La condecoración militar Corazón Púrpura de los Estados Unidos
El General George Washington, el primer Presidente de los Estados Unidos y Comandante-en-jefe del Ejército Continental, otorgó a tres soldados una insignia de mérito. El único que aún se conserva [ver foto] es de aprox. 1782, cuando declaró Washington en sus Órdenes Generales que los autores de “una acción singularmente meritoria” podrían llevar sobre su pecho, en el lado izquierdo, un corazón de tela o seda púrpura terminado con encaje, por ejemplo.
Es la condecoración militar más antigua de los que todavía se conceden en los EE.UU. y la primera para soldados corrientes, aunque no se concedió durante 150 años desde finales de la Guerra Revolucionaria hasta la Primera Guerra Mundial, en 1932, el bicentenario del nacimiento de George Washington.
Pasó a recompensar heridas en combate en vez de servicio meritorio. Se cambió la insignia a una medalla más duradera de metal, con un busto de Washington en el centro y el escudo de Washington sobre el corazón.
También se otorgaba de 1942 a 1997 a la población civil afiliada con el ejército, aunque nadie desesaba recibirlo por el sacrificio que suponía. Se concede en nombre del Presidente de los EE.UU. a cualquier miembro de las Fuerzas Armadas de los EE.UU. que desde el 5 de abril, 1917 ha sido herido, matado, muerto tras ser herido o hecho prisionero de guerra.
Se ofrece no por recomendación sino por mérito en combate contra el enemigo o en misiones de mantener la paz (desde 1973), por heridas que requieren tratamiento médico. Cerca de 1,7 millones han sido concedidos y tienen tantas medallas ya hechas que en cuanto alguien es herido en combate hoy en día se les suele dar enseguida la medalla.
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¿Qué acción más meritoria puede haber que la de la Salvación del mundo? El Sagrado Corazón de Jesús, insignia del Amor de Dios en Jesucristo no para de arder por los hombres, como lo reveló el Señor a Sta. Margarita María de Alacoque [que dibujó el Corazón que acompaña el artículo]. Muestra heridas en combate contra el Enemigo que sufrió a lo largo de su vida como en Su Pasión y Muerte, dejándose traspasar. En Su centro está Dios, cuya voluntad cumplió perfectamente y el escudo que se alza sobre el corazón es la Cruz.
Es el mismo que recibimos como nos indica Jesús en el Evangelio del Domingo del Corpus Christi al decir: “Tomad, esto es mi cuerpo” (Mc. 14, 22).
“Jesús se encuentra en el Sacramento de la Eucaristía, en el cual el amor lo tiene amarrado como una víctima siempre dispuesta a ser inmolada para la gloria de su Padre y nuestra salvación. Su vida está totalmente escondida a los ojos del mundo, los cuales sólo logran vislumbrar las pobres y humildes apariencias del pan y del vino.[…] Jesús está siempre solo en el Santísimo Sacramento. ¡Haced lo posible por no perder una sola Comunión, no habría otro modo de darle mayor gozo a nuestro enemigo el demonio!” (Sta Margarita María Alacoque)
El Señor está dispuesto a otorgar a todos el mismo honor de sufrir por la gloria de Dios, pero pocos desean ganarlo en este mundo, luchando por la Patria Eterna.
“Preséntame un corazon amante y comprenderá lo que digo. Preséntame un corazón inflamado en deseos, un corazón hambriento,un corazón que, sintiéndose solo y desterrado en este mundo, esté sediento y suspire por las fuentes de la patria eterna, preséntame un tal corazón y asentirá en lo que digo. Si, por el contrario, hablo a un corazon frío, éste nada sabe, nada comprende de lo que estoy diciendo.“ (S. Agustín, Trat. Evang. S. Juan,26).
Lo que no le gusta a la gente oír es que los millones en el Cielo no llegaron allí sin heridas que sanó el Divino Doctor.
“Mi sacrificio es un espíritu quebrantado, un corazón quebrantado y humillado tú no lo desprecias. Este es el sacrificio que has de ofrecer. No busques en el rebaño, no prepares navíos para navegar hasta las más lejanas tierras a buscar perfumes. Busca en tu corazón la ofrenda grata a Dios. El corazón es lo que hay que quebrantar.” (S. Agustín, Sermón 19).
Nos recuerda S. Ignacio de Antioquía que Cristo nos dió ejemplo. “Tened unos para con otros un corazón grande, con mansedumbre, como lo tiene Dios para con vosotros.” (S. Ignacio de Antioquía, Carta a S. Policarpo de Esmirna,5,1 ss. ). Combatimos sufriendo, pero con ánimo mientras miramos hacia el Señor, que lucha con nosotros y por nosotros. El mérito de la victoria será todo del Señor, que nos recompensará no este mundo, sino en Su Reino Celestial.
Pregunta del día [Puede dejar su respuesta en los comentarios]: ¿Qué imágenes de combate hay en las Escrituras y en las vidas de los santos para animarnos en nuestro propio combate diario? En el comienzo de este Año Sacerdotal, ¿hay algún ejemplo de un sacerdote santo que le inspira en particular?
Mañana – Fiesta del Inmaculado Corazón de María - “Ésta es mi sangre” (Mc. 14, 24)
4 comentarios
La infantería de Marina española es el cuerpo de la Fuerzas Armadas españolas más antigua del mundo. Tienen un lema ya conocido DUC IN ALTUM (boga mar adentro), con dureza y sacrificio hacia las estrellas. Sus componentes tienen marcados unos valores muy importantes: Filiación divina, servicio a la patria, honor, lealtad, compañerismo, espíritu de sacrificio, responsabilidad, honestidad. La búsqueda de altos ideales por una España mejor y con una excelente Guía, la Virgen del Carmen.
¡Por esos soldados que siguen a Cristo en la defensa de la Patria, con alegría en sus corazones, con coraje y superando cualquier desaliento!
P.D. Mi sobrinito Víctor va “viento en popa”. Ya pesa 740 grs. Le van alimentando con leche materna y está progresando mucho. Mi cuñada ya ha podido tocarle, acariciarle. Damos gracias a Dios y a Vds. por sus oraciones.
Recordaré a tu sobri y a tu cuñada,voy a misa en media hora.
ML
Al leer el post lo primero que me vino a la mente es que,ayer sábado,tuve la dicha de participar a las 8 h. de la misa del Inmdo. Corazón de María;proclamé la epístola y el salmo y canté el aleluya,es que Ella "conservaba todas estas cosas meditándolas en su CORAZÓN",por cierto pedí por tu preparación,como padrino indirecto,si me lo permites.
En los EE.UU. la infantería de Marina tiene el lema "Semper Fidelis" ("Siempre fieles" - a la patria) y se les conoce como "Los pocos. Los orgullosos." Son muy respetados en los EE.UU. y tienen muy buena reputación entre las Fuerzas Armadas de los EE.UU., pero ¡qué contraste con la filiación divina que indica y el patronaje oficial de la Virgen del Carmen de la infantería de Marina española!
Es que tanto el Corazón de Jesús como el de María no son imágenes de devoción piadosa blanda... son imágenes del dolor y el sacrificio que supone el verdadero amor a Dios sobre todo y al prójimo como Cristo nos amó. Muchísimas gracias por sus oraciones.
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