Crítica de la prioridad de Marcos

San Marcos

Los argumentos a favor de esa prioridad no son convincentes

En este capítulo expondré y criticaré ocho argumentos a favor de la prioridad de Marcos y un argumento en contra. Me he basado sobre todo en dos fuentes, una a favor de la prioridad de Marcos y otra en contra: el sitio web Early Christian Writings1 y la serie de 13 artículos de Kearlan Lawrence titulada Synoptic Problem: Markan Priority Defies Logic (El problema sinóptico: la prioridad de Marcos desafía la lógica).

Early Christian Writings presenta de un modo bastante detallado seis argumentos, basados respectivamente en el orden de los incidentes, el contenido, la gramática y los arameísmos, las lecturas más difíciles, la redacción y la teología; y concluye que la convergencia de esos seis argumentos hace de la prioridad de Marcos una hipótesis segura y bien fundada.

Lawrence presenta y critica desde el punto de vista lógico tres argumentos a favor de la prioridad de Marcos (los argumentos del orden, del contenido y de la fatiga editorial) y un argumento en contra (el de los acuerdos alternados).

El argumento del orden2

El argumento basado en el orden de las perícopas de los sinópticos jugó históricamente un rol estelar en el “triunfo” de la prioridad de Marcos. Ese argumento fue la razón principal que llevó a Lachmann a asumir la prioridad de Marcos y fue considerado decisivo por muchos académicos posteriores. Sin embargo, hoy se sabe que el argumento de Lachmann era incorrecto, a tal punto que se lo llama “la falacia de Lachmann”.

El argumento de Lachmann parte de una observación correcta. Considerando todas las perícopas de la tradición triple, se dan en distintos lugares las siguientes tres posibilidades: a) las perícopas siguen el mismo orden en los tres Evangelios sinópticos; b) Mateo y Marcos presentan perícopas en el mismo orden y Lucas sigue otro orden; c) Marcos y Lucas tienen el mismo orden “contra Mateo”. Empero, de hecho nunca se da otra posibilidad teórica: que Mateo y Lucas sigan el mismo orden contra Marcos. A partir de esta observación, Lachmann dedujo que Marcos suministra la base del orden de los otros dos sinópticos y es por ende anterior a ellos. Sin embargo, este razonamiento incurre en un error lógico elemental, conocido como petición de principio o razonamiento circular: se llega a una determinada conclusión sólo porque ésta fue asumida como verdadera desde el principio.

Consideremos dos Evangelios sinópticos A y B y un conjunto de períco-pas comunes a ambos. Hay dos posibilidades: que esas perícopas tengan el mismo orden en A y en B o que tengan órdenes distintos. El primer caso se puede explicar de dos maneras: A copió el orden de B o B copió el orden de A. Y también el segundo caso se puede explicar de dos maneras: A cambió el orden de B o B cambió el orden de A. El orden de las perícopas, sea cual sea, no nos permite deducir si A fue anterior o posterior a B.

Si en vez de dos Evangelios sinópticos consideramos los tres (A, B y C), la situación es exactamente la misma. El orden de las perícopas paralelas en A, B y C, sea cual sea, puede ser explicado en cualquiera de las seis permutaciones posibles de A, B y C. De nuevo, el argumento del orden de las perícopas no sirve para establecer ningún orden de composición de los Evangelios sinópticos.

Naturalmente, ni Lachmann ni los otros defensores de la T2F que aducen el argumento del orden incurren en una petición de principio explícita. Empero, una petición de principio implícita es tan falaz como una explícita. Lachmann consideró la prioridad de Marcos como la única explicación viable del orden en los sinópticos porque sólo consideró esa explicación posible; pero cualquier orden de composición con Marcos como segundo o tercer Evangelio sinóptico habría podido explicar igualmente bien su observación inicial. Muy probablemente, él no consideró esos otros órdenes de composición porque implícitamente había asumido la prioridad de Marcos en el punto de partida. Hoy muchos partidarios de la T2F reconocen que el argumento de Lachmann no permite fundamentar la prioridad de Marcos porque es incorrecto, por lo que el argumento del orden está cayendo en desuso.

Hay muchos motivos por los que un evangelista podría haber ordenado sus materiales de un modo en lugar de otro. En principio no hay razones válidas para suponer que un motivo dado garantiza que un Evangelio es anterior o posterior a los otros. Por ejemplo, el respeto del orden histórico de los hechos narrados no indica necesariamente una prioridad cronológica del Evangelio más apegado a ese tipo de orden.

