Si uno toma un libro de medicina cualquiera y busca imágenes de niños con discapacidades genéticas, las fotos que normalmente uno encuentra no son para nada alentadoras. Y si quien está en la búsqueda son unos padres de familia que descubren que su hijo va a nacer con alguna de esas condiciones, al ver esas imágenes pueden optar por el aborto como una solución no sólo fácil de tomar, sino incluso lógica.
Este fue el dilema al que se enfrentó Rick Guidotti, un fotógrafo que pasó años de su vida en París, Milán y Nueva York retratando la belleza que el mundo de la moda ha querido marcar a nuestra sociedad.
Modelos como Claudia Schiffer o Cindy Crawford pasaron delante de su lente de fotografía. Hasta que un día consideró fotografiar a una niña discapacitada: el horror que vio en los libros de medicina lo dejó paralizado.
«Busqué la humanidad y no la encontré -dice un alterado Rick en una entrevista a la cadena estadounidense NBC-. Así no funcionan las cosas; esas imágenes no ayudan y estoy convencido que hay mejores maneras de presentarlo.
He hablado con muchos consultores genéticos que al presentar a unos padres lo que su hijo tiene, dicen: «Ok, esto es lo que tu hija va a tener. Lee esto» y se ven obligados a tapar la fotografía porque asustaría a la familia desde el primer momento. Tiene que haber otra manera de presentar esta información a esa familia».
Y es esta otra manera lo que ha estado dedicando los últimos años de su vida: redefinir la belleza que nuestra sociedad nos presenta a través de los ojos, de las sonrisas, de las vidas de estas personas.
«No se trata de comparar a Claudia Schiffer o a Cindy Crawford con esta niña -comenta Rick-. Se trata de ver más allá de lo que se nos dice y a lo que se nos obliga a creer que es la belleza». A esto es justamente a lo que está dedicando toda su vida, con exposiciones alrededor del mundo con sus fotografías -llamadas Positive Exposure-, con sus conferencias.
Y todo, con un objetivo: que se vea a esas personas no como enfermedades, sino como seres humanos. «Les reto a que vean la belleza en esas personas -dice Rick-. Una vez que la descubras, te abruma». Y eso es justo lo que estas fotografías nos enseñan...
Grace está en segundo de primaria y es buena estudiante. Tiene cuatro mascotas: dos gatos (Cecilia y Leonardo) y dos perros (Lucy y Jackson). Es una artista ávida, le gusta cantar karaoke y toma clases de claqué. Es la más joven de la familia y le llaman «La Reina», pues trata, muchas veces sin éxito, de tomas las decisiones. Tiene Síndrome de Down.
Corrina vive con una condición llamada 15 Isodicéntrico. Ama su iPad.
Bill falleció en el año 2010, debido a trastorno del tejido conectivo llamado Síndrome de Marfan. Siempre quiso que todos los que vivían como él se sintiesen orgullosos de sus extremidades largas. Quería ser piloto.
A Ben le gustaban los animales. Murió recientemente por las complicaciones a causa de la Miopatía miotubular que tenía. Aún hoy sigue inspirando a muchas familias que tienen miembros con este síndrome.
Irina nació en Rusia y fue puesta en un orfanato cuando tenía cuatro años. Adoptada a los cinco años, vive ahora en Maine (EEUU). Tiene Acondroplasia, la forma más común de enanismo. Está en tercero de primaria, le gustan las Spiderman, Batman y ama montar su bicicleta.
A Deak le gusta jugar con el iPad y come todo lo que le ponen delante, especialmente la pizza. Le encanta levantarse cada mañana e ir al colegio, por primera vez en su vida. Sonríe, grita emocionado siempre. Vive con Monosomía 18p.
P. Juan Antonio Ruiz, LC, sacerdote