La devoción de los musulmanes a la Virgen María
Jesús muestra preocupación en el Evangelio del IV Domingo de Pascua por: “otras ovejas que no son de este redil” (Jn. 10, 16). El Señor busca la salvación de todos y un medio de llegar a Él es por Su Madre, la Virgen María. “María se presenta como punto de encuentro en el diálogo interreligioso”, dice el Arzobispo Francesco Giogia, ofm, en “María vista por judíos y musulmanes” (Zenit.org). En el mismo artículo, el cardenal Arinze explica: “‘Si bien judíos y musulmanes no aceptan la verdad central de la divinidad de Jesucristo, ellos honran enormemente a María’”.
Una muestra de devoción es que las mujeres musulmanas piden ayuda a la Virgen María si desean tener hijos (o durante el período de lactancia si los tienen) en la Gruta de la Leche (cerca del Santuario de la Natividad en Belén):
“que de acuerdo a la tradición apócrifa es el lugar en donde María se escondió para amamantar al niño Jesús. Para los historiadores puede ser el lugar donde la sagrada familia vivió antes de la fuga a Egipto. La gruta es un lugar de devoción para mujeres cristianas y musulmanas de la región.”(H2Onews.org)
Esa cita es del siguiente vídeo con imágenes de la gruta: