Devotio moderna: carta y respuesta a un lector

Días atrás publicábamos aquí una conferencia dictada acerca de esa corriente de espiritualidad llamada la “Devotio Moderna".

Como fruto de la misma hemos recibido varios mensajes de agradecimiento y, en algún caso, alguna pequeña crítica.

Publicamos ahora, con permiso de su remitente, una carta y su respuesta sobre un tema que, al parecer, no queda en el etéreo mundo de los intelectuales, sino que baja a algunas realidades, de las más tristes que existen.

Que no te la cuenten…

P. Javier Olivera Ravasi, SE


Apreciado Padre Javier: le escribo luego de haber leído y escuchado con mucha atención su conferencia sobre la Devotio Moderna. Pienso que tengo cierta formación, pero reconozco mi desconocimiento total sobre este término o corriente de espiritualidad de la que nunca antes había oído hablar.

Durante años he tenido una dirección espiritual que, para no cansarlo con detalles innecesarios, le puedo decir que se ajusta a todo lo señalado por Usted dentro de esa corriente. Hoy, al haberla dejado me ha parecido haber salido de una secta. 

Paso a narrarle algunos ejemplos por si llegara a servirle a Ud. o a alguno de sus lectores.

- Durante los años en que me vi envuelta en esta corriente de espiritualidad, mi voluntad era siempre la de mi padre espiritual; soy una mujer casada, profesional, normal, pero a lo largo del día le hacía todo tipo de consultas sobre cualquier decisión a mi padre espiritual, por pequeña que fuera.

- He vivido una vida de mortificación extrema en el sentido más amplio de la palabra tanto que, por un tiempo, llegué a convencer a mi esposo de no tener relaciones conyugales por no ser el camino de perfección trazado por Cristo (“si quieres ser perfecto…”, me repetía mi padre espiritual citándome el Evangelio del joven rico); creía que todo placer era malo.

Poco a poco, mi vestimenta comenzó a asemejarse a la de una menonita sin saber que allí no estaba necesariamente el pudor de una mujer cristiana.

Me alejé de todo aquello que me pudiera “contaminar"; todo era “mundano”, “malo”; todo me llevaba al infierno. Dios era siempre un juez vengador antes que un padre amoroso.

No hacía absolutamente nada sin consultar a mi director espiritual, tanto que, al final del día, hacía con él, telefónicamente, mi examen de conciencia; era algo exhaustivo y entraba en todos los detalles.

Mis meditaciones se basaban únicamente en la pasión de Cristo, a la cual intentaba unirme tras horas de oración por medio del dolor.

Todo iba así hasta la muerte de un familiar muy cercano, hombre santo pero que yo creía que, por no haber seguido el camino de mi vida espiritual, difícilmente pudiese entrar al Cielo. Este fue el momento bisagra de mi alma: ¿cómo alguien de vida sacramental, bueno, etc., no podría llegar al Cielo? Me cuestionaba pero se me pedía obediencia al director espiritual “como si fuese la voz de Dios”.

No culpo a nadie con todo esto; la culpa debe haber sido mía y quiero pensar que quien era mi director espiritual lo hacía con buenas intenciones, aunque errado en el modo de manejar a las almas (a todas de la misma manera). Dejé de frecuentarlo por un tiempo pero, luego, los escrúpulos me asaltaron y, en un momento de debilidad, volví a llamarlo quien me indicó que, para continuar, debía romper completamente con el mundo y renunciar todo lo que me ataba a él, como ser, arreglarme bella para mi esposo y otras cosas más (en esta cosmovisión, mi esposo mismo estaba fuera del plan de salvación).

A Dios gracias, un buen sacerdote me abrió los ojos y llegué a ver con claridad la locura en la que estaba metida.

Hoy por hoy he caído en ciertos excesos, intentando volver a la normalidad: buscando un equilibrio en las prácticas de piedad a veces he dejado incluso de confesarme y comulgar y hasta, a veces, de rezar. Pero todo por temer volver de nuevo a ese estado en el que me encontraba. Quiero estar cerca de Dios pero no quiero volver a lo vivido. Quiero retomar las prácticas de piedad y los sacramentos.

A veces tengo pesadillas con las palaras de mi director quien me decía que el demonio me atacaría por mi apego al mundo.

Cuando oí todo lo que Ud. exponía en su conferencia, pensé en todo esto y me decidí a escribirle. Todo esto me ha provocado un daño tremendo en mi relación con Dios y hasta con los sacerdotes, al punto que llegué a pensar que, más que huir del progresismo, había que huir del tradicionalismo.

Espero sepa entenderme.

Dios lo bendiga siempre. Suya,

N.N.


Y va nuestra respuesta

Estimada NN.:

            Gracias por compartir su testimonio. El tiempo apremia; seré breve.

