¿Sin misas en tiempo de coronavirus?

OK. Buenos consejos.

Y bueno, los frutos del pecado son evidentes y así al poder ver está situación tan claramente es que le doy gracias con dolor al Señor. Así que el domingo conmemorare con mí familia la cena del Señor, y haremos penitencia por tantos pecados derramados. Estoy avergonzado y dolido por la actuación de una parte del Clero tan 3videntemente rendida al mundo. Señor ten piedad de nosotros.

Hola.
Ayer desde hace mucho tiempo asistí a la Misa (la genuina) gracias a Una Voce Sevilla. Impresionado por el silencio, impresionado por la invitación a orar de esta forma de misa verdadera.

Por eso le invito a transmitir su Misa diaria en youtube. Transmítala que hará mucho bien.
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Voy a ver si puedo. Gracias. Dios lo guarde. PJOR

Padre usted si habla claro, se somete y sirve de verdad a la Iglesia. Mi opinión sobre la jerarquía de la Iglesia es de puro desánimo.

Dios le bendiga.

"Haced esto en conmemoración mía." ¿Dónde está la excepción del Señor Jesús ante la Cruz por nuestros pecados?

Pedid por todos nosotros San José, custodio de la Sagrada Familia, en buena lid por nuestra verdadera fe frente al nuevo coronavirus y por los más indefensos, niños, pobres, enfermos, desvalidos para el mundo, encarcelados, pecadores y ancianos.

Padre sacerdote, el razonamiento que hace para explicar al pueblo las materias de unión con Dios sin Eucaristía, o de Comunión en la boca o en la mano, debe plantearla como San Francisco de Asís abrazando al leproso y dándole su manto. ¿Qué temor hay a la muerte en estado de Gracia? ¡Bendita muerte, hermana muerte! Ningún obispo tiene poder para "suspender o cancelar" la Eucaristía comunitaria, ninguno, porque no abraza con amor el Cáliz de Getsemaní ni la Cruz de Cristo por la salvación de las almas. ¿De verdad cree lo que le ha dicho al pueblo de Dios? ¿Ha dejado de creer en la Promesa de la vida eterna? Los profesionales sanitarios, los fontaneros, los electricistas, los informáticos, etc. continuan trabajando con el público, ¿por qué el sacerdote no con las lógicas normas sanitarias? El feligrés las va a cumplir. No es momento de enfrentamiento entre católicos, sí de coherencia apostólica. En los tiempos de persecución, en otras pandemias mucho peores o en la guerra contra los protestantes: todos los católicos velaban, celebraban y eran oblación en la Eucaristía por nosotros, a pesar de que si los descubrían haciéndolo o infectados tenían pena de muerte del cuerpo. Pero, alcanzaban la salvación del alma.

+100 millones de niños inocentes abortados cada AÑO en el mundo.

1. No veléis la Eucaristía dormidos nos manda el Señor Jesús tres veces.
2. No rebelarse al obispo, máximo responsable, pero si hacérselo saber porque Nuestro Señor Jesucristo le va a pedir cuentas por desobedecer su mandato de salvación de las almas evangelizando y bautizando con o sin virus.
3. No tengamos miedo por dar la Comunión y/o comulgar, pues Jesucristo está con nosotros, tengamos más cuidado con el león rugiente por no ir a la Santa Misa o ir por obligación. Vayamos porque necesitamos de verdad comer el Pan del cielo.

Más que nunca en este tiempo deberían estar los templos abiertos, por más decisión en contrario de cualquier Leviatán. ¿No tenemos acaso todos nuestros cabellos contados? ¿No es que ni siquiera un pajarito cae a tierra sin que medie la voluntad de Dios? Todos, tarde o temprano habremos de morir, y si ahora pareciera que se cae el mundo, razón mayor para confesarnos, comulgar y estar en gracia con Dios por si Él nos llama a su presencia. Pareciera que ahora la enseñanza es "De que le vale al hombre salvar su alma eterna, si con ello pierde su cuerpo temporal".

Quiero suponer que aunque los templos estén cerrados, los sacerdotes igual concurren y celebran la Eucaristía aunque sea en soledad, que siguen conmemorando al Señor como Él ordenó a sus apóstoles.

Por lo demás, el artículo que escribió Monseñor Athanasius Scheneider en One Peter Five no tiene desperdicio:

onepeterfive.com/we-glory-in-tribulations-living-the-faith-when-public-worship-is-prohibited/

Monseñor Schneider sí que hace honor a su nombre.

