Fátima: ¿Fue realizada la consagración de Rusia? Estado de la cuestión (1-4)
Comenzamos a publicar aquí, en cuatro entradas, el excelente artículo de los profesores Buisel y Sequeiros acerca de la consagración de Rusia a la Inmaculada Virgen María, como Nuestra Señora misma pidió en Fátima, en 1917.
El mismo nos fue remitido por sus autores para ser publicado en nuestros espacios, con el fin de salir al cruce de quienes aún se empecinan en decir que “la consagración de Rusia ya fue hecha".
En el ámbito de las lenguas hispanas, al menos nosotros no conocemos peritos más preparados que ellos que, a su vez, con madre e hijo, este último, sacerdote.
En la última entrada brindaremos el artículo completo para,
Que no te la cuenten…
P. Javier Olivera Ravasi, SE
Fátima: ¿Fue realizada la consagración de Rusia? Estado de la cuestión
Prof. María Delia Buisel - Pbro. Dr. Víctor Agustín Sequeiros
De Fatima numquam satis
Sobre Fátima[1], aun no está todo dicho. Por grande que sea el esfuerzo de ciertos clérigos por enterrar las apariciones de Fátima y de darlas apresuradamente por muertas y sepultadas en el pasado[2], parece que el Cielo, por el contrario, se complace en mantenerlas más vivas que nunca, como en el caso de los impactantes hallazgos documentales de la destacada historiadora Cristina Siccardi, que remontan la “prehistoria” de Fátima al nacimiento de Portugal y en particular a sor Filipina de’ Storgi, monja de la familia real de Saboya, quien en 1454 recibió en su agonía la visita de la Santísima Virgen anunciándole “acontecimientos futuros muy graves por los que Satanás hará una terrible guerra, pero perderá porque la Virgen Santísima Madre de Dios e del Santísimo Rosario de Fátima ‘más fuerte que cualquier ejército formado en batalla’, lo vencerá para siempre”[3]. Por supuesto que en 1917 ni los pastorcitos, ni nadie en Portugal, podían tener atisbo alguno de semejante revelación, pero la Providencia dispone los tiempos en que se deben conocer las cosas[4].
No es de extrañar que el Papa Benedicto XVI haya declarado en el Santuario el 13 de mayo de 2010 que “se equivoca quien piensa que la misión profética de Fátima está acabada”[5].
Dejando de lado por el momento la polémica acerca de la autenticidad y completitud de la tercera parte del Secreto, de la que hay profusa y divergente bibliografía[6] y en la cual se vio envuelto, al menos indirectamente, el mismo Benedicto[7], procuraremos en el presente artículo ofrecer un fundamentado status quaestionis sobre otro de los puntos candentes referidos a Fátima: el requerimiento celestial de la Consagración de Rusia y la respuesta pontificia a tal demanda.
Revelación privada de carácter religioso-político
Ante todo, es necesario destacar que el pedido se encuadra en una revelación privada que