1) El sacerdote que la “guiaba” quizás tuvo la mejor intención del mundo, pero de buenas intenciones está lleno el camino hacia infierno… La prudencia es virtud de medios y, los que estaba poniendo para aconsejarla, eran propios de un ciego que guía a otro ciego. A Dios gracias que lo abandonó; y que su marido no fue a darle una buena tunda al cura…

2) Déjese de jorobar y vuelva a confesarse; ud., como yo, es un alma pecadora, por lo que, la solución está en el sacramento de la confesión, lavarropas del alma y puerta del Cielo para quien bien se arrepiente. Si siente escrúpulos diga con San Felipe Neri: “¡escrúpulos y melancolía, fuera de casa mía!”. Y si no le sale, repítalo como una desquiciada varias veces (de ser necesario, en voz alta). Si por esto la toman por loca, no se aflija: peor pensaban de ud. antes cuando estaba bajo las garras de su director.

3) Busque un sacerdote sensato, con sentido común, si es santo, mejor, pero, sobre todo, que sea normal. Hoy, más que santidad, hay que pedir normalidad… Nadie es buen juez en causa propia por lo que, normalmente, necesitamos del consejo de otro. Si no lo encuentra ya se encargará Dios de ponerle enfrente a alguien prudente que sepa decir dos o tres verdades útiles para su alma.

4) Nadie se salva en altamar tirándose al agua, sino aferrándose al timón. Nadie decide quedarse soltera o hacerse lesbiana porque sus padres se divorciaron… La virtud no está en los extremos, sino en el punto medio. Las exageraciones en las que cae la corriente de la Devotio Moderna deben ser desechadas pero no por ello lo bueno debe tirarse. Nadie deja de comer por haberse empachado alguna vez; hay que comer lo justo. Lo contrario es de chiquillos. Supere esa tentación y busque la santidad allí donde Dios la haya puesto, sabiendo que, para llegar al Cielo, basta con cumplir los mandamientos (que ya con eso tenemos para rato…).

5) Cambie su vestidor, cómprese linda ropa y comience a maquillarse dignamente para su marido, pues quien no come en casa, va a comer en casa ajena… o mueren de ayuno.

6) Todos estos consejos son a su pedido; no son mandato; no son dogma; no son bajo pena de pecado. Si le sirven, bien y si no, al tacho. Amén

Dios la guarde,

Padre Javier

 


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29 comentarios

  
Anastasia
jajajaja...padre es usted muy gracioso. Pero bien dicho!! eso sí ,no puedo entender por qué algunas personas confunden al director espiritual con un consejero absoluto en todos los órdenes de la vida. Conozco a varios curas "buenos" que ahora se les dio por hacer dirección "espiritual" por celular o teléfono móvil.....mmm, a mamá mono con bananas verdes!!
30/07/19 1:17 PM
  
Fer
Buenazo.

Esas formas de "control mental" me recuerdan los de cierta agrupación. Donde uno de sus miembros me decía:

-"SIEMPRE... Levantarse a la misma hora, ¿eh? Siempre...".

-"Oye. Pero es que no siempre tengo el mismo horario, ni agenda... a veces, por trabajo llego tarde a casa... o salgo más temprano...".

-"No. Siempre a la misma hora. ¡Serviam...! Te levantad y dices ¡Serviam...!".
30/07/19 1:23 PM
  
Miguel Hinojosa
Una cosa es buscar la voluntad de Dios que es algo que debemos buscar a lo largo de toda nuestra vida y otra que tengas que consultar al sacerdote hasta que ropa ponerte. Algo que choca contra la libertad que nos da Dios. No olvidarse que Dios es justo pero misericordioso.

Lucas 18- 10«Dos hombres subieron al templo a orar; uno fariseo, otro publicano. 11.El fariseo, de pie, oraba en su interior de esta manera: "¡Oh Dios! Te doy gracias porque no soy como los demás hombres, rapaces, injustos, adúlteros, ni tampoco como este publicano. 12.Ayuno dos veces por semana, doy el diezmo de todas mis ganancias." 13.En cambio el publicano, manteniéndose a distancia, no se atrevía ni a alzar los ojos al cielo, sino que se golpeaba el pecho, diciendo: "¡Oh Dios! ¡Ten compasión de mí, que soy pecador!" 14.Os digo que éste bajó a su casa justificado y aquél no. Porque todo el que se ensalce, será humillado; y el que se humille, será ensalzado.»"
30/07/19 1:47 PM
  
Veritas
El problema con muchos fieles y directores espirituales no está siempre tanto en los carismas o devociones, sino en perder el sentido de la dirección espiritual :

El director espiritual no está para decirle a un alma lo que él desea, sino para ayudar a un alma a averiguar la voluntad de Dios para ella.

Porque los caminos de santificación son variados, aunque compartan todos elementos comunes bien conocidos de cualquier sabio hombre.

