La primera beata de Venezuela
En el Evangelio del IV Domingo de Pascua dice Jesús que sus ovejas: “escucharán mi voz” (Jn. 10, 16). La Beata Madre María de San José(1875-1967) la oyó muy pronto. Recibió la Primera Comunión a los 13 años y a la misma vez se consagró a Dios.
Empezó a enseñar a niños pobres en su hogar, creando así una escuela católica gratuita. La llamaban “la niña del Cristo” porque llevaba siempre un crucifijo puesto. Consiguió que su padre se convirtiera, casándose éste con la madre de la beata y recibiendo la Unción de Enfermos poco antes de morir. En agradecimiento, prometió perpetuo ayuno, lo cual hizo diez años hasta que el P. López, su párroco y director espiritual, le dispensó.