La diputada de UPyD firma hoy un panfletario artículo de opinión en El País, en el que tras asociar las posiciones provida y abortistas con «hooligans», se dedica a apoyar las tesis abortistas más radicales valiéndose de descalificaciones, de falsedades y de consignas mitineras que no se sostienen tras leer el anteproyecto de ley del aborto presentado por Gallardón.
Díez echa mano del mismo tramposo argumento laicista que usa el PSOE
Por ejemplo, Rosa Díez tacha dos veces el anteproyecto de Gallardón de «ley confesional», a pesar de que ayer mismo la Conferencia Espiscopal Española lo criticó pues, a fin de cuentas, de llegar a aprobarse permitiría seguir matando a seres humanos inocentes e indefensos. De hecho el anteproyecto es, en sus líneas generales, un calco de la ley abortista impuesta por el PSOE de 1985, al consentir matar a niños por nacer mediante supuestos despenalizadores e incluso financiar ese acto tan atroz con fondos públicos pagados por todos los contribuyentes. Pero en ciertos puntos el anteproyecto de Gallardón aún va más allá de la ley de 1985 al eximir de toda responsabilidad penal incluso a las mujeres que aborten de forma ilegal. Pues bien: según Díez una ley así responde «únicamente al principio de la moral religiosa de sus proponentes». La monda. ¿Tan escasa es la honradez intelectual de Rosa Díez que recurre a argumentos como éstos a sabiendas de que son falsos? Y dicho sea de paso: aunque la ley se identificase con una moral religiosa, ¿piensa Rosa Díez pronunciarse contra toda norma legal que coincida con preceptos religiosos como «no matarás» o «no robarás»?
A falta de buenos argumentos, Díez recurre a descalificaciones ideológicas
Por otra parte, y al más puro estilo del manual de consignas del PSOE, Díez también tacha la ley Gallardón de «retrógrada», dice que es «intervencionista, autoritaria y también predemocrática» y la considera «propia de una España en blanco y negro que los más reaccionarios del Partido Popular y del Gobierno parecen empeñados en recuperar». Insisto: con ello se refiere a una ley muy parecida a la que impuso el PSOE cuando ella era militante de ese partido. Sin embargo, Rosa Díez nunca dedicó esas descalificaciones contra dicha ley. Por otra parte, hay que recordar que izquierdistas como el uruguayo Tabaré Vázquez, el ecuatoriano Rafael Correa, los sandinistas nicaragüenses y socialistas españoles como el exalcalde de La Coruña Francisco Vázquez, la exsenadora del PSC Mercedes Aroz y el exconcejal del PSOE Joaquín Manuel Montero son contrarios al aborto. ¿Todos unos «reaccionarios», según Rosa Díez? Y cuando Hitler impuso el aborto en Polonia y Ucrania, vendiéndolo como «auswahl-freiheit» -libertad de elección-, con el fin declarado de diezmar a la población nativa, ¿lo hacía en aras del progresismo? Cuando la fundadora del mayor lobby abortista de EEUU Margaret Sanger planteó la legalización del aborto como un buen medio para «exterminar a la población negra», como reconocía en una carta privada publicada tras su muerte, ¿lo hacía en aras del progresismo? Cuando Henry Kissinger y Hillary Clinton plantearon la legalización del aborto en otros países como una herramienta geopolítica para garantizar los intereses y la seguridad nacional de EEUU, ¿lo que consiguieron exportando el exterminio de los hijos por nacer de los hambrientos del mundo es un éxito del progresismo?
Para Rosa Díez si defiendes a los niños por nacer no eres ‘normal’
Lo más llamativo es lo que Rosa Díez cuela al decir que la ley Gallardón es «tan retrógrada que no cuenta ni con el apoyo de los más normales de los dirigentes del PP». Díez pone «normales» en cursiva, pero ahí queda la cosa. ¿Para Rosa Díez si defiendes a los niños por nacer eres subnormal o anormal? Con la torpeza que se gasta en su panfleto abortista de hoy, antes de terminar de leerlo ya esperaba verla asociando ser provida con ser «gallego en sentido peyorativo», desafortunada expresión que usó contra Zapatero -que ni siquiera es gallego- en 2010.
La diputada de UPyD intenta disfrazar la terrible realidad del aborto
Por supuesto, y como hace con absoluto descaro el lobby del aborto, Rosa Díez abusa de los eufemismos para intentar disfrazar la terrible realidad del aborto, que es matar y descuartizar a un ser humano inocente e indefenso. A este acto de enorme crueldad, con el que algunos empresarios sin escrúpulos obtienen enormes beneficios -en buena medida pagados por los contribuyentes, además- la diputada de UPyD se refiere con expresiones como «interrupción libre del embarazo», «libre decisión de una mujer libre» y «maternidad consentida». A propósito de esto último, e igual que hizo Monago hace unos días, Díez copia la colosal falacia lanzada por su excompañera de partido Leire Pajín en 2010, según la cual el aborto legalizado te permite decidir si quieres ser madre, cuando en realidad sólo te permite decidir si quieres ser la madre de un niño vivo o de un niño muerto. Rosa Díez va incluso más allá y afirma que «con la ley Rajoy, una mujer adulta está obligada a renunciar a su libre albedrío, ya que el Gobierno nos prohibirá o nos obligará a ser madres». Alucinante. Y esta absurda afirmación la usa para referirse a una ley que -insisto- mantiene la financiación pública del aborto y exime de toda responsabilidad penal incluso a las mujeres que abortan de forma ilegal. Dicho sea de otra forma: Rosa Díez miente con absoluto descaro, pues o bien opina sobre dicho anteproyecto sin habérselo leído, o bien se lo ha leído y, a pesar de ello, lo tergiversa de la forma más burda.
¿Si amparas a fetos animales eres progresista, y si amparas a los humanos un reaccionario?
Hay que recordar, además, que en abril de 2013 UPyD votó, junto a PP y PSOE, a favor de dar amparo legal a «determinadas formas fetales de mamíferos» en el marco de la llamada «Ley de Protección animal». Es decir, que para el partido de Rosa Díez amparar a fetos de animales es cosa fetén, pero amparar a niños por nacer es de «reaccionarios». Toma coherencia.