El argumento de los acuerdos alternados3

Algunos partidarios de la hipótesis clementina han utilizado a su favor una variante del argumento del orden: el argumento de “los acuerdos alternados”. Como vimos, el orden de las perícopas de Marcos coincide con el orden de Mateo o bien con el orden de Lucas. Es como si Marcos zigzagueara entre Mateo y Lucas, siguiendo a uno u otro, y yendo siempre “hacia adelante". Esto es fácil de explicar si se parte de la base de que Marcos es el tercero de los sinópticos. En cambio, si se asume la prioridad de Marcos, Mateo y Lucas parecen alternarse en el seguimiento del orden de Marcos. Cuando uno deja de seguirlo, el otro toma la posta. Esta “coordinación” entre Mateo y Lucas parece sospechosa a algunos, porque, según ellos, contradice una de las premisas de la T2F, la independencia de Mateo y Lucas entre sí. Pero en realidad también esta variante del argumento del orden es una falacia y por la misma razón. En realidad cualquier trío de ordenamientos de perícopas paralelas puede ser explicado igualmente bien por cualquiera de los seis órdenes de composición posibles de los sinópticos.

El argumento de la fatiga editorial4

El notable académico Mark Goodacre, quizás el principal defensor actual de la hipótesis de Farrer, define el fenómeno de la fatiga editorial de la siguiente manera:

“Cuando un escritor está copiando el trabajo de otro, a veces se hacen cambios al principio de un reporte que luego no son sostenidos en todas partes: el escritor cae en la dócil reproducción de su fuente. Este fenómeno de ‘fatiga’ es un signo revelador de la dependencia de un escritor con respecto a una fuente5.”

El argumento de la fatiga editorial ha cobrado cada vez más importancia. Goodacre lo considera el argumento más decisivo a favor de la prioridad de Marcos. Sin embargo, a los efectos de establecer la prioridad cronológica de un texto sobre otro, también el argumento de la fatiga editorial incurre en la falacia del razonamiento circular.

Sean dos textos paralelos A y B. Sabemos que uno de ellos es una copia del otro pero no sabemos si A es una copia de B o B es una copia de A. Supongamos que A usa diez veces la misma palabra x para expresar determi-nada idea, mientras que B procede así: las primeras tres veces usa otra palabra (y) para expresar la misma idea y las restantes siete veces usa la palabra x. Aplicando el argumento de la fatiga editorial razonaríamos así: mientras copiaba a A, el autor de B realizó al principio tres veces un cambio característico (de x por y) pero luego, por cansancio, recayó en la reproduc-ción dócil de su fuente, por lo que las últimas siete veces usó la palabra x, igual que A. Esta forma de razonar es errónea. Hay dos formas distintas y contrarias de explicar que A sea consistente y B sea inconsistente: el autor de B, debido a la “fatiga editorial” puede haber introducido la inconsistencia en B al copiar a A; o bien el autor de A puede haber eliminado la inconsistencia al copiar a B, haciendo que A sea consistente. Por lo tanto el argumento de la fatiga editorial es incorrecto.

Más aún, en realidad es más probable que el autor de A haya eliminado la inconsistencia mientras copiaba a B que que el autor de B haya introducido la inconsistencia al copiar a A. No en vano por lo general la segunda edición de un libro tiene menos errores que la primera edición. Es más probable que un editor corrija un error de la edición anterior que que introduzca en la nueva edición un error nuevo, que no estaba presente en la edición anterior.

En síntesis, es necesario descartar el uso del argumento de la fatiga editorial para establecer la prioridad de Marcos.

El argumento del contenido6

Hoy los partidarios de la T2F tienden a basar la prioridad de Marcos sobre todo en el hecho de que Marcos es más breve y menos elaborado (literaria y teológicamente) que los otros dos Evangelios sinópticos. Marcos narra menos hechos y muchos menos discursos que Mateo y que Lucas. Hay pocas tradiciones simples de Marcos, muchas tradiciones simples de Mateo y de Lucas y muchas tradiciones dobles Mateo-Lucas.