Por eso decía Santa Teresa que prefería un director sabio antes que santo.
30/07/19 1:48 PM
  
Percival
La devotio moderna (y el Kempis) han sido buenas para algunas épocas y para algunas personas, particularmente consagradas, y depende y cómo...
Pero este sacerdote probablemente exageró aún más algunas de sus líneas, e hizo daño espiritual.
Para los laicos es mucho mejor la "Introducción a la vida devota" de san Francisco de Sales. Auténtica y fresca.
30/07/19 1:57 PM
  
Ivan
Muchas gracias Padre, aprecio cuando la claridad es directamente proporcional a la sencillez!
30/07/19 2:01 PM
  
Ecclesiam
Vete a tratar de santidad con un hombre sin religión,
y de justicia con un injusto,
y con una mujer de otra que le da celos;
de guerra con el cobarde,
de cosas de tráfico con el negociante,
de la venta con el comprador,
con el hombre envidioso del agradecimiento,
con el impío de la piedad,
con el deshonesto de la honestidad,
de cualquier labor con el peón,
con el jornalero, asalariado por un año, de la obra que en él se puede hacer,
con el siervo perezoso del tesón en el trabajo.
Nunca tomes consejos de éstos sobre tal cosa.
Trata de continuo con el varón piadoso.

Eclesiástico 37


Si mi auto tiene falla mecánica, ¿voy con el médico o el carpintero? Obviamente que no, voy con el mecánico. Pero, ¿voy con cualquier mecánico? Obviamente que no, voy con uno que sea bueno. ¿Y si no hay mecánico bueno? Pues no voy al mecánico, porque el mal mecánico lo único que logrará es empeorar el auto.

Sentido común.

Mejor andar sin director espiritual, que andar con uno que sea malo. Y en esto, el mediocre ya es malo, porque el neurocirujano que habrá de operar o es muy bueno en lo que hace, o sencillamente es malo; un milímetro de error y el paciente muere o sufre daños permanentes. ¡Y cuánto más alto, perfecto y grave es el oficio del director espiritual sobre el del neurocirujano! Un milímetro de error y el dirigido va al infierno o sufre daños permanentes (Como lo atestigua la persona del relato).
30/07/19 2:15 PM
  
Victoria
El mejor director espiritual es el Espíritu Santo. Pedir el don de discernimiento es esencial todos los días y yendo de la mano de nuestra Madre Santísima, Su Esposa, es camino seguro. Bien lo dice Ella: Devoción al Santo Rosario es signo de predestinación.
30/07/19 2:15 PM
  
Palas Atenea
¡Qué barbaridad! No sabía que hubiera sacerdotes que anularan hasta tal punto la conciencia individual. Además, la Devotio Moderna es peligrosísima en tiempos de persecución porque si los sacerdotes escasean el laico queda anulado en momentos en que, precisamente, necesita más de una libertad de conciencia que le permita resistir la adversidad. Últimamente he leído dos novelas, "El Conde de Chanteleine" de Julio Verne, que se desarrolla en La Vendée en tiempos del Terror, y "A la horca" de Robert Hugh Benson, que habla de la persecución de católicos en la Inglaterra Tudor, y en ambas los laicos parecían tener una capacidad de decisión, un arrojo y una brújula interior que les guiaba a pesar de la falta de sacerdotes a los que no veían en meses y, a veces, en años. Y no digo nada de la situación que puedan estar en este momento los católicos chinos que a veces se quedan solos porque meten en la cárcel a sus sacerdotes. ¡Ni tanto ni tan calvo!
30/07/19 2:58 PM
  
Lego
Llevo años buscando un director espiritual y no hallo ninguno...¿qué se hace en estos casos?

Padre Javier: Entonces, ¿desaconseja Ud. la Imitación de Cristo de Kempis?
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"¿qué se hace en estos casos?": más vale, si es como el de la carta, no tener ninguno.

"¿desaconseja Ud. la Imitación de Cristo de Kempis?": no estrictamente. Hay que leerlo con cuidado, nada más. "Examinadlo todo... quedaos con lo bueno", dice San Pablo. Dios lo bendiga. PJOR
30/07/19 3:57 PM
  
Renée
En tiempos no tan lejanos los médicos operaban sin anestesia. Y hacían sufrir horrorosamente a sus pacientes.

¿Eran unos sádicos?

No. Simplemente no se había descubierto la anestesia.

Valga la analogía. Lo que fue bueno o necesario para una época, puede ser letal para hoy. "Examinadlo todo... quedaos con lo bueno", dice San Pablo. Muy bueno es recordarlo, padre. Y me encantó eso de no por tener un empacho hay que dejar de comer y que nadie se salva en altamar tirándose al agua.
30/07/19 5:27 PM
  
Renée
Por cierto, padre: o mucho me equivoco, o Imitación de Cristo JAMÁS aconsejó a los casados descuidar sus deberes conyugales.