La Pasión de Cristo, la novísima salvación o sacramento telemático y el secreto de confesión.

Canonista italiano explica si en este tiempo es válida la confesión telefónica.

Giorgio Giovanelli, profesor de derecho canónico en la Universidad Pontificia Lateralense: "Es posible pero con el permiso del Papa."

La fe de mi madre creo que es más verdadera que la de la Universidad Pontificia.

¿Hallará fe Nuestro Señor Jesucristo cuando regrese?

Los hay más ingeniosos inspirados por el Espíritu Santo.

Auto-confesionario: la creatividad de un sacerdote ante la epidemia.

Uno de esos ejemplos que pone Dios es el del párroco Scott Holmer, de San Eduardo Confesor, una iglesia perteneciente a la arquidiócesis de Washington. Este sacerdote ha ideado un curioso sistema para que los fieles puedan seguir acudiendo al sacramento de la Confesión.

Algunos obispos (con sus respectivos presbiterios), que no tienen, ni quieren tener, olor a oveja, han cerrado los templos, por miedo a que los fieles los contagien a ellos. Además de cobardes y faltos de fe, son mentirosos, pues afirman que toman dichas medidas para proteger a los fieles del posible contagio que se daría en las aglomeraciones.

Efectivamente Padre, hay que tener prudencia, pero hay templos suficientemente amplios que, en los dias de semana,.hay pocos fieles en misa, con lo cual, estaría garantizada la distancia mínima de seguridad, otra cosa sería en las :misas dominicales que siempre hay más afluencia. En la misma comunidad de Madrid, unos han.optado por cerrar las iglesias como en Getafe y en Alcalá de Henares, el.obispo sigue celebrando misa y supongo que así pasará en otras diócesis . Como donde vivo, también los templos están cerrados, procuro seguir la santa misa por la televisión, rezar las vísperas y también el rosario. Pedimos al Señor que toda esta pandemia acabe; lo peor son los fallecidos y los que seguirán muriendo. Necesitamos orar mucho.
Dios lo guarde.

Yo soy setentón. La obediencia es una fuente de gracias. Es más, la obediencia es uno de los pilares fundamentales y esenciales de la vida religiosa.

Mis Obispos me dijeron Guardese en su casa y no venga a la Iglesia . Esa obediencia es obediencia al Espíritu Santo y a la Trinidad. Es imposible que no produzca frutos.

Vladimir: No es por ellos. Es para que no se contagien los fieles.

Muchas gracias, padre. Parece que a algunos les cuesta entender que es una medida prudencial y no se suspende el Sacrificio Eucarístico.
Solo una cosa: esto del coronavirus no es baladí. En Italia están saturados y aquí en España vamos en esa dirección, si no estamos ya ahí. Otro sacerdote que tiene un blog aquí en Infocatólica, el padre Francisco José Delgado, lleva más de una semana enfermo con síntomas del coronavirus pero puso en Twitter que le habían dicho que no le iban a hacer la prueba. Los números de infectados que dan no son reales.
Me gustaba más con el himno al principio ;)

"No es por ellos. Es para que no se contagien los fieles"
A quienes así piensan, los respeto, pero no soy tonto ni simplón.
Nos han tirado puerta afuera y ahora celebran la Eucaristía a puertas cerradas; como quien dice, se apacientan a sí mismos.

Vladimir: Ni ser un borrego ni estar paranoico. La virtud, en el medio. Si mirara un poquito por Twitter, por ejemplo, vería que la medida la defienden también curas que ni son unos herejes, ni son tontos. Y la décima regla para sentir con la Iglesia de San Ignacio de Loyola, que es demasiado larga de copiar mas seguro que la puede usted encontrar fácilmente en Internet. Por otra parte, a mí tampoco me hace ninguna gracia quedarme sin los sacramentos, pero me preocupa más la dificultad para confesarme que para recibir al Señor. Antaño no se comulgaba con tanta frecuencia como hogaño. Le pongo un ejemplo. Cuando San Francisco de Borja era virrey de Cataluña (y su esposa aún vivía), algunos le criticaban por confesarse y comulgar una vez a la semana, porque decían que tal cosa era soberbia en un seglar.

