Coronavirus: exceptúan a sacerdotes del aislamiento preventivo. Una oportunidad
En el día de ayer, 20 de Marzo de 2020, se publicó la siguiente ampliación del decreto 297/2020 que regula la “Cuarentena” preventiva para toda la Argentina.
Decreto 297/2020
AISLAMIENTO SOCIAL, PREVENTIVO Y OBLIGATORIO
Decisión Administrativa 429/2020
Incorporación de actividades y servicios exceptuados
ARTÍCULO 2º.- Se permitirá la circulación de los ministros de los diferentes cultos a los efectos de brindar asistencia espiritual, debiendo los templos ajustarse en su funcionamiento a lo estipulado en el primer párrafo del artículo 5° del Decreto N° 297/20 (“durante la vigencia del ‘aislamiento social, preventivo y obligatorio’ no podrán realizarse eventos culturales, recreativos, deportivos, religiosos, ni de ninguna otra índole que impliquen la concurrencia de personas”).
Entonces, hay una gran oportunidad.
Tiempo atrás, conversando con un párroco amigo en Roma, me decía que, aunque en Italia existía un catolicismo cultural, en muchos lugares había también un gran anti-clericalismo a causa de tantos siglos y de tantas cosas vistas allí…
Porque la Iglesia es Santa principalmente por su fundador, no necesariamente por sus miembros.
Pero este anticlericalismo “a la italiana” (al estilo de Peppone, claro) tenía una excepción.
- “I frati francescani” –me dijo.
- “¿Los frailes franciscanos?” –le pregunté.
- “Sí –me respondió mientras comíamos la típica pizza– por la Peste Negra” –agregó.
Y me explicó.
Parece que durante ese famoso castigo que asoló Europa entre 1347 y 1353, los franciscanos fueron, entre todos los religiosos de Italia, los que más cerca estuvieron de los fieles.
Y eso nunca se olvidó allí.
Pues bien, salvando las distancias, el coronavirus ha traído muchos males corporales, pero podría ser también fuente de muchos bienes espirituales para todos: desde tener que aprender a pasar el tiempo en la familia a cultivar la paciencia; desde contemplar la levedad de la vida, a valorar los sacramentos cuando no se los tiene…
Y para nosotros los curas también.
Tanta crítica hemos recibido en los últimos años por ser sacerdotes católicos (crítica muchas veces merecida) que hoy los curas tenemos la oportunidad de revertir la cosa, predicando, consolando y asistiendo espiritualmente a nuestro prójimo, no sólo desde las redes sociales, sino cara a cara, frente a frente, cara al Sol, visitando a los enfermos en sus casas, consolando al que está triste e impartiendo los sacramentos allí donde se pueda, vestidos de sacerdotes.
Porque Dios escribe derecho aún en renglones torcidos.
Que no te la cuenten…
P. Javier Olivera Ravasi, SE
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15 comentarios
La Fraternidad de San Pío X, fundada por S.E.R. Monseñor Marcel Lefebvre, mantiene sus misas públicas en Madrid, al amparo del mismo Decreto de Alarma, que en su artículo 11 dice lo siguiente:
Artículo 11. Medidas de contención en relación con los lugares de culto y con las ceremonias civiles y religiosas.
La asistencia a los lugares de culto y a las ceremonias civiles y religiosas, incluidas las fúnebres, se condicionan a la adopción de medidas organizativas consistentes en evitar aglomeraciones de personas, en función de las dimensiones y características de los lugares, de tal manera que se garantice a los asistentes la posibilidad de respetar la distancia entre ellos de, al menos, un metro.
Los católicos estamos, primero, bajo la Nueva Ley, y después bajo la ley.
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Ya lo sé yo muy bien a eso. Gracias igual por recordarlo.
Aquí en Argentina no fue igual el Decreto de Alarma (no se dejaba salir a casi nadie), así que debíamos desobedecer las normas positivas para obedecer las divinas, ante una urgencia.
Ahora no hará. Dios lo guarde. PJOR
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Estimada Ana: quizás ud. aún no ha visto las noticias.
Le dejo los links del Boletín Oficial de la Nación de la ampliación del día de ayer, 20 de Marzo de 2020: https://www.boletinoficial.gob.ar/
AISLAMIENTO SOCIAL, PREVENTIVO Y OBLIGATORIO
Decisión Administrativa 429/2020
DECAD-2020-429-APN-JGM - Incorporación de actividades y servicios exceptuados.
http://s3.arsat.com.ar/cdn-bo-001/2020032001NS.pdf
Artículo 2: "ARTÍCULO 2º.- Se permitirá la circulación de los ministros de los diferentes cultos a los efectos de brindar asistencia espiritual, debiendo los templos ajustarse en su funcionamiento a lo estipulado en el primer párrafo del artículo 5° del Decreto N° 297/20."
Dios la bendiga
Padre Javier
Pero bueno, es lo que hay. Estamos en todo el mundo en "emergencia religiosa" por nuestra absoluta fragilidad y la pertinacia en negar a Dios.
Es fascinante ver que la "Administración de tu País" (que debe estar integrada por una mayoría de bautizados) admita que los Sacerdotes pueden circular para brindar ayuda espiritual, hay que felicitarlos ya que les han reconocido una capacidad que algunos disimulan muy bien.
Pongan al país en oración, de los laberintos únicamente se sale por arriba, no creamos que por una cuarentena o un discurso y menos por una ley o resolución cortesana van a desaparecer los virus.
Si Dios no guarda la ciudad en vano son los decretos y las resoluciones...(que no te le cuenten....).
Fue San Pablo quien dijo: " para los que aman a Dios ; todas las cosas les ayudan y colaboran para el bien ".