Me temo que el "director" en cuestión más proyectaba sus tormentas interiores en esa buena señora que otra cosa.
30/07/19 5:37 PM
  
José Ángel Antonio
Ayer leí acerca de Santa Juana de Chantal, que estuvo muchos años esclavizada por un director espiritual rigorista y posesivo, que le hizo jurar que no hablaría de nada espiritual con nadie más, que todo lo tenía que tratar con él, que no podía matizar nada de lo que él ordenaba, etc... La tenía atada. No pudo liberarse hasta que San Francisco de Sales pasó por allí y le dijo que lo dejara y que sus votos, etc, no valían nada.

Parece que es un caso clásico.
30/07/19 6:06 PM
  
César
Le digo con todo el cariño, Padre Javier, que esto de la "devotio moderna" no es otra cosa que un "MacGuffin" (en su acepción de las películas de Hitchcock) para tratar de derruir la poca vida de piedad que nos queda. Y es un "MacGuffin" porque nadie cae en esos defectos, y mucho menos hoy (subrayo: nadie, salvo alguna rarísima excepción como la carta que muestra)... y, no dándose en la realidad, sí que pone una trama en marcha, al igual que en las películas. ¿Cuál es esa trama? Veamos:

Dice que es un defecto que puede darse en sectores "tradicionales" o "conservadores". Hmmm... ¿qué significan esos adjetivos? ¿se puede ser cristiano al margen de la Tradición? Ya vemos al "MacGuffin" poniéndose a funcionar en la película: primero, lo que denuncia no es real; y segundo, ya está presentando como malas unas cualidades que en realidad son buenas.

Intuyo una posible reacción de "¿cómo que no es real? ¡pero si veo casos todos los días!". Si usted u otro lector sienten dicha reacción, o bien no están haciendo una valoración bien fundada de las personas que creen caer en este defecto, o bien se están engañando a ustedes mismos.

Porque yo, en el año 2019, no conozco a nadie que "los sábados mediten sobre los pecados; los domingos sobre el Reino de los Cielos; los lunes sobre la muerte, los martes sobre los beneficios de Dios; los miércoles sobre el Juicio; los jueves sobre las penas del infierno; los viernes sobre la Pasión del Señor". ¿De verdad los conocen ustedes? ¡¡Preséntenmelos!! Y, si no los conocen, ¿por qué poner un ejemplo que no es real? ¡¡Es que no es real en 2019, pero tampoco lo fue en 1936 cuando mis padres eran niños!!

Y si aún no lo ve como "MacGuffin", en alguno de los comentarios se lanza la indirecta de que cierta prelatura de la Iglesia cae en la "devotio moderna", cuando ¡¡nada más lejos de la realidad!! ¿Conocen de verdad a dicha parte de la Iglesia? ¿Han intentado demostrar a sus miembros que no todo lo que hay en el mundo es bueno, y que los enemigos del alma son mundo, demonio, y carne? Les invito a que lo intenten, porque la conclusión no es otra que les están poniendo una etiqueta radicalmente opuesta a ellos.

¿Es "devotio moderna" decir que los enemigos del alma son mundo, demonio, y carne? Supongo que sí... pero... léase el magnífico escrito que el P. Iraburu tiene sobre mundo, demonio, y carne aquí en InfoCatólica. Sigue poniéndose en evidencia el "MacGuffin", haciendo dudar de la verdad de dicho magnífico escrito del P. Iraburu.

¿Podremos leer los Ejercicios Espirituales de S. Ignacio de Loyola con la misma naturalidad y libertad que lo hemos hecho siempre, o hay que ir ahora con cuidado y velar en cada una de nuestras meditaciones no sea que caigamos en la "devotio moderna"? El "MacGuffin" sigue desarrollando la trama.

Quizás alguien podría preferir llamar a la "devotio moderna" un "caballo de troya" en vez de "MacGuffin", pero el caballo de troya es un regalo real (fraudulento, pero real), mientras que el "MacGuffin" es algo anecdótico, irrelevante, pero que se emplea para poner en marcha toda la trama narrativa.

Insisto, P. Javier, se lo he dicho con todo el cariño. En conciencia tenía que hacerlo.
30/07/19 9:35 PM
  
claudio
Ya que has invocado a Chesterton hay que tener siempre presente su afirmación categórica (aristotélica) "La aventura podrá ser loca, pero el aventurero ha de ser cuerdo".
Con todo respeto bastaría que hubieras contestado únicamente lo que dices en las palabras que copio: "Busque un sacerdote sensato, con sentido común, si es santo, mejor, pero, sobre todo, que sea normal".
Ahí está todo dicho (suena tan raro) que vale repetirlo hasta convencerse.
El sensato vs. el necio (según los griegos lo que altera un necio no lo reparan 20 sabios, traducido al idioma río platense resultaría "lo que rompe un boludo no lo arreglan 20 vivos").
Regresando a Chesterton GK, en Por qué soy católico dice " “Cuando me preguntan: «¿Por qué la Iglesia católica?», la respuesta capital, aunque resulte un poco elíptica, es «para liberarme de mis pecados», ya que no existe ninguna otra religión que realmente pueda librar a la persona de sus pecados.”