Gracias por su relfexion.
Pero con el mayor de los respetos, me permito hacerle una observacion. No me angustia, siquiera me preocupa, que mi obispo me "dispense" de una obligacion; yo solo quiero encontrrame con mi Señor en la mesa de la eucaristia. Lo deso, de corazon; por mas que sea, como Ud. dijo "UN SIMPLE FIEL".-
Por otro lado el paralelismo con la situacion de los cristeros no me conforta ni consuela: a ellos se lo prohibieron los enemigos, a nosotros nuestros pastores.
Entiendo y acepto toda medida higienica y prudente; pero que no me den NINGUNA posibilidad de encontrarne con el Señor...
Ademas hay un dato no menor, que Ud. omite en su análisis: la forma en que se comunica, el tono de las cartas de los obispos es desoladora...¿donde el llamado a conversion?¿donde el ardor evangelico de anunciar a Cristo como único salvador?...brilla en general por su ausencia...Esto no es menor: si con lagrimas en los ojos, si con sincero dolor en el alma, si haciendo una llamada profunda a la conversion concreta me dicen que no puedo; pues que va a ser...Pero leer el protocolo medico de un funcionario edulcorado con 2 o 3 citas evangelicas, pues es eso. Estamo scomo ovejas sin pastor. Maranatha!

Poco antes de conocerse el decreto presidencial que dispuso la cuarentena general obligatoria, algunos intendentes del Gran Buenos Aires -no sé si todos- habían prohibido las Misas en nombre de un bien superior, decisión que fue acogida con beneplácito por los Obispos que enseguida adhirieron a la medida. Lo que no queda claro, fue por qué esos intendentes decidieron al mismo tiempo que sigan abiertos restaurantes y bares.¿No habrá sido porque mantener esos comercios abiertos aseguraba los salarios de proveedores y trabajadores que así podían conservar sus puestos de trabajo y empresarios que al seguir pagando sus impuestos aseguraban los ingresos fiscales del Estado? Porque todo indica que para los políticos es mucho más importante la salud del ciclo económico que la salud espiritual del pueblo que confió en ellos con su voto. Pero si eso llama la atención, mucho más sorprende la actitud de los obispos de esta Iglesia "en salida" y del famoso "hospital de campaña" que iba a llegar hasta las periferias en busca de los heridos que tiene que salvar. Y todo eso sin hablar del "piloto de la ambulancia" que tanto habló de salir a recoger esos heridos. Ahora que las papas queman, vemos que todo aquello no era otra cosa que fuegos artificiales y balas de fogueo. Como bien decía aquella película taquillera: ¿dónde está el piloto...?

Ian;

Yo soy setentón. La obediencia es una fuente de gracias. Es más, la obediencia es uno de los pilares fundamentales y esenciales de la vida religiosa.

Pues no sea que la obediencia te conduzca adonde no quieres terminar:

si un ciego guía a otro ciego, ambos caerán en el hoyo
—Mateo 15:14

La única obediencia ciega es a Dios y nada más que Dios. Si por obediencia sigues a hombres errados, vas por mal camino:

El hombre sólo está obligado a obedecer a Dios interna y externamente, mientras que la obediencia hacia los superiores eclesiásticos y civiles está meramente condicionada por su propia autoridad sobre la comunidad que dirigen y por la que deben responder ante Dios. Esto es por lo que puede ser necesario rechazar en conciencia obedecer una orden concreta, sin poner en duda la institución de los superiores eclesiásticos.
—Santo Tomás de Aquino, Summa Theologica II-II q. 104 a. 5.

La obedencia es obligatoria siempre , salvo los que órdenes sean pecados .
Es lo que aprendí.

El Santo Sacrificio de la Misa es el colmo del amor de Dios por el hombre, que envía a su Divino Hijo a morir en la Cruz para nuestra salvación. Que yo sepa, en España no ha prohibido el Gobierno que los templos estén abiertos. Por tanto, tomando las cautelas necesarias, ¿Por qué no pueden asistir los fieles al Santo SACRIFICIO de la Misa y recibir la Divina Eucaristía, Pan de Vida Eterna? El Obispo de Alcala de Henares, mantiene abiertas las Iglesias y la Santa Misa para que puedan asistir los fieles, con la debida cautela, por supuesto. Tengo 83 años, nunca ha ocurrido una cosa semejante en la Iglesia Católica de suprimir la asistencia de los fieles al Culto Sagrado que es más necesaria nunca debido a los tiempos apocalípticos que estamos viviendo, con un mudo totalmente corrompido. Obedecer sí, pero cuando no hay otro remedio y no se da esa circunstancia en esta ocasión. ¿Se ha plegado la Iglesia al mundo?