Receta de tarta sin leche, huevos o mantequilla

Hasta hace poco, mi hijo tenía alergia a cacahuetes (una alergia muy grave y mucho más común en los EE.UU. que en España) y mi hija a huevos. Tenían que evitar cualquier comida que tuviera hasta partículas microscópicas de esos ingredientes para evitar un shock que les cortara la respiración (especialmente en el caso de la alergia a cacahuetes).

Por ejemplo, si algo fue preparado en la misma fábrica que usa esos ingredientes, el producto en los EE.UU. suele indicarlo en su etiqueta. Comprar comida de pastelerías, panaderías o restaurantes en que usan nueces o cacahuetes era un riesgo. Además, había que llevar siempre una o dos vacunas “Epipen” por si acaso.

Gracias a Dios, mis hijos ya no tienen alergias (algo que sorprendió al médico). Pero, mientras tenían alergias, aprendí a cocinar muchas cosas sin huevos y a controlar mi temor.

Modo de preparación
1) Mezclar en un tazón grande los ingredientes secos y en otro tazón los líquidos.
2) Juntar los ingredientes, mezclándolo todo bien.
3) Meter en dos moldes redondos o en uno grande rectangular grande (previamente untados con un poco de mantequilla y enharinados).
4) Meterlo en el horno a temperatura de 350 grados F (175 grados C) 30 minutos.
5) Dejar enfriar en la fuente. Espolvorear con azúcar glasé.

Para hacer el diseño de “rayas de cebra” con esta receta u otras recetas de tarta
según “www.bakingbites.com” [fuente de la foto de la tarta]
1) Dividir la mezcla en dos tazones antes de poner en los moldes y añadir 3 cucharadas de cacao en polvo (sin azúcar) a una mitad.
2) Poner los moldes sobre una superficie plana/
3) Poner 3 cucharadas de la mezcla de chocolate o vainilla (se puede usar una sopera pequeña para cada tazón) en el centro de un molde y añadir enseguida 3 del otro color también en el centro y sin mover el molde.
4) Repetir hasta llenar los dos moldes al mismo nivel antes de meterlos en el horno.

Variaciones con leche: cortar horizontalmente por la mitad y rellenar con nata y fresas o con helado, decorando la tarta según su gusto.

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El evangelio del II Domingo de Pascua dice: “Al anochecer de aquel día, el primero de la semana, estaban los discípulos en una casa, con las puertas cerradas por miedo a los judíos” (Jn. 20, 19) Podemos prescindir de muchas cosas (como la leche, los huevos y la mantequilla), pero nada podemos hacer sin el Señor. Por eso, ¡qué vacío y temor experimentaron los apóstoles tras la muerte del Señor y tras haber visto la tumba vacía!

Algo de temor sentimos todos los padres de que algo malo les pase a nuestros hijos y eso aumenta con la noticia de una alergia que amenaza la vida de alguno. Pero, por amor, se buscan formas de superar el temor y hacer las dificultades más llevaderas para los que amamos, aunque sea de una forma tan simple como buscar una receta de tarta sin huevos o tan difícil para algunos como es cambiar los planes para grandes reuniones familiares, por ejemplo.

Todos tenemos nuestros temores y dudas como Sto. Tomás: ¿Se les pasará la alergia algún día? ¿Veremos a Jesús y por qué no se ha aparecido a nosotros? ¿Cómo se puede hacer una tarta buena sin leche, huevos ni mantequilla? ¿Cómo podemos evangelizar sin poder “ver” a Jesús en nuestras vidas? ¿Vinagre en una tarta de cumpleaños? ¿Qué sentido tiene la Cruz?

Sí, los apóstoles estaban encerrados por la noche por medio de los judíos, pero las mujeres fueron a la tumba al amanecer y los apóstoles corrieron a la tumba por la mañana. Eso hicieron por el gran amor con que superaron el temor por sus vidas. Tomaron precauciones por sus vidas, pero el Señor sabía muy bien que los apóstoles le amaban a pesar de sus debilidades humanas y sabe muy bien también el amor que encerramos en nuestros corazones a pesar de las dudas, los temores, las dificultades que podamos tener en nuestras vidas. A nosotros también nos dice: “¡La paz esté con vosotros!”

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Estación II del Vía Lucis – Los discípulos encuentran vacía la tumba del Señor

P Te adoramos, oh Cristo resucitado, y te bendecimos.
T Porque con tu Pascua has dado la vida al mundo.

Del Evangelio según San Juan (Jn 20, 1-9)
“El primer día de la semana, María Magdalena fue al sepulcro al amanecer, cuando aún estaba oscuro, y vio la losa quitada del sepulcro. Echó a correr y fue a donde estaba Simón Pedro y el otro discípulo, a quien tanto quería Jesús, y les dijo: “Se han llevado del sepulcro al Señor y no sabemos dónde lo han puesto") Salieron Pedro y el otro discípulo camino del sepulcro. Los dos corrían juntos; pero el otro discípulo corría más que Pedro; se adelantó y llegó primero al sepulcro; y, asomándose, vio las vendas en el suelo y el sudario con el que le habían cubierto la cabeza, no por el suelo con las vendas, sino enrollado en un sitio aparte. Entonces entró también el otro, el que había llegado primero al sepulcro; vio y creyó. (Pues hasta entonces no habían entendido la Escritura: que él había de resucitar de entre los muertos).”

Meditación con fragmentos del Catena Aurea de Sto. Tomás de Aquino

1) “Como ya había pasado el sábado, durante el cual lo prohibía la Ley, no pudo María Magdalena contenerse, y muy de mañana se fue a buscar consuelo al sepulcro.” (S. Juan Crisóstomo)

2) “El Señor resucita estando cerrado el sepulcro y sellada la losa. Pero como convenía que otros se cercioraran, fue abierto el sepulcro después de su resurrección, y así se cree que sucedió, y fue lo que alarmó a María que, viendo quitada la piedra, no entró, ni miró, sino que aceleradamente, a impulsos de su mucho amor, corrió a anunciarlo a los discípulos. Ella no sabía nada en claro respecto a la resurrección, sino que creía que había sido trasladado el cuerpo.” (S. Juan Crisóstomo)

3) “Hablando así, se expresa el todo por la parte, porque había venido buscando el cuerpo del Señor, y se lamentaba como si todo El hubiera sido robado.” (S. Gregorio)

4) “Aquellos, que amaron más que los otros, corrieron más; a saber, Pedro y Juan.” (S. Gregorio)

5) Admira en Pedro la prontitud de la vida activa, y en Juan la contemplación humilde y práctica de las cosas divinas. Con frecuencia los contemplativos llegan por la humildad al conocimiento de las cosas divinas; pero los activos, guiados por su fervorosa asiduidad, llegan primero a la plenitud de este conocimiento. (Sto. Tomás de Aquino)

Pregunta del día [Puede dejar su respuesta en los comentarios]: ¿Qué otros ejemplos conoce de la vida de los santos o en el mundo moderno que muestran cómo “el amor excluye el temor”?

Mañana –Vía Lucis III – Jesús Resucitado se aparece a María Magdalena - “Y los discípulos se llenaron de alegría al ver al Señor” (Jn. 20, 20)