30/07/19 10:49 PM
  
Anastasia
Cesar aprendió lo de McGuffin y quiere aplicarlo a como dé lugar, forzando , metiendo con calzador para que entre su teoría. Estamos obligados, como decía el padre Castellani, a decir la verdad , no a convencer a los necios.
30/07/19 11:05 PM
  
Ricardo de Argentina
"Hoy, más que santidad, hay que pedir normalidad."
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Padre, sospecho que debería usted revisar qué es lo que entiende por "santidad".
Y le digo más: teniendo en cuenta qué es lo que el común de la gente entiende por "normalidad", que lejos de significar atenerse a las normas, se considera que es lo que la mayoría hace y acepta, alucino que un sacerdote aconseje sin más, anteponer la "normalidad" a la santidad cristiana.

Dios lo ilumine.

¡Santidad o muerte!
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Lamento que las ironías no siempre se capten en los escritos. Dios lo guarde. PJOR
31/07/19 5:08 AM
  
Tulkas
San Pablo soluciona los quebraderos de cabeza que deben de dar las mujeres en el confesionario de manera magistral: “la mujer se salva por la maternidad”.
31/07/19 7:19 AM
  
Manoletina
Ese cura es un psicopata. Ni buenas intenciones ni nada.

La señora que le envio la carta, padre, tal vez sea una persona que necesite algun tipo de ayuda psicologica, pues estos manipuladores, se fijan en las personalidades mas debiles y vulnerables para ejercer su dominio.

Ademas, creo que el obispo deberia ser informado del comportamiento de ese sacerdote. Es una persona peligrosa.
31/07/19 7:40 AM
  
DJ L
"...debía romper completamente con el mundo..."

Cristo redimió al mundo y ahora tengo que renunciar a algo que ha costado tanto?

Esta herejía de "cuerpo malo, mundo malo" ya es muy vieja y creía aparcada en la cuneta de la Historia pero ya veo que estamos ante un espectáculo revival.
31/07/19 7:43 AM
  
César
Vamos a ver, seamos francos por favor:

¿Escuchan homilías que incidan insistentemente en la mortificación y penitencia? ¿Se organizan periódicamente en sus parroquias charlas formativas sobre el pudor en el vestir? ¿Hay reclinatorios en la inmensa mayoría de las iglesias de su ciudad para que quien desee comulgar de rodillas pueda hacerlo con naturalidad sin causar distracciones a los demás? ¿Son muy frecuentes en sus comunidades menciones repetitivas a temas tales como que los pastorcitos de Fátima vieron que las almas caían en el infierno "como copos de nieve" y que la Virgen les dijo que el niño Francisco tenía que rezar muchos Rosarios antes de ir al Cielo? ¿Conocen algún grupo -exceptuando los surgidos de Medjugorje- que habitualmente recen varias partes del Rosario al día? --miren por dónde, muchas personas alejadas de la fe van a Medjugorje y allí se sienten llamadas a rezar varias partes del Rosario al día ¿por qué será?-- y sigo: ¿Recuerdan algún funeral reciente en el que no se asegurase que el difunto "ya estaba gozando en la casa del Padre"? ¿Están acostumbrados a escuchar que no tiene el mismo valor el ayuno a pan y agua que el ayuno "de ver televisión"?... y podría seguir, pero creo que es suficiente.

Si han contestado afirmativamente a alguna de las preguntas anteriores, den datos que lo demuestren, por favor. Al menos en mi ciudad -y en mi país, España- todas las preguntas anteriores tienen una respuesta negativa, sin excepción: no, nada, zero, null.

¿Cuál es entonces la "amenaza" de la "devotio moderna"? Todas esas preguntas que he escrito versan sobre cosas muy buenas, que deberían darse para ser mejores cristianos y practicar la caridad con el prójimo en plenitud. Pero, además de ser cosas buenas, también son necesarias para que pudiese ser cierta la teoría de que la "devotio moderna" es un riesgo muy frecuente (a no ser que ahora digan que la "devotio moderna" puede darse en el contexto de la teología de la liberación con camisetas hawaianas y cantando música de cantautor --en cuyo caso la conversación podría dar para bastante más, y sería buena idea bajar a comprar un paquete de palomitas para seguirla).

Conclusión: Para que sea viable la teoría de que estamos en grave riesgo de caer en la "devotio moderna" hace falta que se den con frecuencia cosas que, además de ser buenas, hoy en día no se dan, ni con frecuencia ni sin ella.

