus huevos en ellos.
Si esto no es posible, entonces hay que fumigar para prevenir la atracción de los mosquitos por el agua.
Esto debe aplicarse a los depósitos abiertos, piscinas, fuentes en parques públicos, en edificios que mantienen agua sin el drenaje adecuado. Incluso el agua potable debe ser fumigada».
Todo esto suena muy bien, y lo hace como si fuese muy fácil realizarlo. Sin embargo, en los países afectados por el Zyka conseguir que cada ciudadano disponga de una mosquitera y que destruya los núcleos de crecimiento de los mosquitos es prácticamente imposible de alcanzar.
Puede haberse conseguido en los Estados Unidos e Italia, ya que ambos fueron puntos calientes por malaria.
En otras palabras, la verdad absoluta es esta: en los países en que la gente está afectada por enfermedades originadas por mosquitos, la culpa real no es de estos, es de la mediocre actuación de los gobiernos, de la falta de organización y de liderazgo.
Mientras Brasil habla de una «gigantesca movilización nacional» contra el mosquito, todo quedará como un mal sueño, en un país donde el gobierno ha fallado reiteradamente.
Aunque las mosquiteras son muy efectivas contra la propagación de la malaria, cuando se usan bien, podrían ser igual de útiles contra el Zyka, pero cuesta trabajo que la gente las utilice. Otro debate que pudiera reabrirse es el del uso de pesticidas para acabar con los mosquitos.
Tiempo atrás, el DDT tuvo algo de éxito combatiendo la malaria, pero el peso de la opinión científica se ha vuelto ahora contra el uso del DDT y es considerado ineficaz, aunque el comienzo de Zyka puede reabrir la discusión en algunas partes.
Pudiera haber otros modos de combatir a los mosquitos, sin embargo, que son más ecológicos y más efectivos, al final. Una vez vivía en una casa, en un territorio muy afectado por mosquitos, donde estábamos a salvo gracias a una colonia de murciélagos. Estos calumniados e inofensivos animales, comen mosquitos vorazmente, y deberían promocionarse: más aún, son nocturnos, justo como los mosquitos.
Mientras tanto, si alguien está en un lugar donde existe la posibilidad de contagiarse de Zyka (o de malaria o de «chikungunya», es indiferente) tome algunas medidas de precaución, sensatas y efectivas: duerma bajo una mosquitera, lleve siempre camisas de manga larga, pantalones largos, preferible siempre de color claro, y aplíquese por todo el cuerpo un repelente de insectos.
Estos sistemas no son perfectos, pero reducirán el riesgo de manera considerable.
En cuanto a quedarse embarazada, es un riesgo, pero con medidas sensatas como las indicadas, ese riesgo puede reducirse al mínimo.
La incidencia actual del Zyka no justifica algunas de las reacciones que se han provocado.
Alexander Lucie-Smith, sacerdote
Traducido por «Laudetos IesusChristus» del equipo de traductores de InfoCatólica
Texto original en Catholic Herald