El "dios de la politica " y sus secuaces ; siempre logran sacar lo peor del ser humano ; al hombre animal: los celos, la ira, el odio, el enfrentamiento. Y un largo etcétera.
El " maldito Coronavirus " los ha dejado descolocado a todos ; mientras que toda la sociedad incluidos los políticos ; han aparcado el hombre animal, que tanto les gusta sacar a pasear, para de repente sacar de nosotros al hombre espiritual que todos llevamos dentro.
Sin duda padre Javier ; todos hemos de esforzarnos por hacer todo lo que podamos por servir a Dios ; " cada ciudadano somos un soldado " ; nos dice el Jefe del Estado Mayor de la Defensa español. Yo diría qué un soldado al servicio del bien común ; es decir : un soldado de Cristo.
Muchas gracias padre Javier ; por hacernos sacar lo mejor de cada uno de los que leemos sus enseñanzas. Qué. Dios lo siga bendiciendo.
Si se interpreta de modo literal nadie podría asistir personalmente ni a una misa ni a cualquier acto (¿"evento"?) religioso, de cualquier culto. Y al parecer esto es lo mismo que ha dispuesto el Arzobispado católico romano de la ciudad de Buenos Aires (y creo que no es el único, ver sitio web de aica]
Esto es una medida totalitaria, injustificada e inadmisible por lo extrema, aunque se invoque la pandemia.
En España no se llegó tan lejos, Sanchez y su alianza socialista-podemita sólo requirieron para los servicios religiosos, las condiciones en uso para evitar aglomeraciones y eventuales contagios [consultar-el-real-decreto-por-el-que-se-declara-el-estado-de-alarma-en-espana.y su art. 11). Eso es algo lógico.
Me alegro de la decisión administrativa en Argentina que ahora permitirá la asistencia espiritual de ministros, pero veo que ratifica, sin aclaración alguna, lo de los templos.
Estoy aprovechando el encierro para leer la "Suma contra gentiles" de Santo Tomás y he llegado a este párrafo:
"Pero si no hubiese ningún mal en las cosas también se disminuiría mucho el bien el hombre, tanto como al conocimiento como al deseo del bien; porque conocemos el bien en comparación con el mal, y más deseamos el bien en comparación con los males que sufrimos; como los enfermos reconocen cuán buena es la salud y más la desean que los sanos. Luego no es propio de la divina providencia excluir totalmente los males de las cosas" (Libro III, Cap. LXXI, 7)
Saludos y ánimo.
- La Misa pública no está prohibida por la Autoridad civil, al menos en R. España en el citado artículo 11 del Decreto de estado de alarma. La prohibición existente es solo la del obispo en su Diócesis: ése es el problema. Ya que se puede celebrar Misa pública cumpliendo normas sanitarias con Hostia de mayor diámetro, si es este el miedo del contacto de la lengua del feligrés a la mano del sacerdote, de ser esto cierto. Cristo no pone condiciones a la hora de ir a la Cruz, más bien dice: "apártate satanás, pues tus pensamientos son los de los hombres, no los de Dios." El martirio es dar testimonio de que Nuestro Señor Jesucristo está realmente presente con su Cuerpo, Sangre, Alma y Divinidad, y el católico es la única forma que tiene de elevar, el Cielo en la tierra, la verdad, el bien y la belleza, también para el coronavirus, a la Voluntad del Padre y Dios nuestro mediante, justificado y santificado por el Espíritu Santo en la Verdad, el Bien y la Belleza que es Dios.
- Si el Bien Común no es de este mundo, ¿qué autoridad civil tiene potestad para gobernarlo?
- Y si la fracción del Pan del Cielo la recibimos los católicos, la Iglesia, de las Manos de Nuestro Señor Jesucristo, ¿qué poder tiene un obispo para poner la Eucaristía privada? Ninguno, porque la Palabra de Dios de no separar al Esposo de su Esposa es clara y es la única forma de recibir la vida de la gracia para ser Cristo cada uno de nosotros como católicos, hermanados en la Caridad que es la Eucaristía.
- Como católico cuya fe obra en la caridad en Cristo:
1. Desobedecer a la Autoridad civil, por lo general no. Pero, depende de los anticristos, que es darle también a Dios lo que es de Dios.
2. Desobeder al obispo de mi Diócesis, nunca, porque es el máximo responsable de su rebaño, y sólo a Él, vigía de la torre más alta, el Señor le rendirá cuentas por no avisar del peligro del león rugiente. Lo único que podemos hacer como ovejas es mostrarle su falta, no imponerle su obrar.
- Nuestro Señor Jesucristo es Cristo Rey, Señor de cada vida y muerte, y Dueño de nuestra historia, sin Él no podemos hacer nada. Si podemos orar, confiar y esperar todo en Él. Y Él es la Eucaristía.
Saludos.
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Estimado Padre: no todos los municipios son iguales. De todos modos, "Si Mahoma no va a la montaña, la montaña viene a Mahoma". Con el "salvoconducto" que el gobierno de Argentina ha dado a los nosotros, los curas, podemos movernos con bastante libertad para ir a ver a los fieles a las casas y asistirlos espiritualmente en estos momentos tan difíciles. Bendiciones mutuas. Padre Javier
Por su bien y el de sus feligreses, quedense en casa, atiendan el teléfono, haban videollamadas... si no queda más remedio que acudir a una casa háganlo con todas las medidas protectoras necesarias e inmediatamente después marchen a casa a desinfectar ropas, cuerpo, etc. No sería la primera vez que, por querer hacer el bien, nos convertimos en auténticos portadores de la muerte.
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