No pongo en duda la veracidad de la carta del post, pero no es fruto de, como tratan de decir, ser "conservadores" o "tradicionales" (la mera mención de tales etiquetas -fraudulentas como cualquier etiqueta- ya deja vislumbrar que el enfoque es errado desde el principio). Y por cierto, las acusaciones hacia la supuesta prelatura de la autora, vertidas en los comentarios, son irrisorias, y se nota que no los conocen bien (aclaración: no, no pertenezco a ella, por no ser mi espiritualidad).

Al asustar con el fantasma de la "devotio moderna", lo que se está haciendo no es alertar de ningún peligro que realmente exista, sino hacer que la gente dude ante cosas que son buenas. Si ya andamos escasos de vivir plenamente la máxima de "gustar internamente" (en que tanto insistía S. Ignacio de Loyola, a quien celebramos hoy), faltaba el "unicornio rosa" de la "devotio moderna" para poner en riesgo los pocos brotes que pueda haber.

Lo que se está haciendo con esto es lo mismo que si un niño va a comerse un delicioso bocata de calamares recién hecho y vas y le dices "en el mar hay calamares gigantes que se comen a las personas". Es lo mismo.

Y ya saben lo que dijo Jesús sobre errar en la enseñanza: "Quien escandalizare a uno de estos pequeños que creen, más le valdría que le colgasen al cuello una rueda de molino que mueven los asnos y lo arrojasen al mar" (Marcos 9:42, en la traducción tomada del libro "Los Evangelios. 2000 dudas resueltas" del Padre Jorge Loring, S.I.)

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Gracias, pero mis lectores son personas inteligentes, adultas y criteriosas, salvo honrosas excepciones. PJOR
31/07/19 11:31 AM
  
Vicente
El Director espiritual aconseja, pero después cada uno debe hacer lo que crea correcto a los ojos de Dios.
31/07/19 12:23 PM
  
Ricardo de Argentina
Lamento que las ironías no siempre se capten en los escritos. Dios lo guarde. PJOR
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Pero Padre, las ironías pueden captarse cuando se escriben como tales. Por ejemplo, si usted hubiese escrito "santidad" entre comillas la ironía quedaba clarísima, al entenderse que usted se estaba refiriendo a una particular -y falsa- interpretación de lo que es la santidad.

En otro orden, lamento no poder compartir su tesis de que el jansenismo victoriano que pueda sobrevivir todavía en algunos puntuales círculos católicos, tenga su origen en la D.M. de la Imitación de Cristo.
Pero aunque así fuese ello sería irrelevante, porque el gran problema hoy en día no es una piedad deformada, sino lisa y llanamente una falta casi absoluta de piedad y devoción.
31/07/19 1:32 PM
  
Leonardo
A Devotio Moderna (sobretudo a Imitação de Cristo) gerou santos. A história e o testemunho deles fornece a prova. Mas a crítica impiedosa da Devotio Moderna (e, com ela, a Imitação de Cristo): que santos produziu?
31/07/19 2:36 PM
  
Toni Lerma
La “devotio moderna” tiene un origen germánico y tiene raíces comunes con el erasmismo, el luteranismo y el calvinismo. Está influida por la mística renana de Eckart, impregnada de gnosticismo, y por el agustinismo. A mí personalmente me gusta más el cristianismo latino y tomista, con un mejor equilibrio de fe y razón, y de fe y obras.
31/07/19 2:51 PM
  
julián
Estimado Padre Javier:
Le leo siempre y me encanta su defensa de la fe cristiana y de la historia de la Iglesia. Hasta hace algún tiempo compartía esta visión de la Devotio Moderna, basada sobre todo en la tesis de François Vandenbroucke. Pero hace poco leí este artículo de la Conferencia Episcopal italiana, de un autor llamado Claudio Stercal: www.conferenzaepiscopale.it/cci_new/documenti_cei/2002-04/19-17/Stercal.rtf
Esto me ha hecho dudar. Me gustaría que, si puede, me diera su opinión.
¡Muchas gracias de antemano!

31/07/19 3:56 PM
  
Lego
P. Javier, ¿es válido pedir dirección a un santo, santa, o sacerdote o religiosa muerta en "olor de santidad"? (desde luego en la oración...).
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Válido es, lo que no sé si es lo más conveniente...; yo le pediría más bien al que no falla: al Espíritu Santo: en definitiva, el gran director de nuestra santidad.
31/07/19 5:11 PM
  