Según los partidarios de la prioridad de Marcos, todo esto sería poco verosímil si Marcos fuera posterior a Mateo o a Lucas. Ellos afirman que es mucho más probable que Mateo y Lucas hayan desarrollado el contenido de Marcos que la alternativa: que Marcos haya abreviado a Mateo y Lucas, o sólo a Mateo. En otras palabras, no encuentran ninguna razón de ser del Evangelio de Marcos si éste no fue el primero. Marcos es en varios sentidos un Evangelio “incompleto". Por eso, supuesta la prioridad de Marcos, se comprende fácilmente una posible razón de ser de Mateo: completar a Marcos. G. M. Styler resumió ese argumento así:

“Dado Marcos, es fácil ver por qué Mateo fue escrito; dado Mateo, es difícil ver por qué Marcos era necesario7.”

Empero, a esto se puede objetar al menos dos cosas.

A)   La prioridad de Marcos suele dejar sin respuesta satisfactoria otra cuestión capital: ¿por qué Marcos habría compuesto un Evangelio “incom-pleto", para empezar? La antigua tradición cristiana proporciona una razón muy fuerte por la que el Evangelio de Marcos fue escrito y reconocido como canónico: en esencia, es el Evangelio de Pedro. Esta razón de ser es independiente de que Marcos haya sido el primer, el segundo o el tercer Evangelio sinóptico. Además, Orchard ofrece una explicación plausible de la mayor brevedad de Marcos: este Evangelio sería la transcripción de una serie de charlas de Pedro que combinan los Evangelios de Mateo y Lucas para validar a este último.

B)   Desde el punto de vista lógico, es evidente que el hecho de que un Evangelio sinóptico tenga un contenido cuantitativamente menor que los otros dos no prueba nada con respecto al orden de composición de los sinópticos. Un evangelio posterior puede tanto desarrollar como resumir el contenido de un evangelio anterior.

Se han planteado muchas razones distintas que pueden justificar la teoría de que Marcos resume a Mateo en vez de la teoría de que Mateo desarrolla a Marcos. Una hipótesis razonable es que Marcos escribió un Evangelio para los gentiles y por lo tanto suprimió muchos materiales “muy judíos” de Mateo (y de Lucas, en la hipótesis de Griesbach), que eran más difíciles de comprender y menos relevantes para los lectores no judíos. Por ejemplo, Marcos podría haber suprimido Mateo 1-2 (el “Evangelio de la infancia”) porque consideró que para sus lectores tenía menos interés la genealogía de Jesús y su parentesco con el rey David. Y podría haber suprimido la mayor parte de los cinco grandes discursos de Jesús contenidos en Mateo para concentrar su Evangelio en una narración dramática.

El argumento del carácter testimonial

En muchas perícopas de tradición triple o de tradición doble Mateo-Marcos o Marcos-Lucas, Marcos proporciona detalles precisos y concretos (a veces pintorescos) que parecen provenir de un testigo directo. La desaparición de esos detalles en Mateo y Lucas podría ser el resultado de su mayor concentración en el contenido teológico; pero también esto se podría explicar al revés: Marcos habría añadido recuerdos de Pedro a los relatos más despojados de Mateo o de Lucas.

El argumento basado en la gramática y los arameísmos

El texto griego de Marcos presenta frecuentes incorrecciones gramatica-les, coloquialismos y redundancias, y conserva en ocho ocasiones palabras arameas originales usadas por Jesús. En cambio, los textos en griego de Mateo y Lucas son mucho más correctos desde el punto de vista gramatical; además, Lucas no conserva ninguno de los arameísmos de Marcos y Mateo conserva sólo uno (o dos, si se cuenta un cambio del arameo por el hebreo). Los partidarios de la prioridad de Marcos aducen que es mucho más probable que los evangelistas posteriores corrigieran errores gramaticales y eliminaran las palabras arameas, en vez de introducirlos en sus fuentes. Empero, ésa no es la única explicación posible y quizás tampoco sea la mejor.

Marcos no es una obra literaria pobre, sino una obra con estilo oral. No utiliza la lengua griega culta, sino la lengua griega vulgar. Las incorrecciones gramaticales y los arameísmos, difíciles de explicar en una obra literaria normal, se explican si, siguiendo a Orchard (un defensor de la hipótesis clementina), se considera a Marcos como la transcripción textual de una serie de charlas. Esto es consistente con el hecho de que varias fuentes cristianas muy antiguas atestiguan que el Evangelio de Marcos es la puesta por escrito de la predicación de Pedro.

El argumento basado en las lecturas más difíciles

Marcos presenta varias frases que parecen más difíciles de entender o de aceptar que las frases paralelas de Mateo o Lucas. Por ejemplo, en la visita de Jesús a Nazaret, donde Mateo dice “Y no hizo allí muchos milagros8“, Marcos dice: “Y no podía hacer allí ningún milagro9“. Los partidarios de la prioridad de Marcos sostienen que es mucho más probable que los evangelistas posteriores resolvieran dificultades de interpretación, en vez de introducirlas. Sin embargo, la interpretación de esos pasajes como lecturas más difíciles es discutible.

Considerando el contexto inmediato, vemos que también Marcos dice que Jesús hizo milagros en Nazaret, aunque los presenta como excepciones. Tal vez Marcos quiso evitar que se interpretara el hecho de que Jesús hizo pocos milagros en Nazaret como un castigo por la poca fe de los nazarenos (una lectura posible del texto de Mateo). Además, en otras ocasiones es Marcos el que aclara expresiones más oscuras de Mateo o de Lucas10. Las aclaraciones de Marcos pueden atribuirse a los recuerdos personales de Pedro y sus lecturas “más difíciles” a su predicación oral, más improvisada.

El argumento basado en la redacción

Marcos omite algunas frases de Mateo que son consideradas “redaccionales”, es decir que provendrían del propio redactor del Evangelio. Supuestamente eso probaría que Marcos es anterior a Mateo. Por ejemplo, algunos atribuyen este versículo al redactor de Mateo: “Se proclamará esta Buena Nueva del Reino en el mundo entero, para dar testimonio a todas las naciones. Y entonces vendrá el fin11.” Pero en realidad quien habla aquí es Jesús, no el redactor.

El argumento basado en la teología

Suele afirmarse que Marcos es el primer Evangelio porque su teología (cristología, eclesiología, etc.) es la más primitiva. Por ejemplo, en Marcos Jesús es llamado Señor pocas veces, mientras que Mateo y Lucas aplican ese título a Jesús con mucha mayor frecuencia. Pero no hay por qué considerar esto como un signo de una teología más primitiva. Marcos expone esencialmente la misma teología que Mateo y Lucas por medios diferentes y con acentuaciones diferentes. Por ejemplo, en Marcos juega un rol capital el título Hijo de Dios12.

Conclusión

Comparto la conclusión de Kearlan Lawrence13:

a) La evidencia patrística favorece de un modo unánime y abrumador la prioridad de Mateo.

b) Los argumentos del orden, de los acuerdos alternados, del contenido y de la fatiga editorial no prueban nada acerca de la prioridad de Mateo o de Marcos.

c) Los demás argumentos de crítica literaria son reversibles o no concluyentes.

d) Por lo tanto, dada la evidencia disponible, la prioridad de Mateo sigue siendo la mejor hipótesis.

Como dice el mismo autor, el actual consenso a favor de la prioridad de Marcos se basa en la falacia de la autoridad. Yo explicaría ese fenómeno en dos etapas: 1) La gran mayoría de los biblistas actuales razona así: la prioridad de Marcos debe de ser verdad, dado que fue sostenida por académicos tan eminentes como Lachmann, Holtzmann, Streeter, etc. 2) Gran parte del público actual, compuesto sobre todo por legos en las ciencias bíblicas, razona así: la prioridad de Marcos debe de ser verdad, dado que es sostenida por la gran mayoría de los biblistas actuales. Ambos grupos incurren en el mismo error lógico y están tan convencidos de que la prioridad de Marcos es verdad que ya no examinan sus fundamentos y no consideran otras posibilidades.

Por mi parte, añado que la gran debilidad de los fundamentos de la teoría de la prioridad de Marcos aún no ha sido reconocida de forma generalizada pero comienza a hacerse sentir. Aunque la gran mayoría de los exégetas sigue sosteniendo la prioridad de Marcos y la teoría de las dos fuentes, no pocos están dejando atrás la certeza “dogmática” (en el mal sentido) al respecto y están abriéndose a considerar otras alternativas.

1) https://www.earlychristianwritings.com/mark-prior.html.

2) Cf. Kearlan Lawrence, Synoptic Problem: Markan Priority Defies Logic (Part 7/13), The Original Case for Markan Priority, en:

https://medium.com/@kearlanventures/the-original-case-for-markan-priority-c3a1260e4daf

3) Cf. Kearlan Lawrence, Synoptic Problem: Markan Priority Defies Logic (Part 12/13), The Fallacy of Alternating Agreements, en:

https://medium.com/the-illogic-of-markan-priority/the-fallacy-of-alternating-agreements-c14a47730b75

4) Cf. Kearlan Lawrence, Synoptic Problem: Markan Priority Defies Logic (Part 9/13), The Circularity of “Editorial Fatigue”, en:

https://medium.com/@kearlanventures/the-circularity-of-editorial-fatigue-ee8c65d4368e