Marcos
Tenga el valor padre de atacar abierta y directamente al libro "la imitacion de cristo" en lugar de esconder sus ataques bajo el titulo "la corriente de la devotio moderna", porque lo que usted, Caponetto, Highton y en general, toda la rama tradicionalista del IVE, y los grupos tomistas en realidad hacen es atacar a este libro atacando a algo tan variado y confuso como una "corriente" la cual tuvo muchas variantes, excesos y discrepancias. No tengo duda de su buena intencion y entiendo perfectamente que lo que usted intenta es que a los fieles no les pase lo que le pasó a esa mujer de la carta. Pero permitame decirle que la culpa no es del Kempis. Y no sé que es peor, decir que el Kempis no sirve o decir que el Kempis dice muchas cosas buenas PERO. Lo que aqui se pone sobre la mesa con estas discusiones es una falsa dialectica; la escolastica vs la mistica, los monjes vs los misioneros, la
oracion vs la accion, la cruz vs la epica. El libro de Kempis jamas entra en esa falsa dialectica, es mas, critica una tendencia muy comun en su epoca que era la de discutir que santo era mejor que otro, sopesando las acciones externas de cada uno en lugar de discurrir con que intencion o humildad habian actuado. Lei en un articulo de Caponetto la critica de una frase sacada de contexto del Kempis: "mas vale guardarse en casa que aventurarse en el trato con lobos y dragones". De aqui dedujo Antonio que la Imitacion niega la epica y la accion e incita a quedarse en casa sin hacer nada. Esta es una interpretacion extrema, errada y peligrosa porque omitió la parte clave, "MAS VALE", ese "mas vale" está jerarquizando prioridades, ya que hay dos formas de salir a combatir dragones, por la gloria de Dios o por la gloria propia. Si vas a salir a conquistar el mundo a lo Napoleon guardando un secreto amor propio y deseo de reconocimiento, entonces mejor quedate en casa, ahora, si verdaderamente buscas la gloria de Dios y su reyecia terrena y por ese celo estas dispuesto a sacrificar tu reputacion, status, riqueza, entonces Dios mismo te dará la lanza y el caballo. Por tanto, la accion externa no vale nada a los ojos de Dios sin la intencion interna, y ésto es lo que enseña magistralmente el Kempis. Del mismo modo, de nada le sirvió a los apostoles expulsar demonios y curar enfermos milagrosamente (incluso Judas) si despues lo abandonaron cobardemente en el huerto. Por el contrario, la gloria de los apostoles estuvo en negarse a si mismos, reconociendo su propia flaqueza y el poder de la gracia. Luego de eso, los milagros que obraron fueron para gloria de Dios, no asi los primeros milagros que fueron para gloria propia. Del mismo modo hubieron dos tipos de cristianos que fueron a las cruzadas, los que buscaban su propia gloria y la de su apellido y los que solo buscaban la gloria de Dios como San Francisco. No consistió tampoco la gloria de Santa Juana de Arco en liberar a Francia ni ganar batallas militares, eso fue gloria de Dios, caso contrario, Dios hubiese buscado a un militar hombre y preparado en el arte de la guerra en lugar de una campesina debil e inculta, lo mismo podriamos decir del rey David. Por el contrario, la gloria de Santa Juana fue enfrentarse a si misma luego de ser apresada y sometida a un falso juicio. Esta es la gloria que Dios quiso compartir con la santa. Del mismo modo que la gloria de Jesus no fue hacer milagros ni hacer callar a sus rivales, sino el vencer a su carne y por tanto a la muerte en la cruz. Esto fue lo que le valió a Jesus su entrada gloriosa en el Cielo y fue tambien lo que le valió a Maria su entronizacion como Reina del Cielo. Todo esto se sobreentiende leyendo el resto del Kempis, pero si el Kempis comenzara a abrir parentesis en cada frase para no herir susceptibilidades, la frase pierde la fuerza y deja de ser una máxima. Este tipo de interpretaciones simplistas tambien se podrian aplicar a Jesus. Por ejemplo 1) cuando Jesus dice: "si tu mano derecha te
hace pecar mejor cortala y arrojala lejos", alguien podria decir que Jesus
promueve el rigorismo y el fanatismo. 2) Cuando dice "he venido a poner al hijo contra el padre" o "el que no me ama mas que a su familia no puede ser mi discipulo", uno podria decir, que Jesus promueve una secta aislando al individuo de sus seres queridos. 3) Cuando dice "te alabo Padre porque has ocultado estas cosas a los soberbios", uno podria decir que Jesus es anti intelectual y populista. 4) Cuando dice "es mas facil que un camello pase por el ojo de una aguja a que un rico entre en el Cielo" uno podria decir que Jesus era un marxista revolucionario anti elitista y que ataca la propiedad privada. Si Jesus para no perder adeptos interrumpiera a cada rato su discurso con frases como "no es que esto sea malo PERO" o "no es que yo este en contra de esto PERO", sus enseñanzas perderian la fuerza y nadie las recordaria. Con estos cuatro ejemplos (hay cientos) uno podria decir, que el evangelio "tiende" o "incita" a la revolucion de clases como de hecho lo afirman los curas tercermundistas, o que "promueve" el sectarismo fanatico. Por eso creo que es peligroso atacar al Kempis, porque el lenguaje del Kempis es el mismo que el lenguaje del evangelio, incluso menos extremo o mas suave que el evangelio. De hecho en su simplicidad de lenguaje
esconde la realidad de que la mayoria de sus parrafos si no son frases textuales de terceros (la biblia, santos padres, o filosofos griegos o romanos), son una interpretacion mas simple de los mismos, porque poco escribia Kempis de su propio sentir, mas bien, solo ordenaba las frases de otros y las orientaba hacia un unico destino, la gloria de Dios.
Este tipo de discusiones se ha dado en toda la historia de la iglesia y son totalmente esteriles. Es el corazon creyendose mas importante que el higado y la cabeza mas importante que el corazon. Parece que no han entendido el concepto del cuerpo mistico de la iglesia. La doctrina de la iglesia podrá estar respaldada por una solida filosofia helenistica, pero eso no quita la sabiduria simple que Dios ha "ocultado a los soberbios", ni tampoco la contradice, solo la complementa y la respalda. Es tan falsa esta dialectica que San Pablo dijo: "los judios piden señales y los griegos buscan sabiduria pero nosotros predicamos un cristo crucificado, piedra de tropiezo para judios y locura para los griegos". Nuevamente, uno podria decir que San Pablo va contra la intelectualidad y la epica, y promueve un cristianismo basado en la cruz y por tanto, un cristianismo lugubre y derrotista. El kempis usa ese mismo lenguaje y pone a la cruz como el maximo ideal cristiano cuando dice "en la cruz esta la salvacion, en la cruz esta la vida, la cruz es mas poderosa que la espada...". Si vas a tener miedo de leer el Kempis por lo que "promueve" o lo que "insinua" o "incita" entonces ¿para que vas a leer el evangelio ya que "incitó" al luteranismo, al arrianismo, al catarismo y a todas las herejias? o se olvidan de que todas las herejias estan fundamentadas con frases sacadas de contexto de la bliblia. No caigamos por tanto en el error de despreciar la mistica y la ascetica de la iglesia. Hace varios años hubo un exorcismo a una mujer, donde la Virgen supuestamente obligó a los demonios a decir la verdad, podemos o no creer en esto, o podemos analizar lo que dice y sacar nuestras propias conclusiones. Ahi vá : "... debo agregar (habla el demonio a traves de la posesa) que es preciso que ese libro repugnante, la Imitación de Cristo, de Tomas Kempis, que nosotros allá abajo tanto tememos (gime como un perro), sea citado, difundido y leído. No debe faltar en ninguna familia Católica y debe ser leído. Lo mejor sería leer un capítulo todas las noches y esforzarse en seguirlo y poner en práctica sus enseñanzas. En la medida de lo posible, debería leerse la antigua completa; la edición moderna ya tiene algunas modificaciones. ¡Con el andar del tiempo terminan por cambiar todo! Por eso deben tratar de leer los libros antiguos. Si existieran pocos será preciso reeditarlos. En todo caso, también predicar sobre la Imitación de Cristo, utilizar y desenvolver los asuntos que en el se encuentran, inculcarlos en el corazón de los fieles. Es una obra que viene del Cielo. El Cielo es quién lo recomienda, ya que el pone la cruz de Cristo sobre los ojos de todos, concretamente, enseñando como se debe imitar la Cruz de Cristo. Así. El hombre aprende como Cristo sufrió y como el mismo deberá sufrir si quiere avanzar un paso o un centímetro detrás de Él. Debe tener siempre presente que, con todo eso, todavía estará lejos de ser un Santo y que debe juzgarse con humildad. Es imprescindible que insistan en este punto.... El libro La Dolorosa Pasión de Nuestro Señor Jesús Cristo, los libros de la venerable Catarina Emmercih, así como los de María Jesús de Ageda, y el librillo Imitación de Cristo de Tomas Kempis, tienen gran valor (gime). No quiero hablar de eso. Es preciso que estos libros sean difundidos. Mas también es necesario buscar en ellos temas para las homilías, ideas, y lo que sea mas importante para el confundido mundo de hoy, para los fieles de nuestro tiempo. " Cierro cita.
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Gracias por su largo comentario. Dos cosas nomás: tanto el padre Federico Highton como yo no estamos más en el IVE; nos fuimos hace años y por razones graves.
Por lo de la Imitación de Cristo, prefiero al Cristo verdadero. Dios lo guarde. PJOR
31/07/19 5:54 PM
  
Belen Vasconcelos
Como lo ha explicado tantas veces el P.Javier, cada alma es única, y como yo interpreto lo demas, cada alma tiene su propia historia, sus propias cruces que no son las mismas que las de los demas, sus propios pecados, sus propios tiempos de conversión, sus propios dones del Espíritu Santo y una forma de ser única. Debemos seguir la Voluntad de Dios que El preparó para nosotros, y que no es la misma que preparó para otros.
Yo también prefiero al Cristo Verdadero, y personalmente a mi este tema me ha ayudado muchísimo y me sigue ayudando. Nunca me cansaré de agradecer la luz y paz que trae a nuestra alma.
07/08/19 8:33 PM

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