5) Mark Goodacre, Ten Reasons to Question Q, en:

http://www.markgoodacre.org/Q/ten.htm

6) Cf. Kearlan Lawrence, Synoptic Problem: Markan Priority Defies Logic (Part 10/13), Analizyng Mark’s Redaction Profile, en:

https://medium.com/@kearlanventures/analyzing-marks-redaction-profile-804acfaf1b6b

7) Arthur J. Bellinzoni, Jr.(editor), The Two-Source Hypothesis: A Critical Appraisal, Mercer University Press, Macon, GA, 1985, p. 73 (mi traducción).

8) Mateo 13,58.

9) Marcos 6,5.

10) Dos ejemplos: “Al no poder presentárselo a causa de la multitud, abrieron el techo encima de donde él estaba y, a través de la abertura que hicieron, descolgaron la camilla donde yacía el paralítico” (Marcos 2,4). “Cada fiesta les concedía la libertad de un preso, el que pidieran” (Marcos 15,6).

11) Mateo 24,14.

12) Este título aparece al principio del Evangelio de Marcos (1,1), en el bautismo de Jesús (1,11), en la Transfiguración (9,7) e inmediatamente después de la muerte de Jesús  (15,39).

13) Cf. Kearlan Lawrence, Synoptic Problem: Markan Priority Defies Logic (Part 13/13), Putting It All Together, en:

https://medium.com/@kearlanventures/putting-it-all-together-b471aa1f5576


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5 comentarios

  
Pampeano
No es un tema menor, por cierto, por algunas consecuencias que pueden extraerse, incluso de mala fe, de la prioridad de Marcos. Pero parece que a nadie, o muy pocos, le preocupa el asunto. Está haciendo Ud. un buen trabajo aunque seamos pocos quizás los que lo leamos.
15/08/24 3:01 PM
  
FJL
La prioridad marcana es aceptada por la práctica totalidad de los estudiosos de los Evangelios.

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DIG: La gran mayoría sí. La práctica totalidad no.

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Los argumentos son muchos, sirva uno solo.

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DIG: Los argumentos son muchos y ninguno es concluyente y muchos son falsos o incorrectos.

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En Marcos 10, 35 y siguientes los hijos del Zebedeo, Santiago y Juan son los que solicitan a Jesús sentarse a su lado en el más allá. Sin embargo en Mateo 20,20 es su madre la que hace la petición. Es evidente que ante una lectura difícil, que deja en mal lugar a los dos apóstoles, Mateo intenta dulcificar el evento, al fin y a la postre para todas las mamás sus hijos son los más guapos. Pueden ponerse muchos más ejemplos pero son largos de explicar.

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DIG: Es una posibilidad pero no es la única. Y meras conjeturas como esa no bastan para descartar el testimonio unánime de la literatura cristiana antigua sobre la prioridad de Mateo.

15/08/24 11:04 PM
  
Un agradecido
Gracias por continuar ampliando los argumentos del artículo anterior. Felicitaciones. Por otra parte, tomando en cuenta que el mismo evangelista San Lucas aclara desde el inicio a "Teófilo" que decidió escribirle las cosas y ponerlas en su orden, ¿no facilita esta declaración reducir la controversia de primerizo a sólo Mateo y Marcos? Saludos y gracias.

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DIG: Traté ese tema hace pocos días en un post llamado "El Prólogo de Lucas".
15/08/24 11:22 PM
  
Josep
Parece ser que Marcos utilizó materiales propios y la fuente Q, y de ahí salió el que se considera el primer evangelio puesto por escrito alrededor del año 60, el de San Marcos.

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DIG: La hipótesis de las dos fuentes dice que Mateo y Lucas (cada uno de los dos por separado) dependen de dos fuentes independientes: Marcos y Q. Q explicaría la tradición doble Mateo-Lucas. Según esta hipótesis Marcos no conoció ni utilizó la fuente Q.
16/08/24 10:33 PM
  
Pdb
Gracias por estos artículos

Yo me quedo al final con el argumento católico por antonomasia: la Tradición tiene la respuesta. Lo.que fue creído por los Santos Padres es la verdad histórica puesto que ellos recibieron primero el mensaje

No tiene base racional aceptar cualquier otra hipótesis, esto es, que un receptor más tardío y con menos información, pueda acertar estando más lejos de la fuente original
17/08/24 9:06 AM

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